Sanidad se declara dispuesta a hacer prevalecer los derechos de los trabajadores no fumadores
"El lugar de trabajo es, junto con la cama, donde se pasa la mayor parte de la vida", recuerda la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), que ma?ana dedica la Jornada Mundial sin Tabaco a promover espacios laborales libres de humo. En Espa?a, de cada 10 trabajadores todav¨ªa prevalecen los derechos de los cuatro que fuman sobre los de los seis que no lo hacen, pese a las normas legales existentes. La falta de control oficial sobre su cumplimiento ha obligado a crear una comisi¨®n de seguimiento, seg¨²n anunci¨® ayer Francisco Ortega, secretario general de Salud P¨²blica.
En Espa?a fuma el 35,9% de la poblaci¨®n -una cajetilla de media- y no lo hace el 64,1 %, seg¨²n el Estudio de los estilos de vida de la poblaci¨®n adulta espa?ola, elaborado en 1989 por Sanidad. Estos datos revelan que, respecto a la ¨²ltima encuesta nacional de salud, de 1987, el porcentaje de fumadores ha bajado dos puntos.Consciente de la dificultad que entra?a desarraigar a golpe de normas un h¨¢bito tan enrraizado, Ortega apost¨® por la pol¨ªtica de "disuasi¨®n". "No se trata de crear un grupo de inspirados sociales", a?adi¨® Pedro Cava, miembro del consejo ejecutivo de la OMS, contrario a la caza del fumador.
En la quinta ocasi¨®n consecutiva que se celebra el D¨ªa Mundial sin Tabaco, la OMS ha hecho hincapi¨¦ en el tabaquismo dentro del mundo laboral, bajo el lema Lugares de trabajo libres de tabaco: m¨¢s seguros y m¨¢s sanos. El mensaje del director general de esta organizaci¨®n, Hiroshi Nakajima, es tajante: "No es aceptable que personas obligadas a trabajar para ganarse la vida corran riesgos a?adidos en raz¨®n de una costumbre in¨²til y nefasta".
Un real decreto de 1988 estableci¨® en Espa?a las primeras restricciones al uso del tabaco en el ¨¢mbito laboral. Entre ellas la delimitaci¨®n de zonas para fumadores en centros sanitarios, docentes y universitarios, as¨ª como en puestos de trabajo oficiales de atenci¨®n al p¨²blico y en locales comerciales.
Tambi¨¦n est¨¢ prohibido en lugares de procesamiento de alimentos, en aquellos en que el tabaco incremente el riesgo laboral o en los que se encuentren mujeres embarazadas.
Una nueva normativa aprobada hace escasas semanas ampl¨ªa las prohibiciones a los vuelos nacionales de duraci¨®n inferior a los 90 minutos a partir del pr¨®ximo 1 de julio. Francisco Ortega anunci¨® que ya est¨¢ elaborada una orden ministerial para crear una comisi¨®n que estudie el grado de cumplimiento de la normativa.
Seg¨²n Ortega, el Plan Integral de Salud, que podr¨ªa estar ultimado a principios de 1993, dar¨¢ prioridad a la lucha contra el h¨¢bito del tabaco, "en el que quedar¨¢ claro el derecho de los no fumadores a disfrutar de un entorno limpio".
El documento de la OMS con motivo de esta jornada mundial alerta sobre los efectos del tabaco en el fumador pasivo, no s¨®lo por sus propios componentes nocivos, sino tambi¨¦n por su interacci¨®n con el ambiente. "El humo del tabaco en el medio ambiente refuerza sensiblemente las concentraciones de agentes de contaminaci¨®n atmosf¨¦rica, ya presentes en el interior de los edificios".
Para los fumadores los riesgos tampoco acaban en el consumo continuado de nicotina y alquitr¨¢n. Seg¨²n la OMS, los mineros de carb¨®n tienen mayor posibilidad de padecer enfisema y bronquitis cr¨®nica si fuman. Algunos tipos de invalidez, como la atribuible al ruido y a las vibraciones, se agravan con el tabaco. En 1981 las consecuencias sociales y sanitarias del tabaquismo costaron 63.000 millones de pesetas. Y cada a?o mueren 40.000 espa?oles por causas relacionadas con el tabaco.
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