"Nos matar¨¢n a todos"

"Esperemos que ahora no digan las fuerzas de las Naciones Unidas que los culpables somos nosotros porque estamos echando a esos bandidos de Vraca y Grbavica", dec¨ªa ayer Zenka Montilio, una jud¨ªa sefard¨ª con su antiguo nombre espa?ol. Casada con un musulm¨¢n, perdi¨® su casa y todas sus pertenencias en el barrio de Grbavica, cuando fue tomado por la guerrilla serbia. "En casa se han instalado algunos, pero, seg¨²n alg¨²n vecino que sigue all¨ª, todos los electrodom¨¦sticos y muebles se los han llevado qui¨¦n sabe a d¨®nde"."El problema de las fuerzas de las Naciones Unidas es que vienen con car¨¢cter pacificador y tratan como iguales al ladr¨®n y a la v¨ªctima", dice Eyup Ganic, miembro de la presidencia de Bosnia-Herzegovina. "No hacen nada. Les provocan y les disparan y ni siquiera se atreven a identificar a quienes les est¨¢n atacando dice Minka, la mujer musulmana del serbio ?gor.

Alex Culic, un croata amigo. de la jud¨ªa sefard¨ª Zenka, de los musulmanes Damir y Minka y del serbio ?gor, tambi¨¦n ha sufrido la liberaci¨®n de una cafeter¨ªa que pose¨ªa en. la estaci¨®n de esqu¨ª de Jaholina, sede de los Juegos Ol¨ªmpicos de invierno en 1978. "Amigos serbios que viven all¨ª me han llamado para decirme que han desmantelado todo el interior del caf¨¦"

Ninguno de ellos cree en el alto el fuego ofrecido por el l¨ªder de la guerrilla serbia, Radovan Karadzic. "Est¨¢n locos. Creo que esto no terminar¨¢ nunca y nos matar¨¢n a todos. Ayer me dio una gran depresi¨®n al pensar que cuando envi¨¦ a mis hijos a Croacia no les di un ¨¢lbum de fotos nuestras para que tengan un recuerdo en el peor de los casos". Los hijos de los tres matrimonios mixtos viven en casas de amigos en Zagreb.