Almoneda para raros

El alcalde Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano se llev¨® un volumen de su maestro de filosof¨ªa y una antolog¨ªa del chiste. La Feria del Libro Antiguo y de Ocasi¨®n ha cumplido 16 a?os, y se aprest¨® ayer, bajo el sol, a recibir al medio mill¨®n de visitantes que curiosea por las casetas del paseo de Recoletos cada a?o. Durante 17 d¨ªas, 45 barracones ofrecen 400.000 libros. Seguramente habr¨¢ para todos los gustos. O casi. Por all¨ª preguntaban por castillos, por uniformes militares, hasta por la Falange.

"Tienen algo de castillos?". "No", contesta el librero. El que pregunta es un vigilante jurado fornido de 26 a?os, de nombre Miguel. "No encuentro nada, oye". A ¨¦l le gustan las ciudades medievales y los castillos, y por eso compra libros para preparar sus viajes. Se conformar¨¢ con La Regenta, de Leopoldo Alas. "Los cl¨¢sicos son los m¨¢s baratos, no los compra nadie".En otra caseta, un hombre de manos toscas ha comprado un libro de artes adivinatorias por 200 pesetas. Est¨¢ sordo como una tapia. Otro hombre, en ch¨¢ndal, pregunta siempre lo mismo: "?Tiene algo de la Falange?". Y luego se para a discutir con el dependiente de otro barrac¨®n: "Pues tengo ya 250 sobre eso. Un d¨ªa te los traigo, a ver si te lo crees". Ezequiel Alonso, escritor, bucea encantado entre los lomos polvorientos en busca de obras de escritoras de este siglo. "Voy a publicar un libro", dice sosteniendo un cigarrillo abultado, de los de antes, entre los dientes. Y se lleva un par de vol¨²menes por 1.500 pesetas. "La feria del Retiro es puro comercio; ¨¦sta es m¨¢s t¨¦cnica y m¨¢s plural".

Invitaci¨®n

Los vendedores dec¨ªan que la feria va cada vez mejor. "Pero hay que invitar a la gente a que venga con la mente m¨¢s abierta", asegura Carlos Oliver, de Par¨ªa-Valencia, la ¨²nica librer¨ªa que viene de la ciudad del Turia (hay 31 de Madrid, 10 de Barcelona, 2 de Sevilla y 1 de Granada). "Preguntan por cosas muy concretas y a lo mejor se pierden algo interesante". Como algunos libritos de su caseta: un ejemplar sobre la ciencia de las casta?uelas (crotalog¨ªa), facs¨ªmile de una edici¨®n de 1792, a 400 pesetas, o el Tratadito de urbanidad para ni?os, de 1872, por 20 duros. Ambos, editados por la librer¨ªa. Aunque el frente de la caseta est¨¢ ocupado, como en muchas otras, por restos de ediciones o libros de editoriales que ya no existen, como Bruguera, a 150 pesetas. "As¨ª se hace tambi¨¦n afici¨®n", dice Oliver.El alcalde de Madrid, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, pase¨® de caseta en caseta repartiendo apretones de manos y recibiendo libros de regalo. Se llev¨® a casa una antolog¨ªa del chiste para una hija suya. "Eso, adem¨¢s, en pol¨ªtica en muy, importante". "?Has encontrado alg¨²n poema m¨ªo?", le pregunt¨® ?ngel Matanzo, el concejal de Centro. "No, por fortuna", respondi¨® el alcalde. Matanzo se llev¨® la vida del fundador del Opus Dei, Josemar¨ªa Escriv¨¢ de Balaguer, que compart¨ªa estante con dos libros de Franco y uno de Mussolini. "Se lo regalamos, don ?ngel". "Se lo voy a dar a Huete con un lazo", confi¨® Matanzo. "Soy tan at¨ªpico..." Luis Mar¨ªa Huete, primer teniente de alcalde, representar¨¢ al Ayuntamiento en la beatificaci¨®n del fundador de la Obra a la que pertenece.

Por la feria, "almoneda de formas perfectas", como dijo en su preg¨®n el cr¨ªtico literario Rafael Conte, se paseaba cada uno con su rareza. Y el paisaje acompa?aba: el visitante puede aprender a cocinar arroz o pollo por 450 pesetas los dos libros, delantal incluido; por 100 pesetas, conocer¨¢ los consejos que un sacerdote daba en 1956 a las "80 millones de solteras que hay en el mundo". Aunque tambi¨¦n est¨¢ un manuscrito de m¨²sica para salterio de, 1480 o un diminuto Arte de fumar, del siglo pasado, tama?o caja de cerillas. Ambos, a un precio inconfesable.