Argelia ha pedido a Espa?a iniciar la cooperaci¨®n en materia de armamento
Las autoridades argelinas han transmitido, en los ¨²ltimos meses a las espa?olas su deseo de ampliar la cooperaci¨®n bilateral al campo de? armamento. Argelia est¨¢ interesada en la transferencia de tecnolog¨ªa militar, sobre todo la relacionada con carros de combate y blindados sobre ruedas, especialmente aptos para operar en el desierto.
El Ej¨¦rcito es el principal apoyo de Benyedid tras el descalabro del ex partido ¨²nico Frente de Liberaci¨®n Nacional (FLN) y el rotundo triunfo del Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS) en la primera vuelta de las elecciones argelinas. Equipadas con material sovi¨¦tico, las Fuerzas Armadas est¨¢n buscando nuevas fuentes de suministro.Espa?a, que a¨²n no ha respondido a la petici¨®n, no tiene en principio reparo en ampliar a Argelia la cooperaci¨®n que mantiene tradicionalmente con Marruecos, uno de los principales clientes de la industria militar espa?ola, aunque las ventas est¨¦n ahora ralentizadas para no perjudicar el proceso de paz del Sahara. En el ¨²ltimo a?o, T¨²nez ha formulado una petici¨®n similar a la de Argelia, centrada en este caso en aviones y patrulleras, e incluso Libia ha propuesto sin ¨¦xito iniciar la cooperaci¨®n militar.
La situaci¨®n puede cambiar sustancialmente si el ala radical del FIS se hace con el control del Estado argelino, incluido su Ej¨¦rcito. La inestabilidad del Magreb, de la que el auge del islamismo pol¨ªtico no es sino una consecuencia, se considera uno de los mayores riesgos para la seguridad espa?ola en medios del Ministerio de Defensa y as¨ª constar¨¢, de manera m¨¢s o menos expl¨ªcita, en los documentos b¨¢sicos de Defensa cuya aprobaci¨®n est¨¢ prevista para 1992: la Directiva de Defensa Nacional y el Plan Estrat¨¦gico Conjunto.
La nueva directiva no se limitar¨¢, como la vigente, que data de 1986, a las amenazas de tipo militar, sino que abarcar¨¢ tambi¨¦n los llamados riesgos para la seguridad nacional. El texto ha sido suavizado respectivamente a la redacci¨®n inicial (ver EL PA?S del 28 de octubre), elimin¨¢ndose la menci¨®n al narcotr¨¢fico, pero a¨²n incluye los extremismos religiosos, la presi¨®n demogr¨¢fica o el terrorismo entre las amenazas potenciales.
Presi¨®n migratoria
Seg¨²n expertos militares, el avance del fundamentalismo en el Magreb no supone a medio plazo una amenaza militar, pero s¨ª un riesgo para la seguridad, ya que puede aumentar la presi¨®n migratoria hacia Europa y servir de caldo de cultivo a grupos terroristas, especialmente si se agrava la crisis econ¨®mica en la regi¨®n. El intento de varios pa¨ªses europeos, entre ellos Espa?a, de abordar el problema con instrumentos pol¨ªticos y econ¨®micos, a trav¨¦s de la Conferencia de Seguridad y Cooperaci¨®n en el Mediterr¨¢neo (CSCM), se ha visto frustrado hasta ahora; entre otros factores, por el recelo de EE UU ante cualquier propuesta que rompa el aislamiento diplom¨¢tico de Libia.
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