Fuengirola despide a Juanito con una gran manifestaci¨®n de cari?o popular
Juan G¨®mez Gonz¨¢lez, Juanito, descansa en paz desde la tarde de ayer en el cementerio de su ciudad natal, Fuengirola (M¨¢laga), donde recibi¨® una multitudinaria y emotiva despedida que congreg¨® a varios millares de personas -unas 50.000 seg¨²n fuentes municipales- entre directivos, figuras del f¨²tbol, aficionados y paisanos an¨®nimos. Unos y otros quisieron agradecer por ¨²ltima vez al futbolista su juego imaginativo, su generosidad y su sinceridad, caracter¨ªsticas que definieron su pol¨¦mica y triunfal carrera deportiva.
El f¨¦retro con los restos mortales del ex jugador, y en los ¨²ltimos meses entrenador del M¨¦rida, lleg¨® a su pueblo sobre las tres de la madrugada de ayer. Varios centenares de aficionados lo recibieron entre ovaciones y coreando su nombre. El f¨¦retro fue envuelto con las banderas de Fuengirola y de los clubes en los que jug¨® como profesional: Burgos, Real Madrid y M¨¢laga, y en torno a ¨¦l se acumularon m¨¢s de un centenar de coronas llegadas desde toda Espa?a.La expedici¨®n del Madrid lleg¨® en un vuelo especial, s¨®lo faltaron Hugo S¨¢nchez y Prosinecki, cuyas ausencias no supo explicar ninguno de los miembros de la delegaci¨®n consultados. Uno a uno, los jugadores madridistas saludaron a los familiares de Juanito, aunque a la mayor¨ªa la emoci¨®n les imped¨ªa articular palabra.
Todos los rostros, incluso los de jugadores que como Lasa no han tenido oportunidad de convivir con Juanito, denotaban la consternaci¨®n con la que el f¨²tbol espa?ol ha reaccionado ante la muerte de Juanito, como expres¨® el presidente de la federaci¨®n, ?ngel Mar¨ªa Villar. Otros que s¨ª tuvieron el privilegio de jugar a su lado, como Michel, apenas pudieron dejar de llorar un solo instante.
Las l¨¢grimas de Gordillo
Hasta Fuengirola llegaron tambi¨¦n ex compa?eros de Juanito en el Madrid como Ricardo Gallego, Garc¨ªa Cortes, Jorge Valdano o Garc¨ªa Hern¨¢ndez. Desde las tres de la madrugada, hora en la que llegaron a Fuengirola los restos mortales del jugador, no abandonaron la capilla ardiente Camacho, Santillana y Goyo Benito. Camacho no ces¨® de repetir que sent¨ªa a Juanito como a un hermano, mientras Rafael Gordillo apenas pod¨ªa hablar porque las l¨¢grimas se lo imped¨ªan. Ambos se situaron en los lugares reservados a la familia.Las multitudinarias muestras de cari?o desbordaron a la familia. El padre del jugador, que apenas acertaba a articular palabra, agradec¨ªa una y otra vez a ."Espa?a entera" el homenaje.
Cada futbolista, cada directivo, cada cliente del chiringuito familiar en la playa de Los Boliches, ten¨ªa alguna an¨¦cdota que recordar. Juanito, que un d¨ªa dijo que si tuviera 17 a?os ser¨ªa ultra, recibi¨® tambi¨¦n la visita de un grupo de la pe?a Ultrasur. Uno de sus representantes, El Ocha, record¨® los consejos que continuamente les daba el ex jugador del Madrid para que no realizaran acciones violentas. "Siempre lo recordar¨¦ disfrazado de ultra", asegur¨®, por su parte Ram¨®n Mendoza.
El presidente del Madrid, que defini¨® a Juanito como una persona "sin dobleces y generosa en todos los sentidos", record¨®: "El a?o pasado me pregunt¨® por ¨¦l Matthaus", el jugador alem¨¢n al que Juanito, sancionado con cuatro a?os de suspensi¨®n, pis¨® la cabeza en una eliminatoria de Copa de Europa.
El presidente del Madrid evoc¨® tambi¨¦n el car¨¢cter alegre de Juanito, que pocas horas antes de morir visit¨® a los jugadores madridistas en el vestuario del Bernab¨¦u para decirles que eliminar al Torino "estaba chupao".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.