"El pop se aguanta en la simpleza de sus estructuras", dice Pierre Boulez

Pierre Boulez, la m¨¢xima personalidad musical francesa, dirigir¨¢, los d¨ªas 1 y 2 de octubre en Madrid y los d¨ªas 4 y 5 del mismo mes en Barcelona, al Ensemble InterContemporain, que interpretar¨¢ obras del propio director, de Igor Stravinski y de Seboenberg. Boulez, que el viernes a las 11.00 hablar¨¢ en la Residencia de Estudiantes de Madrid, tiene tras de s¨ª una larga carrera internacional, pero volvi¨® a instalarse en su pa¨ªs cuando le aseguraron que podr¨ªa desarrollar un trabajo continuado y estable sobre la m¨²sica contempor¨¢nea. Sostiene que en los c¨ªrculos conc¨¦ntricos la m¨²sica contempor¨¢nea est¨¢ en el centro y que el pop se aguanta en el carisma de sus estrellas y la simpleza de sus estructuras.

Tal y como acostumbra a suceder en estos casos, se le reprochan a Pierre Boulez muchas cosas, desde el coste de su minoritaria aventura musical hasta el hecho de que su nombre figure o haya figurado al frente de muchas instituciones. Y es as¨ª que, en 1991, Michel Schneider, director general de M¨²sica, dimiti¨® declarando: "Hay que elegir entre Boulez y la m¨²sica"."Cuando empec¨¦ con el IRCAM (Institut de Recherche et de Coordination Acoustique-Musique) era una instituci¨®n que necesitaba alguien que la impulsara. Y lo mismo puede decirse del Ensemble InterContemporain, de la Cit¨¦ de la Musique de la Villette o de los inicios de la Sept o de la construcci¨®n de la ¨®pera Bastilla. Se trata de dar solidez a las iniciativas. Luego, cuando han cuajado, dejo la iniciativa a gente joven. Por ejemplo, ahora la direcci¨®n musical del Ensemble InterContemporain ,est¨¢ en manos de Davi d Robertson, que tiene 34 a?os. Desde que he podido ir dejando cargos, tengo m¨¢s tiempo para componer", explica, cort¨¦s, Boulez, que sabe que debe dedicar tiempo y argumentos a desmontar los reproches que le llegan desde todos los ¨¢ngulos.

80 conciertos

"Se repite que el IRCAM y la m¨²sica contempor¨¢nea no han logrado crear un p¨²blico, que son muy pocos los que se interesan por nuestro trabajo. Lo dicen quienes no saben que damos un m¨ªnimo de 80 conciertos al a?o, no se han mirado nuestro cat¨¢logo de grabaciones y nunca vienen a escucharnos. Ciertas obras llegamos a interpretarlas incluso en 40 ocasiones. El p¨²blico musical es algo parecido al infierno de Dante; hay distintos c¨ªrculos. A fin de cuentas, si se habla del virtuosismo de los int¨¦rpretes, tambi¨¦n podr¨ªa hacerse lo mismo hablando de los espectadores. En la naturaleza nada hay mejor repartido que la desigualdad. Ya s¨¦ que mi p¨²blico ser¨¢ siempre inferior en n¨²mero al de Michael Jackson. En los c¨ªrculos conc¨¦ntricos, que van ensanch¨¢ndose, la m¨²sica contempor¨¢nea est¨¢ en el centro, rodeada de la cl¨¢sica, del jazz, de las variedades y del pop, que se aguanta en el carisma de sus estrellas y en la simpleza de sus estructuras. Hay m¨²sica para cada p¨²blico y para cada momento. No me parece adecuado lavarse los dientes al son de Parsifal".A menudo, lo que m¨¢s le molesta es el escaso nivel de sus cr¨ªticos, de esa gente que asegura que, aparte de Boulez, no hay otros compositores en el IRCAM. "Todo eso me hace pensar en aquel eslogan del Mayo del 68 que dec¨ªa que la cultura es como la confitura: cuanto menos se tiene, m¨¢s hay que extenderla".

El Ensemble InterContemporain ha visitado pr¨¢cticamente toda Europa, y ha hecho giras por, Estados Unidos y Australia. Existe desde 1976, y est¨¢ formado por 31 solistas asalariados y reclutados a trav¨¦s de un concurso. "Creo que ¨¦se es uno de mis grandes triunfos", explica Boulez, "el haber logrado para la m¨²sica contempor¨¢nea una posici¨®n de profesionalismo id¨¦ntico al existente para las formaciones de la llamada m¨²sica cl¨¢sica. Es cierto que empleo mucho la palabra profesionaL Es fruto de mi etapa brit¨¢nica y americana. Quer¨ªa que se acabase el que la nueva m¨²sica estuviese siempre s¨®lo en manos de aficionados cargados de buenas intenciones, que no pudiera plantearse un trabajo de investigaci¨®n estable y continuado. El Ensemble y el IRCAM lo permiten, y todo por el precio de una orquesta sinf¨®nica".

Stravinski, Schoenberg y Boulez en el programa: "La idea es presentar en Espa?a el IRCAM y el Ensemble, dar una idea global de lo que hacemos. Stravinski y Schoenberg son los dos polos de la m¨²sica contempor¨¢nea. En Salzburgo escogimos un programa Debussy-Webern. Todo depende de tres factores: de la intenci¨®n que se quiere poner en la selecci¨®n de obras, de la realidad de la orquesta y del sitio donde tocas y de la demanda de quienes te invitan".

Las piezas escogidas dentro de la obra de Boulez son Le marteau sans ma?tre y Dialogue y r¨¦pons. Esta ¨²ltima, m¨¢s larga, "escrita para dos entidades distintas: un conjunto instrumental de 24 m¨²sicos situado en el centro de la sala y un grupo de seis solistas que rodean al p¨²blico y cuyos sonidos son transformados por un procesador num¨¦rico de la se?al ac¨²stica que trabaja en tiempo real", es la que mejor permite descubrir lo que aporta la tecnolog¨ªa al mundo del compositor y de los int¨¦rpretes.

Boulez no cree que pueda definirse la m¨²sica contempor¨¢nea, y se conforma con referirse a "una nueva manera de expresarse de quienes tienen cosas que decir". Respecto a la utilizaci¨®n de ordenadores en muchas de las obras salidas del IRCAM, est¨¢ convencido de que, "para la mayor¨ªa de los m¨²sicos, disponer de una computadora no es distinto de conducir un coche: no hace falta conocer c¨®mo funciona interiormente para sacar un gran provecho de sus prestaciones". El nuevo ordenador del que disponen sustituye al 4X, del que malas lenguas han llegado a murmurar que "s¨®lo se vendieron cuatro ejemplares, comprados por los aviadores, para sonorizar sus simuladores de vuelo, y por la Marina, para mejorar la detecci¨®n submarina, pero nunca por los m¨²sicos".

Est¨¢ muy contento de sus trabajos en colaboraci¨®n con Chereau o Peter Stein, y aprecia lo que recientemente ha hecho Peter Sellars con la ¨®pera de Messiaen: "El director de escena y el director musical deben trabajar juntos un m¨ªnimo de tres meses, poder ensayar ese tiempo; si no, carece de sentido hablar de colaboraci¨®n. Con Barenboim, cuando plane¨¢bamos lo que podr¨ªa hacerse en la ¨®pera Bastilla, pens¨¢bamos en equipos que colaborar¨ªan durante tres o cuatro a?os. ?l con Chereau, yo con Peter Stein, otro m¨²sico con Carlos Saura, etc¨¦tera". De la Bastilla habla en pasado y desde fuera. "Lo sucedido en Sevilla, el accidente, es un desastre debido a la falta de profesionalismo. Cuando se mont¨® ese Verdi nadie se preocup¨® de sus posibles bolos, y eso hizo que los cambios en el decorado tuvieran que realizarse sobre el terreno e improvisando. Adem¨¢s, ni el presidente, ni el administrador, ni el director de la Bastilla estaban en Sevilla. Me parece escandaloso y significativo de c¨®mo se llevan las cosas".

Sala moldeable

Con Stein espera montar en 1995, en Amsterdam, la obra de Shoenberg Mois¨¦s y Aaron, y en La Cit¨¦ de la Musique de la Villette conf¨ªa ver materializado su sue?o de la sala moldeable: "Ser¨¢ un local para 600 o 1.000 espectadores, en el que las butacas podr¨¢n cambiar de lugar, las paredes tambi¨¦n, y podr¨¢ modificarse la altura del techo. Los cambios deber¨¢n realizarse con rapidez y sin grandes dispendios. Los m¨²sicos podr¨¢n situarse tanto en el centro como en c¨ªrculo o en uno de los extremos. Adem¨¢s, La Villette propondr¨¢ un aut¨¦ntico museo de la m¨²sica que no ser¨¢ un museo de instrumentos, como casi todos, y que establecer¨¢ un puente entre la pedagog¨ªa y la vida profesional".En Madrid, Boulez act¨²a el d¨ªa 1 en el Auditorio Nacional y el 2 en el Palacio de los Deportes. En Barcelona, el d¨ªa 4 en el Palau de la M¨²sica y el 5 en el Mercat de les Flors.