El pozo de las im¨¢genes
Francia, Canad¨¢ e Italia son tres de los numerosos pa¨ªses o comunidades cuyos pabellones en la Expo de Sevilla apuestan por el cine y las t¨¦cnicas vanguardistas del audiovisual. Francia, cuyo edificio ha alcanzado uno de los primeros puestos entre las preferencias del p¨²blico por el equilibrio entre arquitectura y contenidos, ha instalado a 17 metros de profundidad, debajo del atrio, una pantalla de 25 por 21 metros.El llamado pozo de im¨¢genes tiene las paredes recubiertas de Mylar, pel¨ªcula con las mismas caracter¨ªsticas de un espejo, y el visitante se puede asomar, a trav¨¦s de un viaje en helic¨®ptero entre Madrid y Sevilla, a un mundo de im¨¢genes multiplicadas en forma de gigantesco caleidoscopio. El formato de la imagen es de 3 por 70 mil¨ªmetros y el sistema de proyecci¨®n de deslizamiento horizontal, con cuatro pistas sonoras num¨¦ricas. Durante los intermedios de las tres pel¨ªculas se proyectan diapositivas que juegan con el efecto caleidosc¨®pico del pozo.
Colosal planeta
Canad¨¢ presenta una pel¨ªcula tambi¨¦n de alta definici¨®n rodada y proyectada al ritmo de 48 im¨¢genes por segundo, el doble de la velocidad normal de una pel¨ªcula. Descubrir el Canad¨¢, descubrir el nuevo mundo es el t¨ªtulo de la cinta. En Andaluc¨ªa, mediante el sistema Showscan, se exhibe tambi¨¦n una pel¨ªcula a gran velocidad, procedimiento que permite una gran claridad en las im¨¢genes.
En Italia, el enorme patio interior del edificio logra un efecto escenogr¨¢fico mediante un colosal planeta pintado de colores cuyo interior es una sala de cine que ser¨¢ abierta pr¨®ximamente.
Pero los sistemas que m¨¢s expectaci¨®n han levantado son los de los asientos que se mueven en el pabell¨®n de Espa?a y el cine en relieve de Fujitsu. Este ¨²ltimo sistema "simula lo que es el procedimiento de la visi¨®n de la persona" dice Eduardo Buzzanca, uno de los responsables del local. Y explica que el principio por el que se perciben im¨¢genes en tres dimensiones se basa en la visi¨®n alternativa por el ojo derecho y el izquierdo. En la pel¨ªcula, unas gafas especiales hacen que esto sea posible. "Las gafas est¨¢n sincronizadas con la pel¨ªcula y van abriendo y cerrando un ojo u otro de forma que al recogerse en el cerebro se produza la sensaci¨®n de relieve".
Jap¨®n presenta un cine giratorio formado por un gran c¨ªrculo de unos 30 metros de di¨¢metro dividido en cinco salas peque?as. Al terminar cada pel¨ªcula, de unos cinco minutos, gira e- 1 piso y los espectadores entran en otra sala, donde sigue la proyecci¨®n, una pel¨ªcula muy infantil, de dibujos animados sobre im¨¢genes, en la que don Quijote y Sancho Panza saltan, en un momento dado, sobre las teclas de un ordenador. En la zona del pabell¨®n de Jap¨®n titulada Saludo a una nueva era, la vanguardia tecnol¨®gica aturde: im¨¢genes hologr¨¢ficas, l¨¢seres, computadoras y tecnolog¨ªa de fibras ¨®pticas se usan para crear un retrato simb¨®lico.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.