Toros en Italia

Zeus, enamorado de Europa, hija de Aginor rey de Fenicia, se hizo toro blanco para seducirla y llev¨¢rsela a Creta, donde fue madre de Minos, Rhadamantis y Sarpedonte.El rito t¨¢urico se adue?¨® de la Europa mediterr¨¢nea.

?Hubo toros en Italia? El caldo de cultivo fue el mismo: pues claro que s¨ª. Y cuando la dominaci¨®n espa?ola, con la paz de Cateau Cambresis, se injert¨® en la cultura renacentista en la pen¨ªnsula italiana, ferias un poco adormecidas recobraron vida.

Venecia fue la primera porque teniendo "cazas de toros" desde el siglo XI, y en tierra firme desde antes, les dio renovado esplendor. Se corr¨ªan toros tir¨¢ndolos por los cuernos o con lanzadas a pie en muchas plazas de la ciudad, y en el mismo palacio Ducal donde se tore¨® as¨ª en 1591 -como prueba un lienzo- hasta la prohibici¨®n de Napole¨®n.

En Roma, desde los ritos reintroducidos por el mismo Julio C¨¦sar y facilitados por la vecindad de la Maremma, donde junte, al b¨²falo pastaba el toro medio salvaje de tipo camargu¨¦s, el juego t¨¢urico sigue por lo menos hasta casi el reino de Italia. Dos espl¨¦ndidas litograf¨ªas coloreadas del franc¨¦s Villain dan cuenta de una forma de correr los toros a cuerpo limpio, y tambi¨¦n con muleta. El ejemplo m¨¢s destacado es el de Siena, donde en la misma plaza del Campo -en la que ahora se corre el palio-, el d¨ªa de la Virgen de la Paloma se corr¨ªan y se mataban seis toros. El antiguo cronista Cecchino nos ofrece un relato viv¨ªsimo de la fiesta del 15 de agosto de 1546, y un curioso cuadro de autor ignoto, que se encuentra en el museo de la ciudad, le da una espl¨¦ndida imagen.

Cuando, a la puesta del sol, la gente se iba de aquella plaza (porque de fiesta eminentemente popular se trataba), todos aparec¨ªan cansados y felices, aunque los heridos hubieran sido muchos y la plaza hubiera quedado ensangrentada. ?Felices por qu¨¦? ?Porque ven¨ªan de los toros! Parece que esta fiesta es (o puede ser), ni m¨¢s ni menos, que el directo antepasado del palio que se corre actualmente en el mismo d¨ªa de la Asunci¨®n.

?Italia tierra de toros? ?Qu¨¦ va! Pero s¨ª tierra de tradiciones t¨¢uricas antiguas, que nos permiten amar y comprender a los toros, sus ritos, sus desgracias y sus grandezas.