Mazowiecki propone una amplia coalici¨®n de partidos procedentes de Solidaridad

Tadeusz Mazowiecki, jefe de la Uni¨®n Democr¨¢tica, ha propuesto a todos los partidos procedentes de Solidaridad la creaci¨®n de un Gobierno estable en Polonia, tras el resultado brindado por los primeros comicios legislativos democr¨¢ticos, que han dado una gran fragmentaci¨®n que amenaza con provocar el estancamiento pol¨ªtico. Seg¨²n los datos parciales, en la c¨¢mara baja podr¨ªan entrar hasta 19 partidos pol¨ªticos. El m¨¢s votado, la Uni¨®n Democr¨¢tica, s¨®lo obtuvo un 12% de los sufragios, mientras que los antiguos comunistas y sus colaboradores quedaron segundos y terceros.

Seg¨²n los datos parciales, los seis principales partidos procedentes de Solidaridad consiguieron un 48% de los votos, pero las discrepancias sobre la continuaci¨®n de la pol¨ªtica de ajuste econ¨®mico, que la derecha desea suavizar, y las enormes animosidades personales hacen que la coalici¨®n en torno a las ra¨ªces de Solidaridad sea pr¨¢cticamente imposible.La enorme dispersi¨®n de votos estuvo acompa?ada de muy alta abstenci¨®n. Apenas unos 11 millones de votantes, un 40% del censo, participaron el domingo en la llamada fiesta de la democracia. Esta postura no puede atribuirse al mal tiempo que hizo en Polonia; la verdadera raz¨®n es el profundo desencanto de la sociedad con "el retorno a la democracia y el capitalismo", que por el momento ha producido una recesi¨®n del orden del 40% y dos millones de parados.

El voto de castigo contra las ¨¦lites gobernantes se reflej¨® en los resultados, m¨¢s bajos que lo esperado, del sindicato Solidaridad, que consigui¨® un escaso 5% de los votos, y de los partidos que estuvieron, o est¨¢n, en el Gobierno: Uni¨®n Democr¨¢tica (13%), Congreso Liberal Dem¨®crata (7%), Coordinadora del Centro (8,5%). En cambio, los ex comunistas consolidaron su posici¨®n de las presidenciales del a?o pasado y consiguieron una muy buena segunda posici¨®n con un 11,5%. El tercer puesto correspondi¨® a los ex sat¨¦lites de los comunistas, el Partido Campesino Polaco, que obtuvo un 9,2%.

Gracias a la propaganda de la Iglesia, que desde los p¨²lpitos reparti¨® las instrucciones electorales, el partido m¨¢s votado de la derecha polaca fue la radical Uni¨®n Nacional Cristiana, con el 9%. En conjunto, los partidos apoyados m¨¢s o menos abiertamente por la Iglesia cat¨®lica consiguieron un 26% de los sufragios, cifra que dif¨ªcilmente puede considerarse como un gran ¨¦xito. Los ataques encubiertos de la jerarqu¨ªa y los abiertos del presidente Lech Walesa contra los ex comunistas parecen haber sido contraproducentes.

Pese al hecho de que, seg¨²n los datos parciales, la Uni¨®n Democr¨¢tica sea el partido m¨¢s votado y de que haya propuesto "una gran coalici¨®n de Solidaridad", es harto improbable que el presidente Walesa le encargue formar Gobierno, porque est¨¢ interesado en formar un Gobierno democristiano, seg¨²n dijo en v¨ªsperas de las elecciones.

En consecuencia, es posible que el nuevo Gobierno se forme en torno a los partidos cristianos con apoyo de Solidaridad y, quiz¨¢s, de la Confederaci¨®n de la Polonia Independiente, un partido nacionalista antisovi¨¦tico que obtuvo m¨¢s del 7% de los votos. Tan amplia coalici¨®n de seis partidos de la derecha no asegura la mayor¨ªa en el Parlamento. La formaci¨®n de esta coalici¨®n minoritaria es posible, pese a las fuertes luchas personales entre sus l¨ªderes, por tener todos sus eventuales integrantes el objetivo com¨²n de acabar con la actual pol¨ªtica econ¨®mica de ajuste, a la que responsabilizan de la profunda recesi¨®n del pa¨ªs.