La OEA negociar¨¢ en Lima con dos Gobiernos
La delegaci¨®n de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA) que lleg¨® ayer a Lima al frente de su secretario general, Joao Baena, y del canciller uruguayo, H¨¦ctor Bross, tiene por delante una tarea que bien podr¨ªa calificarse de misi¨®n imposible. Su mandato es lograr el restablecimiento de la democracia en Per¨², pero no lo tendr¨¢ nada f¨¢cil en una semana decisiva para definir la suerte del golpe de Estado -el fujigolpe- del pasado 5 de abril. La OEA deber¨¢ dialogar con Gobiernos paralelos. De un lado, con el Gobierno de Fujimori. Del otro lado, con el de la representaci¨®n parlamentaria nacional, que tomar¨¢ juramento hoy al vicepresidente M¨¢ximo San Rom¨¢n, de 46 a?os, como presidente constitucional de Per¨².
La misi¨®n de la OEA tratar¨¢ de tender puentes de di¨¢logo entre las partes en pugna. Pero esa labor de ingenier¨ªa diplom¨¢tica va a ser dificultada por la din¨¢mica misma del enfrentamiento entre Fujimori y la oposici¨®n constitucional. Los partidos pol¨ªticos, duramente enfrentados entre s¨ª hasta la v¨ªspera misma del golpe, han actuado unitariamente hasta ahora en su labor de oposici¨®n al Gobierno de Fujimori.
Los portavoces de los partidos pol¨ªticos representados en el Parlamento estuvieron reunidos el domingo y el lunes para definir su posici¨®n frente a la OEA. Esta posici¨®n fue expresada ayer en forma sucinta por el veterano senador aprista Lluis Alberto S¨¢nchez, de 89 a?os, en una entrevista en la televisi¨®n local. "La ¨²nica salida es la salida de Fujimori", dijo. ?ste es hoy por hoy el criterio en el Congreso nacional.
El enfrentamiento adquirir¨¢ un car¨¢cter m¨¢s definido hoy, cuando el Congreso se re¨²na para tomar juramento para investir a M¨¢ximo San Rom¨¢n como presidente constitucional de la naci¨®n. La ceremonia no podr¨¢ realizarse en el edificio del Congreso, ocupado por tropas del Ej¨¦rcito, y es probable que se lleve a cabo en el local del Colegio de Abogados de Lima, donde ha habido reuniones parlamentarias despu¨¦s del golpe.
San Rom¨¢n, por un lado, ha estado sumamente activo desde su llegada a Lima en la noche del s¨¢bado 18. Durante el domingo 19, el pol¨ªtico cuzque?o se prodig¨® en declaraciones p¨²blicas que tuvieron un denominador com¨²n: la pugnacidad frente al r¨¦gimen de Fujimori y el llamado a la unidad de los dem¨¢s sectores, incluyendo expl¨ªcitamente a las Fuerzas Armadas, que hoy sostienen al r¨¦gimen.
Los ataques de San Rom¨¢n al r¨¦gimen de Fujimori se han concentrado en negarle toda legitimidad. As¨ª, el primer vicepresidente no s¨®lo ha acusado a Fujimori de atropellar la Constituci¨®n mediante el golpe, sino tambi¨¦n de haberlo hecho por motivos subalternos. San Rom¨¢n afirm¨® haber instado varias veces a Fujimori a dialogar con el Parlamento, recibiendo negativas cortantes en cada caso.
San Rom¨¢n tambi¨¦n inform¨® haber advertido desde el comienzo del r¨¦gimen a Fujimori sobre el peligro que representaba la presencia del capit¨¢n retirado VIadimiro Montesinos como asesor de alto nivel en el entorno presidencial. Recibi¨® una fr¨ªa respuesta de Fujimori, quien le habr¨ªa dicho que la relaci¨®n con Montesinos era un asunto que s¨®lo le compet¨ªa a ¨¦l.
En su edici¨®n del s¨¢bado 18, el diario Miami Herald public¨® en primera p¨¢gina un reportaje firmado por Sam Dillon seg¨²n el cual Montesinos habr¨ªa tenido largas relaciones con los carteles de la droga, siendo a la vez una valiosa fuente de informaci¨®n para la CIA. Al rese?ar la noticia, el semanario lime?o S¨ª la titul¨® lac¨®nicamente "Norieguita".
Gran parte de la labor de San Rom¨¢n durante el pasado domingo consisti¨® en arengar a las Fuerzas Armadas para que cumplan con su deber y respalden al Gobierno constitucional. Hasta ahora, las Fuerzas Armadas han sido el sost¨¦n principal del Gobierno de Fujimori. Mencionando una y otra vez a los h¨¦roes principales del Ej¨¦rcito, de la Marina y de la Aviaci¨®n, el primer vicepresidente los exhort¨® a actuar a la altura de ese precedente.
Contactos con el Ej¨¦rcito
En declaraciones previas, San Rom¨¢n afirm¨® haber sido contactado por altos oficiales de las Fuerzas Armadas cuando se enr,ontraba a¨²n en EE UU, y de haber sido alentado por ellos a luchar por el retorno de la autoridad democr¨¢tica. Pero hasta el momento no se ha producido ninguna manifestaci¨®n expl¨ªcita de simpat¨ªa o acercamiento al vicepresidente por parte de los militares, y ninguna se?al de respaldo a su intenci¨®n de ingresar en el palacio de Gobierno "por la puerta grande" despu¨¦s de jurar como presidente constitucional. Alberto Fujimori, entretanto, pas¨® el fin de semana pescando en el departamento de Madre de Dios, en el sureste amaz¨®nico peruano. No hizo ninguna declaraci¨®n al retomar a Lima el domingo.
El primer ministro, ?scar de la Puente, indic¨® que Fujimori dirigir¨¢ hoy un mensaje a la naci¨®n en el que fijar¨¢ los plazos para el retorno al orden constitucional. Seg¨²n De la Puente, ese plazo es de "un a?o o menos".
Aparte del mensaje, Fujimori deber¨¢, posiblemente, enfrentarse a la primera crisis ministerial despu¨¦s del golpe con la posible renuncia del ministro de Econom¨ªa y Finanzas.
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