Perlas negras

La gracia m¨¢s conocida de Marilyn dice: "?Qu¨¦ me pongo para dormir? Unas gotas de Chanel 5". Pero es m¨¢s de ella la r¨¦plica sonriente a una violent¨ªsima bronca de John Huston ("iTraedme un rifle, que me la cargo!", lleg¨® a gritar el viejo cineasta) tras un retraso de seis o siete horas en el rodaje de The Misfiys: "?Que yo soy impuntual?", dijo ofendida. "?No ser¨¢ que usted tiene demasiada prisa?".La misma iron¨ªa reaparece en las -no transcribibles, pues no hubo testigos- demoledoras burlas sexuales que tuvo que soportar el millonario coleccionista de starlets Howard Hughes el d¨ªa que llev¨® a Marilyn a uno de sus escondrijos, y que hicieron gritar al grotesco personaje a sus gorilas: "?Echad de aqu¨ª a esta fulana, que me pego un tiro!".

Es la zona negra y melanc¨®lica del mon¨®logo que Marilyn mantuvo con sus innumerable interlocutores y que expresa con elocuencia su vivencia totalmente pesimista del ¨¦xito: "Lo m¨ªo tiene gracia: vivo como una ex puta, sin haber sido puta". "Cuando eres famosa, chocas con la naturaleza humana de forma casi brutal". "Un d¨ªa llev¨¦ a alguien al aeropuerto y vi un cine con mi nombre en el luminoso. Aparqu¨¦ el coche un poco m¨¢s abajo y me dije: "Dios m¨ªo, alguien ha cometido un error". "Cuando se es famoso, la debilidad, se acent¨²a". "Nunca entend¨ª bien eso de ser sex symbol. Siempre cre¨ª que los s¨ªmbolos son cosas que chocan unas contra otras. Ser sex symbol te convierte en una cosa y yo detesto ser cosa". "Hollywood es un prost¨ªbulo atestado. Aqu¨ª te pagan, 1.000 d¨®lares por un beso y 50 c¨¦ntavos por tu alma".