Montserrat Trueta: "El rechazo inicial de un hijo deficiente es un sentimiento natural"
El pasado d¨ªa 8 de mayo naci¨® en la residencia Can Ruti de Badalona un beb¨¦ con s¨ªndrome de Down. Su madre, una mujer de 37 a?os, madre de otros dos hijos y de posici¨®n social humilde, hab¨ªa comentado a la enfermera que no podr¨ªa soportar tener un hijo deficiente. Cuatro d¨ªas despu¨¦s, ella y su marido se acog¨ªan a la posibilidad de renunciar a la patria potestad, alegando que no dispon¨ªan de medios para costear la educaci¨®n especial que precisar¨ªa. Para Montserrat Trueta, presidenta de la Fundaci¨®n Catalana S¨ªndrome de Down, el rechazo se produce, en la mayor¨ªa de los casos, por falta de informaci¨®n.
El caso del ni?o rechazado en Can Ruti no es excepcional. Es el tercer ni?o deficiente rechazado por sus padres en lo que va de a?o, s¨®lo en Catalu?a. "Muchas veces, la decisi¨®n de abandonar se toma precipitamente, sin conocer las ayudas que se pueden conseguir y lo mucho que hoy se puede hacer por ellos", afirma Montserrat Trueta. No quiere, sin embargo, que de sus palabras se deduzca ninguna recriminaci¨®n para los padres: "Tampoco la decisi¨®n de abandonar es f¨¢cil y luego queda el sentimiento de culpabilidad", afirma. Montserrat Trueta, esposa del fallecido pol¨ªtico Ram¨®n Trias Fargas, es madre de Andy Trias, un joven con s¨ªndrome de Down que constituye un modelo de integraci¨®n y un ejemplo de que, con una educaci¨®n adecuada, las personas afectadas por esta deficiencia pueden llegar a tener incluso una actividad laboral.
"La noticia constituye un trauma para todos los padres", explica. "El sentimiento de rechazo es una reacci¨®n natural y todos necesitan un tiempo para asumirlo. Todos los padres ponen ilusiones en el nacimiento de un hijo, y cuando le dicen que el suyo es deficiente, sienten la p¨¦rdida del hijo ideal que ellos esperaban. Han de hacer un duelo. Ha de pasar un tiempo para asumir que han perdido el hijo que deseaban, pero que en cambio tienen otro, que est¨¢ ah¨ª, a¨²n por conocer. Por eso es tan importante que los padres reciban apoyo psicol¨®gico en ese momento tan dificil".
La forma en que se d¨¦ la noticia tiene, seg¨²n Montserrat Trueta, una importancia crucial. "El m¨¦dico debe dar el diagn¨®stico a los dos padres a la vez, reposadamente y de tal manera que su informaci¨®n sea una base para construir algo positivo. Sin enga?arlos, sin darles falsas esperanzas, pero sin ser muy negativo, porque hoy han cambiado mucho las cosas y hay muchas posibilidades de educaci¨®n para estos ni?os".
Al principio, los padres ven s¨®lo lo que es anormal, que en elcaso del reci¨¦n nacido es poco, pero significatiVo: las facciones y una cierta aton¨ªa muscular, que hace que el beb¨¦ est¨¦ como m¨¢s abierto, m¨¢s ca¨ªdo. "La madre siente que el ni?o no se le recoge tanto, pero esa misma fragilidad provoca un mayor deseo de aproximaci¨®n", explica Montserrat Trueta. "Hace falta un proceso de aceptaci¨®n y conocimiento, pero con el tiempo, los padres se dan cuenta que ese hijo dif¨¦rente es un personaje que llena la casa y, a la postre, da m¨¢s alegr¨ªas que disgustos".
La colaboraci¨®n entre la Fundaci¨®n S¨ªndrome de Down y la administraci¨®n p¨²blica ha permitido crear una red de ayuda a las familias desde el momento mismo del nacimiento. "Los ni?os con s¨ªndrome de Down no siguen ninguna edudaci¨®n especial. Nosotros propugnamos su integraci¨®n total en la vida normal de la familia y de la escuela. La integraci¨®n hace que estos ni?os puedan llegar a ser mucho m¨¢s auton¨®mos e independientes", afirma la presidenta de la fundaci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.