El estreno en Francia de 'El amante' reabre la pol¨¦mica entre cine y literatura
Marguerite Duras calla ante el filme lleno de erotismo que ha hecho Jean-Jacques Annaud
JAVIER VALENZUELA A comienzos de los a?os treinta, en la Indochina colonizada por los franceses, una muchacha blanca desafi¨® todos los tab¨²s convirti¨¦ndose en la amante de un hombre chino. Medio siglo despu¨¦s, la protagonista de aquella aventura, Marguerite Duras, la cont¨® en su novela EI Amante. Ahora, el estreno en Francia de la muy sensual pel¨ªcula de Jean-Jacques Annaud basada en ese fibro, ha vuelto a abrir un debate tan viejo como la historia del cine: el de las relaciones entre el s¨¦ptimo arte y la literatura. La mayor¨ªa de la cr¨ªtica cinematogr¨¢fica aplaude, mientras Marguerite Duras calla.
Marguerite Duras nunca ha tenido la foto del momento en que siendo una muchacha de 15 a?os tom¨® un, transbordador para cruzar el r¨ªo Mekong. Ese fue el crucial instante en que vio por primera vez al chino que se convertir¨ªa en su amante. A falta de foto, la escritora francesa lo reconstruy¨® en su novela autobiogr¨¢fica El amante, que es uno de los mayores ¨¦xitos literarios de nuestro tiempo.Al adaptar El amante Jean Jacques Annaud sab¨ªa que asum¨ªa muchos riesgos. "Desde que decid¨ª hacer la pel¨ªcula", dice el cineasta franc¨¦s, "tuve pesadillas en las que el c¨ªrculo de devotos de Marguerite Duras gritaba: "Traici¨®n, traici¨®n". Pero Annaud puede descansar, porque la mayor¨ªa de la cr¨ªtica cinematogr¨¢fica parisiense elogia el resultado de sus esfuerzos.
Dani¨¨le Heymann, de Le Monde, es de los que creen que Annaud ha conseguido realizar "una nueva y redonda obra de arte". "Fiel e infiel a Marguerite Duras como el amante chino a la muchacha, Annaud", escribe Heymann, "no ha traicionado a nadie y sobre todo no se ha traicionado a ¨¦l misrno".
Director de tres grandes ¨¦xitos comerciales del cine franc¨¦s, En busca delfuego, El nombre de la rosa y El oso, Annaud, de 48 a?os, pas¨® horas y horas con la ronca, arrugada, miope y col¨¦rica Duras, en un vano intento por llegar a un acuerdo sobre el gui¨®n. La relaci¨®n no funcion¨® tan bien como la que hab¨ªa sostenido con Umberto Eco durante la adaptaci¨®n de El nombre de la rosa. Duras, de 77 a?os, rechaz¨® la visi¨®n del cineasta, pero las peleas que sostuvo con ¨¦l le dieron el impulso para escribir de otra manera la historia de sus 15 a?os.
El actual silencio de Duras sobre el Filme es interpretado como una condena por G¨¦rard Lefort, de Liberation. Para este cr¨ªtico la obra de Annaud es un gigantesco anuncio publicitario sobre la Indochina colomal", y "rnuchas escenas er¨®ticas con actores muy guapos". La pel¨ªcula, dice Lefort, es "pornograf¨ªa blanda", apenas mejor que Einmanuelle.
Lo que me impresion¨® del libro de Duras fue la honestidad y la crudeza de la evocaci¨®n del acto amoroso", dice Annaud. El cineasta lo ten¨ªa dificil. La soluci¨®n adoptada fue la de dar la impresi¨®n de que la c¨¢mara no oculta nada. Las escenas de sexo constituyen una cuarta parte del filme y son de una incandescencia raras veces vista en la pantalla en los ¨²ltimos a?os.
El descubrimiento de Jane
El filme de Annaud pasar¨¢ a la historia aunque s¨®lo sea por el descubrimiento de Jane March, la actriz que encarna a la joven Marguerite Duras. Un d¨ªa, tras haber rechazado 7.000 candidatas, Jean-Jacques Annaud encontr¨® a una chica altiva y fr¨¢gil, tierna y provocadora, inculta y sensual de los suburbios de Londres. En sus 18 a?os de existencia, esa chica, Jane March, tan s¨®lo hab¨ªa ido diez veces al cine y nunca al teatro, hasta que los tres meses de rodaje le han convertido en toda una actriz.
Si los espectadores masculinos se regocijan con Jane March, los femeninos est¨¢n servidos con Tony Leung, el hermoso y delicado joven de Hong-Kong que encarna el amante.
La pel¨ªcula El amante ha costado 122 millones de francos (alrededor de 2.000 millones de pesetas), uno de los presupuestos m¨¢s altos de la historia del cine franc¨¦s.
Babelia
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