Las mujeres maltratadas podr¨¢n rehacer sus vidas en un centro de recuperaci¨®n

Un centro de atenci¨®n, recuperaci¨®n y reinserci¨®n de mujeres maltratadas, ¨²nico de estas caracter¨ªsticas que existe en Europa, se inaugura hoy en un municipio cercano a Madrid. Despu¨¦s de dos a?os de espera, algunas de las mujeres espa?olas maltratadas tendr¨¢n la oportunidad de rehacer sus vidas. Por motivos de seguridad, sus responsables prefieren no anunciar su emplazamiento concreto. El presupuesto del centro es de 300 millones de pesetas.

Con capacidad para 30 mujeres y 60 ni?os, el centro "no es una casa de acogida o un centro de emergencia para mujeres maltratadas", recalca Ana Mar¨ªa. P¨¦rez, presidenta de la Federaci¨®n de Asociaciones de Mujeres, Separadas y Divorciadas, sino "la fachada" de un programa estatal dirigido a las mujeres; que sufren malos tratos. Seg¨²n Ana Mar¨ªa, estas mujeres, de no recibir una atenci¨®n adecuada, ver¨ªan "hacerse cr¨®nica su condici¨®n de v¨ªctimas".La federaci¨®n que preside Ana Mar¨ªa gestionar¨¢ el centro durante 30 a?os, a tenor de una concesi¨®n administrativa otorgada por el Ministerio de Asuntos Sociales, que ha desembolsado el importe total de la inversi¨®n. Pasado este tiempo, el centro pasar¨¢ a manos del, Estado.

Las mujeres tendr¨¢n que ajustarse a un perfil prefijado para poder acceder al mismo. ?ste ha sido distribuido en las diferentes casas de acogida y en los servicios sociales de organismos p¨²blicos y privados. Los criterios de selecci¨®n son, entre otros, ser maltratada fisica y / o psicol¨®gicamente por su pareja o familia; tener entre 18 y 50 a?os; tener un n¨²mero medio de hijos entre cero y tres con edades que no superen los l3a?os para los ni?os e ilimitado para las ni?as, y nivel econ¨®mico bajo. Las mujeres o sus hijos o hijas que padezcan psicopatolog¨ªas graves, adicciones al alcohol o las drogas, enfermedades infecto-contagiosas, minusval¨ªas psicof¨ªsicas, alteraciones graves de car¨¢cter en ni?os o ni?as y las prostitutas son descartadas para acceder al centro. El motivo, seg¨²n Mana Fernanda L¨®pez, directora t¨¦cnica, es que no resultar¨ªa "efectivo" compaginar la recuperaci¨®n de su condici¨®n de maltratadas y la de su problema concreto.

Estancia prolongada

La diferencia esencial entre las casas de acogida y este centro de atenci¨®n estriba en el tiempo de permanencia y en el programa que siguen las mujeres. Para Mar¨ªa Fernanda L¨®pez, ambas instituciones son necesarias y complementarias. Mientras en las primeras las mujeres permanecen entre seis d¨ªas y seis meses, en el centro que se inaugura hoy permanecer¨¢n entre 6 y 18 meses.Este tiempo permitir¨¢ a las mujeres, ayudadas por 23 profesionales, recuperar la seguridad en s¨ª mismas, perder el miedo a su maltratador e intentar encontrar trabajo para mantener a sus hijos. El personal que atender¨¢ a estas mujeres tramitar¨¢ las ayudas sociales que puedan corresponderlas, a la vez que las preparar¨¢ para que puedan enfrentarse f¨ªsica y psicol¨®gicamente a la sociedad.

Gracias a un acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento donde est¨¢ emplazado el centro, los hijos de estas mujeres tienen garantizada la escolarizaci¨®n inmediata.

Ana Mar¨ªa P¨¦rez prev¨¦ que el centro est¨¦ a pleno rendimiento dentro de un mes. En ¨¦l se acoger¨¢ a mujeres procedentes de Madrid en un 50% y del resto de Espa?a en otro 50%. Al d¨ªa de hoy, el centro cuenta con seis mujeres y m¨¢s de diez ni?os.

Uno de los mayores peligros que corren las mujeres que deciden abandonar a sus maltratadores, afirma Ana Mar¨ªa, es que ¨¦stos las persiguen e intentan convencerlas para que vuelvan con ellos. A pesar de la cautela en este sentido, al no saberse el emplazamiento del centro, esta semana se ha producido un incidente con el marido de una de las mujeres, que estuvo apostado en la puerta del mismo varias horas. Para prevenir posibles altercados, el centro est¨¢ conectado con las diferentes polic¨ªas del municipio.

En 1990, 19.793 mujeres declararon sufrir malos tratos, lo que supone alrededor del 10% de los casos reales, seg¨²n datos de las Asociaciones de Mujeres Separadas y Divorciadas. Para su responsable, ¨¦ste es el primer paso, pero reconoce que para que el centro funcione correctamente han de invertirse 150 millones de pesetas anuales. Las mujeres acogidas pagar¨¢n una cantidad simb¨®lica que no llegar¨¢ al tercio del salario m¨ªnimo de integraci¨®n.