Miles de planes urban¨ªsticos no est¨¢n legalmente en vigor, seg¨²n la jurisprudencia del Supremo
Los planes urban¨ªsticos de la Cartuja de Sevilla, de la Villa Ol¨ªmpica de Barcelona y del Pasillo Verde del sur de Madrid, junto con varios miles aprobados en Espa?a desde que se vot¨®, en 1985, la Ley Reguladora de las Bases de R¨¦gimen Local, no est¨¢n legalmente en vigor, seg¨²n se desprende de la jurisprudencia del Tribunal Supremo. Desde hace dos a?os, el Supremo viene dictando sentencias que estiman recursos de particulares contra la planificaci¨®n urban¨ªstica. El Supremo entiende que debe cumplirse estrictamente lo establecido en el art¨ªculo 70.2 de aquella ley, que exige que "las normas de los planes urban¨ªsticos se publiquen en el Bolet¨ªn Oficial de la provincia y no entren en vigor hasta que se haya publicado completamente su texto ( .. )". En muchas comunidades aut¨®nomas esta disposici¨®n no se cumple, y, en otras, s¨®lo parcialmente.
S¨®lo en la provincia de Barcelona son unos 1.900 los expedientes afectados. Las comunidades aut¨®nomas tienen competencias en determinados casos (en Catalu?a, siempre) para aprobar definitivamente los planes urban¨ªsticos, incluso los de ¨¢mbito municipal, por lo que son ellas las responsables de publicar en los diarios oficiales correspondientes las normas urban¨ªsticas, y los ayuntamientos en el resto de los casos.La pr¨¢ctica en Catalu?a, Navarra o Madrid, entre otras comunidades, es publicar ¨²nicamente un edicto o una orden para dar cuenta de la aprobaci¨®n de planes generales, parciales o especiales, pero sin reproducir "completamente" sus normas urban¨ªsticas. La Junta de Andaluc¨ªa tambi¨¦n se limita a publicar en su bolet¨ªn oficial el acuerdo de aprobaci¨®n de los planes, porque entiende que son los ayuntamientos los que deben publicar el texto completo de las normas en el bolet¨ªn oficial de la provincia, lo cual no hacen, seg¨²n reconocen en la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas andaluza.
El plan de la Cartuja (recinto de la Expo 92) no se ha publicado ¨ªntegramente, porque la Junta interpreta que la ley s¨®lo afecta a las administraciones locales y en este caso la Administraci¨®n actuante es el Gobierno regional. Esta interpretaci¨®n es rechazada de plano por el Tribunal Supremo, que entiende que la publicidad de las normas de rango supramunicipal no puede ser menor.
En el Pa¨ªs Vasco, seg¨²n el jefe de gabinete del consejero de Pol¨ªtica Territorial, s¨ª se publican las normas, aunque no los planos que las representan gr¨¢ficamente. En Baleares, despu¨¦s de que el Supremo fallara contra el plan general de Palma, lo publicaron ¨ªntegramente en una edici¨®n especial de su bolet¨ªn oficial, planos incluidos, aunque reducidos y sin escala. En la Comunidad Valenciana, tras conocer las primeras sentencias, se han publicado las normas urban¨ªsticas de las principales ciudades, pero no de las peque?as y medianas.
Un plan urban¨ªstico consta por lo general de una memoria para interpretarlo, unos planos (informativos, unos, y normativos, otros); unas normas (donde se regula la edificabilidad, la formaci¨®n de planes especiales, las unidades de actuaci¨®n, etc¨¦tera); un programa de actuaci¨®n, y un estudio econ¨®mico-financiero. Expertos jur¨ªdicos explicaron a este diario que esa jurisprudencia da pie a que cualquier ciudadano pueda recurrir judicialmente -y con grandes posibilidades de ganar- si le deniegan una licencia solicitada de acuerdo con un planeamiento anterior a otro no publicado, o a recurrir una licencia concedida a un tercero bas¨¢ndose en normas que no han visto la luz en un diario oficial.
Una sentencia dictada en abril de 1990 por la sala tercera, secci¨®n sexta, de lo contencioso-administrativo del Supremo, que marc¨® una pauta seguida posteriormente por otros fallos, se?ala que "la ley de bases era perfectamente consciente de la novedad que establec¨ªa y de su gran trascendencia y por ello, para evitar atenuaciones y restricciones, regula la consecuencia jur¨ªdica de forma negativa: '( ... ) las normas de los planes urban¨ªsticos ( ... ) no entran en vigor hasta que se haya publicado completamente su texto ( ... )'. Y ello sin distinci¨®n alguna".
Sentencia
Esta sentencia no entra en disquisiciones sobre si debe publicarse en el bolet¨ªn oficial de la comunidad aut¨®noma o, como dice literalmente la ley, en el bolet¨ªn oficial de la provincia. Lo importante es que se publique, tanto si se trata de un planeamiento de ¨¢mbito puramente municipal como de otro supramunicipal: "Tal falta de publicaci¨®n imped¨ªa la entrada en vigor del plan, que, por tanto, no pod¨ªa servir de fundamento para la denegaci¨®n de la licencia litigiosa, cuyo otorgamiento con arreglo al planeamiento anterior era procedente", se?ala el fallo, que se repite en otros posteriores.Expertos en materia urban¨ªstica consultados por este diario consideran que el legislador no era consciente de las repercusiones pr¨¢cticas de esa norma, porque el volumen del material es tan enorme que hace imposible cumplir aquella ley. Para el director general de Urbanismo de la Generalitat catalana, Joan Antoni Solans, la publicaci¨®n de las normas no es relevante sin los planos, por lo que tambi¨¦n ¨¦stos deber¨ªan ser publicados ateni¨¦ndose a la literalidad de la ley, y eso en la pr¨¢ctica no es posible, salvo que sean reducciones sin valor t¨¦cnico alguno.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.