La clara oscuridad

El rock ¨¦pico ha hecho mella en Espa?a y en Europa, en su aspecto comercial y masivo, con el cuarteto zaragozano H¨¦roes del Silencio. Su manera de ver la m¨²sica y su imagen se trasladaron a la sala Rev¨®lver con un nuevo grupo, Malas Artes, que present¨® un escenario repleto de candelabros, espejos y un par de botafumeiros que desprend¨ªan un intenso olor a incienso.Su repertorio demostr¨® una intenci¨®n clara: la b¨²squeda de la oscuridad dentro de un sonido grandilocuente. Basado en la percusi¨®n y el bajo, con el teclado como compa?ero discreto, el grupo recorri¨® el largo pasillo de lo poco sorprendente. Pura imitaci¨®n que no aport¨® nada a un estilo musical que, aunque conocido a trav¨¦s de otras bandas, puede dar espacio a la originalidad. Los temas de Malas Artes tienen momentos en los que la precisi¨®n y agilidad de los m¨²sicos es imprescindible, y fue ah¨ª donde qued¨® clara su debilidad.

Su gran defecto es parecerse demasiado a otros y no presentarse con personalidad. El crear, componer e interpretar bajo la pesada y absorbente sombra ajena, no hace sino anular la posibilidad de mostrar un trabajo original.