El polvor¨ªn del hambre

"Nunca vi un desastre de tal magnitud... Es un c¨ªrculo vicioso que afecta a la totalidad de la poblaci¨®n y donde las v¨ªctimas sufren de forma indescriptible hasta la expiraci¨®n. Nunca vi una situaci¨®n tan tr¨¢gica y masiva, que afecte tanto a nivel social como individual". Con estas palabras describe la situaci¨®n en Somalia el director general del Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja a su llegada de Mogadiscio. Y no es experiencia ante situaciones ca¨®ticas lo que le falta al delegado y actual director general de la organizaci¨®n humanitaria, Peter Fuche.

La acci¨®n humanitaria depende cada d¨ªa m¨¢s de los aspectos e intereses pol¨ªticos, por lo que la atenci¨®n pol¨ªtica determina la asistencia humanitaria, incluso en conflictos cerrados, como el que viven el Cuerno de ?frica y Somalia. Una vez superado el inter¨¦s estrat¨¦gico que supon¨ªa en pleno enfrentamiento de la guerra fr¨ªa, Somalia y sus seis millones de habitantes ya no interesan a nadie. "Sin embargo, la regi¨®n dispo ne de un arsenal incluso superior al que existi¨® en plena guerra de L¨ªbano", exclama el delegado general para ?frica, Daniel Tauxt. "Y, evidentemente, el que tiene un fusil ser¨¢ el ¨²ltimo en morir de hambre".El intento es desesperado por salvar a los 23 millones de personas que padecen la sequ¨ªa que afecta a la regi¨®n y las guerras tribales que ensangrientan a Etiop¨ªa, Eritrea, Sud¨¢n y Somalia.

En Somalia, los seis millones de habitantes viven una situaci¨®n ca¨®tica por la sequ¨ªa y por la inseguridad de las bandas armadas, mientras que Mogadiscio sigue dividida entre las dos facciones que luchan por el control del poder central. "La falta de representantes, la desaparici¨®n de todo rastro de administraci¨®n y justicia, ofrecen im¨¢genes dantescas", comenta una enfermera.

Desde principios de a?o son ya 64.000 toneladas de v¨ªveres las que han podido ser distribuidas especialmente a trav¨¦s de los 371 comedores p¨²blicos, que proporcionan una comida caliente diaria a 500.000 personas. Tal es la soluci¨®n adoptada ante el riesgo para las personas que transportan alimentos, que son atacadas indiscriminadamente.

En cuanto a los dep¨®sitos de v¨ªveres, los organismos humanitarios que trabajan en Somalia se han visto obligados a organizar patrullas armadas de protecci¨®n ante los ataques a los almacenes y a los convoyes que transportan los alimentos y medicamentos.

Venta de armas

Los arsenales abandonados por el Ej¨¦rcito central, ahora dividido, y la continua llegada de armamento proporcionado por los que no tienen escr¨²pulos ante el beneficio que proporciona la venta de armas est¨¢n prolongando indefinida mente el conflicto.Todas las agencias de Naciones Unidas est¨¢n presentes ante la tragedia que vive la regi¨®n, y, junto con el CICR, se ha establecido el plan de acci¨®n para el a?o en curso: al menos ser¨¢n necesarias 30.000 toneladas de v¨ªveres mensuales para hacer frente a los m¨ªnimos necesarios para evitar las muertes masivas por la hambruna. El 75% de la poblaci¨®n somal¨ª sufre actualmente de malnutrici¨®n, "y en algunos centros de acogida, como el de Baidoha, al norte de Mogadiscio, que acoge a unas 1.500 personas y donde el 90% sufre de malnutrici¨®n extrema, unas 50 personas mueren diariamente".

El Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja asiste y provee a seis hospitales que realizan hasta 250 operaciones semanalmente por heridas de guerra. Mientras, un equipo de cirug¨ªa m¨®vil recorre los puntos de enfrentamiento dispersos por el pa¨ªs y otros 30 centros de primeros auxilios atienden a los heridos hasta su evacuaci¨®n a los hospitales.

Entretanto, para motivar a la poblaci¨®n que a¨²n tiene algo de fuerzas y evitar que se conviertan en asistidos permanentes, el CICR est¨¢ distribuyendo 390 toneladas de semillas, 18.000 utensilios de labranza y se ocupa del control veterinario de los reba?os de las zonas menos expuestas atendiendo a 60.000 ovejas, unos 50.000 bovinos y otros tantos camellos, con unos 1.500 voluntarios de la Media Luna Roja somal¨ª.

En la sede de Ginebra, el CICR ha decidido hacer frente a la tragedia que vive la poblaci¨®n somal¨ª aumentando su presupuesto anual en 91 millones de francos suizos para establecer el presupuesto total de este a?o en 196 millones, el tercio del presupuesto total.

De Sud¨¢n a Kenia

Si en Somalia la situaci¨®n es dantesca, y donde, seg¨²n indican las agencias humanitarias de la ONU, al menos mueren cada d¨ªa 500 ni?os, el resto de la regi¨®n del Cuerno del continente africano no es menos tr¨¢gica. Desde Sud¨¢n hasta Kenia, el hambre originada por la sequ¨ªa y las guerras tribales est¨¢ originando un verdadero holocausto.En Etiop¨ªa, desde la ca¨ªda del r¨¦gimen de Menfistu, el CICR y el Alto Comisariado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) organizaron la repatriaci¨®n de 250.000 antiguos soldados de lo que fue el mayor Ej¨¦rcito del continente. Desde hace un a?o, m¨¢s de un mill¨®n de personas han intentado encontrar refugio en la capital, Addis Abeba, poblaci¨®n que vive, seg¨²n los delegados de la ONU, "en una miseria indescriptible".

A esta situaci¨®n se a?ade el retorno de 487.000 et¨ªopes refugiados en Somalia que huyen de los campamentos donde hab¨ªan sido acogidos ante la guerra y la sequ¨ªa que padece el pa¨ªs vecino. Otros 500.000 refugiados de Eritrea instalados en Sud¨¢n se encuentran en espera de mejores d¨ªas para el establecimiento de un plan de asistencia al retorno que deber¨ªa organizar el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

Entretanto, los combates que oponen al Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n de Sud¨¢n contra la Junta Isl¨¢mica en el poder en Jartum originan concentraciones humanas que huyen de los combates y se enfrentan a la sequ¨ªa. Ante el riesgo de desbandada humana, el Programa Alimenticio Mundial (PAM) intenta agrupar a m¨¢s de 130.000 personas en los campamentos de Am¨¦ y de Atetim, adonde las gentes llegan hambrientas y pr¨¢cticamente en espera de la muerte.