Presente hist¨®rico

El uso del presente hist¨®rico en la redacci¨®n period¨ªstica proporciona frescura y actualidad a la narraci¨®n de hechos que sucedieron hace m¨¢s o menos tiempo: "Refiere un hecho pasado", explica el acad¨¦mico Manuel Seco Serrano, "al que se quiere dar tanta viveza como si ocurriese ahora realmente".El lector Francisco J. Oroz, de la Universidad de Tubinga, observa que en EL PA?S se viene produciendo un empleo incorrecto de tal presente -un "abuso de ese recurso estil¨ªstico", escribe-, y se?ala varios ejemplos recientes. Al pie de unas fotos han podido leerse estas frases: "Cruyff toca el bal¨®n ayer en el entrenamiento "LeMond muestra su alegr¨ªa el domingo...", "Abu Yihad, asesinado en 1991, desciende de un avi¨®n tras Yasir Araf¨¢t" y "Judith War sale ayer en un furg¨®n policial... ". Oroz considera -y considera bien- que la tendencia estil¨ªstica de acercar la acci¨®n al lector por medio de un tiempo que se refiere a la actualidad es loable, pero "no deber¨ªa tomarse como justificaci¨®n para saltarse a la torera la norma gramatical".

Son "frases b¨¢rbaras", dice, "en el sentido ret¨®rico de la palabra". B¨¢rbaras y censurables, "fruto de una mera equivocaci¨®n, de una interpretaci¨®n err¨®nea que va ganando terreno indebidamente, apoyado en la raz¨®n de la sinraz¨®n". ?C¨®mo es posible que Abu Yihad, asesinado el a?o pasado, descienda ahora de un avi¨®n? Un mal empleo, como en los otros casos, del presente hist¨®rico.

En tono jocoso, Oroz ha escrito unas extensas rimas a prop¨®sito de estos indebidos usos. Comienzan as¨ª: "Ayer soy, / ma?ana fui, / sin saber qu¨¦ decir de hoy / a la moda de EL PA¨ªS". Y concluyen: "Aunque algo chisgarab¨ªs, / soy fiel lector de EL PA?S".

La fidelidad se demuestra como lo ha hecho el lector, advirtiendo -con humor, pero lealmente- al peri¨®dico que una norma gramatical est¨¢ siendo mal empleada reiteradamente. Los autores de los textos reconocen que, en su af¨¢n por resaltar la actualidad de las fotograf¨ªas reproducidas, cayeron en el pecado de emplear incorrectamente el tiempo verbal.

Francisco J. Oroz tambi¨¦n llama la atenci¨®n acerca del extendido empleo de la palabra audiencia referida al ¨ªndice de lectores de los diarios y revistas. En EL PA?S del pasado d¨ªa 10 se repite por varias veces en un gr¨¢fico sobre los diarios m¨¢s le¨ªdos. "Audiencia, yo la relacionaba", escribe, "con audire, 'o¨ªr, escuchar', y yo no suelo o¨ªr, sino leer el peri¨®dico, a diferencia de lo que hago con la radio". Es cierto. La Real Academia Espa?ola admite el t¨¦rmino con el significado de auditorio de radio o televisi¨®n, pero de momento no pasa de esos medios. No obstante, es cierto asimismo que el empleo de audiencia en el sentido de "conjunto de personas que recibe en un momento dado un mensaje de un medio de comunicaci¨®n" -ya sea radio, televisi¨®n o prensa- est¨¢ muy extendido despu¨¦s de haber sido puesto en circulaci¨®n por los expertos en la medici¨®n del n¨²mero de oyentes, espectadores y lectores de los medios de comunicaci¨®n. Aunque, en efecto, ni se oye el peri¨®dico ni se lee la radio.

Pacense, no cacere?a

M¨¦rida est¨¢ en Badajoz. No cabe duda. Sin embargo, en EL PA?S del pasado d¨ªa 9, Inmaculada Ruiz, a prop¨®sito del Festival de Teatro, se refiri¨® a ella como "ciudad cacerefia". No es la primera vez que este lapsus geogr¨¢fico se escapa en las p¨¢ginas del diario. No sin iron¨ªa, la emeritense Nuria Mart¨ªn Espada pide al ombudsman que informe, "tanto a los redactores como a los lectores" del peri¨®dico, que M¨¦rida se encuentra en la provincia de Badajoz. La hist¨®rica Em¨¦rita Augusta siempre fue pacense.

Apoyo al 28M

El pasado 27 de mayo, v¨ªspera de la huelga general, EL PA?S public¨® un anuncio que llamaba a la solidaridad ciudadana en apoyo del paro; lo firmaban numerosas asociaciones y entidades. Entre ellas, al menos tres se han dirigido a la direcci¨®n del peri¨®dico quej¨¢ndose por haber sido incluidas indebidamente. El obispado de Bilbao, el Colegio de Economistas de Madrid y la Asociaci¨®n de Mujeres Inmigrantes Marroqu¨ªes afirman que no han hecho declaraci¨®n alguna de adhesi¨®n al 28-M.

Aunque EL PA?S no puede responsabilizarse, las protestas han llegado al ombudsman y ¨¦ste las ha trasladado a ?ngel Campos, secretario de informaci¨®n y publicaciones de la Confederaci¨®n Sindical de Comisiones Obreras, de donde parti¨® la orden de publicidad. Campos ha comprobado que, efectivamente, las tres protestas est¨¢n justificadas: "Realizadas las averiguaciones pertinentes", explica, "hemos comprobado que las citadas quejas tienen pleno fundamento". Todo ha ocurrido, cuenta, porque se confundi¨® "el apoyo personal de miembros de un colectivo con el apoyo org¨¢nico y oficial del rnismo". Y transmite el pesar de CC OO, que ofrece sus disculpas a las citadas organizaciones.

Art¨ªculo

Las palabras ¨¢rea y agua son del g¨¦nero femenino; de ah¨ª que haya quien escribe (EL PA?S lo ha hecho en m¨¢s de una ocasi¨®n) la agua y la ¨¢rea. Antonio Cintora Gil, desde M¨¢laga, lo se?ala y conf¨ªa en que se corregir¨¢ este error.

La Real Academia, en su Esbozo de una nueva gram¨¢tica, recuerda que se emplea el art¨ªculo el inmediatamente delante de sustantivo que empieza con acuando sobre esta vocal recae el acento de intensidad. Es el caso de ¨¢rea y agua.

El tel¨¦fono directo del Ombudsman es el 304 28 48.