Contra el consenso del odio
Desde hace meses toda la prensa europea, casi sin distinciones, nos habla de una guerra civil dentro del territorio que antes era Yugoslavia como de una guerra inter¨¦tnica, pr¨¢cticamente tribal. Esta es una visi¨®n simplificadora muy alejada de la realidad. Es una guerra en la que el Ej¨¦rcito federal desarrolla una cruel conquista territorial dentro de un ya hoy antiguo Estado, pr¨¢cticamente desintegrado.
Se dice que se ha hecho un embargo internacional de armas —por cierto, favorable a Serbia, dado que dispone de industria de armas propia—. Pero el mercado de la muerte tiene muchos caminos. En Croacia se pueden encontrar por todas partes desde pistolas Browning belgas hasta Astra espa?olas. Es toda una macabra feria de armas. Adem¨¢s, existen unos 20 grupos paramilitares en el conflicto.
Es muy dif¨ªcil ser pacifista en una guerra como ¨¦sta. Es muy dif¨ªcil enfrentarse al consenso del odio. Pero, a pesar de que se est¨¢ silenciando, existen ciudadanas y ciudadanos que s¨ª lo hacen. Recientemente nos ha visitado una delegaci¨®n de la Internacional de Residentes a la Guerra (WRI), tras una estancia de mes y medio en Serbia, Croacia, Eslovenia y Montenegro.
En todas estas rep¨²blicas, son muchos los que rechazan la guerra y que se arriesgan a ser considerados quintacolumnistas. Personas que piensan que se pueden encontrar otras maneras de solucionar un conflicto que dejar¨¢ en el inconsciente popular la huella del odio y la xenofobia.
El r¨¦gimen serbio aplica la represi¨®n contra toda aquella persona que se manifiesta por la paz. En Belgrado existe el Centro de Acci¨®n contra la Guerra. Hay otras respuestas de desobediencia civil, como el Movimiento de Madres que proponen la deserci¨®n y el rechazo al reclutamiento.
Es preciso que demos a conocer esta otra realidad de la guerra, buscar respuestas solidarias y luchar contra la insensibilidad y la indiferencia que nos hace esclavos de la cultura del militarismo. ?Hasta cu¨¢ndo podremos soportar la visi¨®n de matanzas indiscriminadas?
Jordi Foix y Enric Prat son de la Coordinadora pel Desarmament i la Desnuclearitzaci¨® Totals.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.