Estrenos de Leonardo Balada y Michael Tippett

Dentro del ciclo de abono de la Orquesta Nacional actu¨® esta semana la Sinf¨®nica de RTVE, dirigida por su titular, Sergiu Comissiona, en un programa de gran inter¨¦s: estrenos de Leonardo Balada y Michael Tippett y una obertura poco frecuentada de Conrado del Campo.Al modo de Hindemith o Werner Henze, Balada ha trasladado parte de su ¨®pera Col¨®n a la orquesta en unas im¨¢genes que funcionan a modo de una sinfon¨ªa en cuatro movimientos. Es la obra estrenada ahora, en la que la naturaleza dram¨¢tica de los pentagramas y del mismo autor se evidencian una vez m¨¢s. Domina Balada la orquestaci¨®n, y en su lenguaje se advierten connotaciones -filonorteamericanistas, tal un nerviosismo r¨ªtmico y una vitalidad din¨¢mica. En su caso, la sustancia es espa?ola, y los perfiles, muy originales. El melodismo o el modernismo de Balada no se parecen a los de otros autores de su tiempo y de su origen. Cuando maneja elementos ¨¦tnicos, son tan voluntariamente imprecisos que, por ejemplo, cuando las ,naves parten de Palos ya escuchamos referencias estil¨ªsticas de corte popular tan espa?olas como hispanoamericanas. Entre este tiempo y el final (Amanecer en las Indias) hay dos movimientos centrales de corte l¨ªrico, arioso o meditativo.. La versi¨®n fue clara y finipia, y el ¨¦xito,. g'rande.

Tambi¨¦n asisti¨® Michael Tippett - (1905) al estreno espa?ol de su cantata Un muchacho -de nuestro tiempo (1944), demostraci¨®n de ,c¨®mo, dentro de la-est¨¦tica tradicional, pueden alcanzarse todav¨ªa expresiones conmovedoras y perdurables. ,

Se trata de una amplia p¨¢gina contra la violencia, basada en un hecho ocurrido en el a?o 1938: el asesinato por un jud¨ªo polaco de un diplom¨¢tico alem¨¢n en Par¨ªs. Un excelente cuadro de int¨¦rpretes redonde¨® la hermosa versi¨®n de una mii sica que conmueve por igual al pensamiento y al sentimiento.