"La cultura occidental es monote¨ªsta con el dinero", afirma Roger Garaudy

Roger Garaudy es un nadador a contracorriente. A sus 79 a?os, el fil¨®sofo franc¨¦s conserva toda la vitalidad cr¨ªtica de un estudiante rebelde en pleno Mayo franc¨¦s. Su conversi¨®n hace unos a?os al islam -en el que entr¨® con la Biblia debajo de un brazo y El capital bajo el otro, seg¨²n propia confesi¨®n- le ha llevado a profundizar en sus cr¨ªticas hacia la cultura occidental, a la que considera "monote¨ªsta con respecto al dinero".

Ese "monote¨ªsmo de mercado es la teolog¨ªa del sistema actual, que ha convertido todos los valores en comerciales: el ¨²nico poder que existe en el mundo es el poder del dinero", dice.Garaudy -dirigente del Partido Comunista Franc¨¦s hasta la d¨¦cada de los sesenta y autor de casi medio centenar de libros traducidos algunos a 14 lenguasparticip¨® recientemente en Barcelona en unas jornadas organizadas por el Departamento de Cultura de la Generalitat. All¨ª reiter¨® su idea de que la occidental quiere convertirse en una cultura hegem¨®nica y exclusiva. "La pretensi¨®n de poseer la verdad absoluta y de imponerla por la fuerza es la definici¨®n del integrismo", dice el fil¨®sofo franc¨¦s, quien asegura que los fundamentalismos nacidos en la actualidad -como el isl¨¢mico- son una reacci¨®n de los pueblos para "salvar su identidad cultural"

.Cultura totalitaria

Este razonamiento hace que Garaudy quiera demostrar que la cultura occidental es totalitaria. "Ya Descartes propon¨ªa que el hombre se convirtiera en maes tro y poseedor de la naturaleza", dice. "Hobbes reduc¨ªa las rela ciones humanas a una lucha de todos contra todos -homo homini lupus-", agrega. "El poeta y dramaturgo Christopher Mar lowe en su Fausto propon¨ªa que el hombre tomara el puesto de Dios en la ordenaci¨®n del univer so", subraya.

Y en su lucha por mantener la hegemon¨ªa, Occidente se encuentra frente al caso de Argelia y la victoria electoral del Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS). "El caso de Argelia es un ejemplo claro de integrismo totalitario de la democracia", afirma Garaudy. "Nuestros buenos dem¨®cratas dijeron que deb¨ªa haber elecciones; las hubo y las gan¨® el FIS, y se les ha prohibido; eso me recuerda un texto prof¨¦tico de Bertolt Brecht, quien escribi¨®: 'El pueblo ha votado y ha desaprobado al Gobierno. La soluci¨®n m¨¢s simple es disolver al pueblo y elegir otro"

Cuando se hace referencia al dificil di¨¢logo entre integrismo isl¨¢mico y democracia, Garaudy responde: "?A qu¨¦ integrismo se refiere; al de Arabla Saud¨ª, que se ha convertido en la marea negra del islam?". En el pa¨ªs de la monarqu¨ªa wahhab¨ª, recuerda el fil¨®sofo franc¨¦s, "se lapida a la gente y se cortan las manos [en aplicaci¨®n de la charia o ley isl¨¢mica]; ?por qu¨¦ entonces se aplaude a unos y se diaboliza a otros?".