En Espa?a no hay racismo...
Nuestras conductas se rigen por principios de amor -al menos de respeto a los dem¨¢s-; alardeamos constantemente de nuestra avanzada cultura occidental; nos llevamos las manos a la cabeza, escandalizados, cada vez que en cualquier otro lugar del planeta se atenta contra alguno de los derechos humanos m¨¢s b¨¢sicos... Pero ?eso queda tan lejos! Nosotros vivimos en un pa¨ªs civilizado.... dicen.Pero no es ¨¦sa la impresi¨®n que he tenido en el metro. esta ma?ana. En Cuatro Caminos, a la salida, caminaba sumergida en mi propio mundo y me han sacado de ¨¦l unos golpes secos, el murmullo y el movimiento agitado de la gente: dos guardas jurados del metro pegaban a un hombre cuya piel era un poco m¨¢s oscura que las suyas, simplemente porque estaba intentando sacar algo de dinero vendiendo en los pasillos del metro y no ten¨ªa documentaci¨®n.
Es totalmente indignante. No tener documentaci¨®n y ser negro de ninguna manera justifica una agresi¨®n f¨ªsica. Y, ade-
Pasa a la p¨¢gina siguiente
En Espa?a no hay racismo
Viene de la p¨¢gina anterior m¨¢s, ?a qui¨¦n o a qu¨¦ hace da?o toda esa gente que pobremente se gana la vida, corriendo cada Vez que ven aparecer un guarda jurado, siempre de un lado para otro, sin protecci¨®n ... ?
Triste, ?no?
Lo ¨²nico gratificante de todo esto (si es que algo puede aplacar la rabia que me produce) es que un chico blanco ha defendido, a este joven negro, aunque recibiendo por ello el mismo trato, y que la gente que los rodeaba gritaba a los guardas para que los dejara en paz.
?En qu¨¦ mundo vivimos?
Evidentemente, en un mundo de blancos., En un mundo injusto, falto de solidaridad. En un mundo lleno de violencia. En un mundo, en fin, que todos y cada uno de nosotros hacemos d¨ªa a d¨ªa. ?Vamos a hacer algo por cambiarlo?
?Por qu¨¦ no nos ponemos en pie y nos enfrentamos todos a los abusos y a las injusticias de la misma forma que lo ha hecho ese chico blanco? Tal vez porque nos cuesta mucho levantarnos de nuestros c¨®modos sillones con la barriga tan llena.
Te admiro, chico valiente.
y ocho firmas m¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Vigilantes jurados
- Metro Madrid
- Densidad poblaci¨®n
- Opini¨®n
- CTM
- Poblaci¨®n
- Transporte p¨²blico
- Metro
- Inmigrantes
- Xenofobia
- Transporte urbano
- Seguridad privada
- Inmigraci¨®n
- Derechos humanos
- Empresas p¨²blicas
- Migraci¨®n
- Transporte ferroviario
- Sector p¨²blico
- Racismo
- Demograf¨ªa
- Discriminaci¨®n
- Delitos odio
- Transporte
- Empresas
- Prejuicios