Los marroqu¨ªes de Pe?a Grande atrapan a un ladr¨®n, al que culpan de incendiar sus chabolas

Poco despu¨¦s de las 2.30 de ayer se acerc¨® una furgoneta al poblado de Pe?a Grande, donde d¨ªas antes ardieron 23 chabolas. Los miembros de este n¨²cleo, que montaban guardia desde el suceso, detuvieron y retuvieron a Francisco Javier G. R., de 21 a?os, hasta que lleg¨® la polic¨ªa. Los agentes tuvieron que pedir refuerzos, ya que los chabolistas no quer¨ªan entregar a su prisonero sin esperar a la prensa. El detenido, con 19 antecedentes por robo, declar¨® que s¨®lo iba a vender la furgoneta que acababa de sustraer. Seg¨²n testigos, el joven asegur¨® que iba a prender fuego a todas las chabolas.

Los vecinos de la zona de Pe?a Grande, en Fuencarral, no ganan para emociones. Los chabolistas marroqu¨ªes sufrieron un incendio hace una semana que destruy¨® 23 chabolas y derriti¨® las persianas de los chal¨¦s de enfrente. Y a los vecinos de estas casas una persecuci¨®n de pel¨ªcula les hizo saltar de la cama en la madrugada de ayer. Los marroqu¨ªes segu¨ªan, a pie y en coche, a una furgoneta. Lograron hacerse con su conductor y, armados de palos, le retuvieron. Al final, la polic¨ªa se llev¨®, tras recibir alguna pedrada, al supuesto pir¨®mano, que result¨® ser un ladr¨®n habitual. Las conversaciones y los comentarios mantuvieron al poblado en vela hasta que clare¨® el d¨ªa.Gabriel, que vive en una casa de la calle de Manuel Garrido, justo enfrente del macizo de chabolas que ardi¨® el domingo pasado, dice que oy¨® un ruido sobre las tres de la madrugada. "Vi una furgoneta que sal¨ªa del campamento a toda velocidad perseguida por magreb¨ªes", recuerda. "Fuego sali¨® disparado un Renault 12 verde conducido por un marroqu¨ª que segu¨ªa a la furgoneta y se fueron al otro lado de la manzana, a la calle del Marqu¨¦s de Villabr¨¢gima".

Gabriel llam¨® a la polic¨ªa. Un solo coche no pudo con la aglomeraci¨®n de marroqu¨ªes que, seg¨²n este vecino, hab¨ªan retenido al conductor de la furgoneta, Francisco Javier G. R., de 21 a?os. Al final se concentraron all¨ª 16 coches policiales, seg¨²n apuntaba la mujer de Gabriel. "Y hasta los antidisturbios", comenta. Los marroqu¨ªes, seg¨²n un portavoz de la Jefatura Superior de Polic¨ªa, contaron que el hombre hab¨ªa llegado a la furgoneta con otros dos acompa?antes, que hab¨ªan huido. Le acusaron verbalmente de ser el autor del incendio de sus chabolas.

Bego?a, del Centro Social San Rafael, que trabaja con los chabolistas, ofrec¨ªa anoche la versi¨®n de los marroqu¨ªes. "Desde el incendio, el poblado est¨¢ de guardia. No se duerme. Lleg¨® la furgoneta, con dos ocupantes. Un grupo de j¨®venes, que estaban sentados al fresco, fue a ver qu¨¦ quer¨ªan. Uno de los pasajeros se tir¨® en marcha y el conductor intent¨® atropellarles".

Cabeza rapada

Comenz¨® la persecuci¨®n, a pie y en coche. Le tiraron unos contenedores y la furgoneta qued¨® inmovilizada. "El chico, que ten¨ªa los laterales de la cabeza rapados y calzaba botas militares, llevaba una pistola a la espalda y empez¨® a huir a pie, cuesta arriba", prosigue Begofia. Los marroqu¨ªes le pillaron y le metieron en el coche. "Los testigos aseguran que el chico les amenaz¨® y dijo que en cuanto le soltasen, iba a prender fuego a todas las chabolas".

Los chabolistas utilizaron las piedras contra los veh¨ªculos de la polic¨ªa. Los magreb¨ªes no quer¨ªan que los agentes se llevasen a su prisionero sin que llegase antes la prensa. "Los marroqu¨ªes contaban que el hombre de la furgoneta ten¨ªa una lata de gasolina y una pistola, pero los vecinos no lo hemos visto", confes¨® Gabriel, uno de los vecinos.

Concha Rodr¨ªguez, otra vecina de Pe?a Grande, se despert¨® tambi¨¦n por el derrapaje de la furgoneta de Francisco Javier, que tir¨® todas las vallas de las zanjas de las obras de instalaci¨®n del gas. "Eran las 2.50. Llam¨¦ a la polic¨ªa", dijo Concha. Detr¨¢s del coche iban el Renault 12 y los chabolistas. Entre todos bloquearon al presunto incendiario. La vecina vio que algunos de los chabolistas iban a buscar palos a sus viviendas. "Yo creo que le pegaron", dice la mujer, "aunque no lo vi".

Malos tratos

El prisionero de los chabolistas explic¨® a los agentes de la comisar¨ªa de Fuencarral que le hab¨ªan maltratado. A?adi¨® que hab¨ªa robado la furgoneta esa misma noche y que hab¨ªa acudido al poblado a venderla. Seg¨²n la polic¨ªa, el coche ten¨ªa hecho el puente. Concha Rodr¨ªguez duda de esta versi¨®n y se pregunta: "?Vender la furgoneta a esas horas?". La polic¨ªa pudo comprobar que la furgoneta hab¨ªa sido robada esa noche y que el delincuente ten¨ªa 19 antecedentes policiales por delitos contra la propiedad.