La aprobaci¨®n de la ley de la 'mili', pendiente de que el PP le d¨¦ hoy su apoyo

La aprobaci¨®n de la nueva Ley del Servicio Militar, que deber¨ªa aplicarse a los 200.000 j¨®venes que ser¨¢n sorteados el domingo -su entrada en vigor est¨¢ prevista para el 1 de enero de 1992-, depende de que el Grupo Popular d¨¦ hoy su voto afirmativo al proyecto del Gobierno en el Pleno del Congreso. La decisi¨®n del Grupo Catal¨¢n de abtenerse en la votaci¨®n de la ley, tras una negociaci¨®n en la que el PSOE le lleg¨® a ofrecer la exenci¨®n de la mili para quienes firmen por cinco a?os con las polic¨ªas auton¨®micas, ha dejado en manos del Grupo Popular el futuro del proyecto.

La Ley del Servicio Militar tiene car¨¢cter org¨¢nico por lo que el PSOE necesita el voto favorable, y no s¨®lo la abstenci¨®n, de alg¨²n otro grupo para aprovarla. Pedro Moya, del Grupo Socialista, y Santiago L¨®pez Valdivielso del Grupo Popular, negociaban ayer tarde el apoyo del principal partido de la oposici¨®n al texto. Este apoyo parec¨ªa probable, pero no seguro. El ¨²ltimo tema en disputa era el referido al env¨ªo de soldados de remplazo al extranjero.El PSOE rechaz¨® una enmienda de los populares que exig¨ªa la aprobaci¨®n de un decreto para que pudieran participar reclutas en misiones militares fuera de Espa?a. Los socialistas se negaron a esa pretensi¨®n con el argumento de que los decretos son recurribles ante los tribunales y, en su opini¨®n, una medida de este tipo no debe estar sujeta al control judicial, sino s¨®lo al pol¨ªtico a trav¨¦s del Parlamento. El Grupo Popular se mostr¨® dispuesto, no obstante, a admitir una f¨®rmula que dejara claro que s¨®lo en situaciones excepcionales se mandar¨¢n al extranjero j¨®venes que est¨¦n cumpliendo la mili.

Pedro Moya entreg¨® el martes por la noche al Grupo Popular y al Catal¨¢n las enmiendas transaccionales que el PSOE presentar¨¢ en el pleno de hoy. Adem¨¢s de la que ampliaba a los polic¨ªas auton¨®micos la exenci¨®n de la mili prevista para la polic¨ªa nacional, que fue retirada al frustrarse el pacto con los catalanes, otra de las enmiendas afecta a la disposici¨®n m¨¢s controvertida del texto, la que regula el acceso a empleos p¨²blicos.

En su nueva redacci¨®n, el art¨ªculo no dice que quienes hayan cumplido la mili, la prestaci¨®n sustitutoria o est¨¦n exentos de ambas tendr¨¢n preferencia para el acceso a empleos p¨²blicos, sino que se?ala que "para el ingreso en las Administraciones P¨²blicas los espa?oles deber¨¢n acreditar estar al corriente de las obligaciones previstas en el art¨ªculo 30.2 de la Constituci¨®n"; es decir, de la mili o el servicio civil. La nueva redacci¨®n, que seg¨²n fuentes del Grupo Socialista podr¨ªa sufrir cambios de ¨²ltima hora, convierte la preferencia en requisito, por lo que es m¨¢s contundente que el anterior, pero en cambio no perjudica, como ocurr¨ªa antes, a quienes tengan pr¨®rroga para el servicio militar o la prestaci¨®n.

El veto para el acceso a empleos p¨²blicos se limita as¨ª a insumisos y desertores. En la justificaci¨®n de motivos se dice que, entre los objetivos, est¨¢ "evitar el acceso a puestos de trabajos en las Administraciones P¨²blicas a personas que se niegan a cumplir sus obligaciones constitucionales".