Varios cientos de alemanes celebran el lanzamiento de los V-2 de Hitler

Varios centenares de personas, en su mayor¨ªa ancianos, acudieron ayer a la base de Pennem¨¹nde, en el B¨¢ltico, para conmemorar el 50? aniversario del lanzamiento del primer prototipo de los tristemente famosos cohetes V-2 que asolaron Londres y Amberes durante los ¨²ltimos a?os de la II Guerra Mundial.No se produjeron incidentes y los asistentes, casi todos ellos ingenieros y t¨¦cnicos que trabajaron con el equipo de Werner von Braun, destilaban tristeza por no poder celebrar como quer¨ªan el nacimiento de la "era espacial".

El 3 de-octubre de 1942, el primer misil supers¨®nico, cuyo nombre era A-4 y que alcanz¨® aquel d¨ªa una altitud de 90 kil¨®metros a una velocidad de 5.760 kil¨®metros por hora, fue lanzado con ¨¦xito desde esta base situada en la isla de Usedom.

La aviaci¨®n aliada destruy¨® poco despu¨¦s las instalaciones, y los V-2 se fabricaron en masa en el campo de concentraci¨®n de Dora, en Turingia, al coste de la vida de m¨¢s de 20.000 prisioneros de guerra y jud¨ªos que fueron obligados a trabajar en condiciones extremadamente crueles.

Se da la paradoja de que el arma m¨¢gica con la que Adolf Hitler pensaba ganar la guerra, seg¨® poco m¨¢s de 3.000 vidas en su cometido b¨¦lico y, seg¨²n los expertos, no proporcion¨® ninguna ventaja ni t¨¢ctica ni estrat¨¦gica a las tropas hitlerianas. La base de Pennem¨¹nde, despu¨¦s de la guerra, fue una de las principales instalaciones del Pacto de Varsovia.

Esta localidad estuvo absolutamente cerrada a la poblaci¨®n entre 1936 y 1990, y una de las razones que daban los organizadores del aniversario era, precisamente, la de promover el turismo.

Ayer, las cerca de 700 personas que acudieron al peque?o museo que guarda la parafernalia y la documentaci¨®n de todo lo referente a este primer misil, escucharon algunos discursos t¨¦cnicos y visionaron viejos documentales de la ¨¦poca.