"Soy un Don Juan de la ciencia"
A Georges Charpak se le nota el cansancio, bajo la euforia y la satisfacci¨®n, a los pocos d¨ªas de haber sido galardonado con el Premio Nobel. No ha tenido tiempo de acostumbrarse a la notoriedad. "Si me ofrecieran un mill¨®n de d¨®lares mensuales por ser famoso, aceptar¨ªa el trabajo s¨®lo un mes", dice. En el Laboratorio Europeo de F¨ªsica de Part¨ªculas (CERN), en Ginebra, donde trabaja, los colegas le paran por los pasillos para felicitarle. Bajo sus despachos, en un t¨²nel, est¨¢ el acelerador de part¨ªculas m¨¢s grandes del mundo. En esa m¨¢quina, con detectores que se basan en el principio por el que Charpak ha sido premiado, cientos de f¨ªsicos registran los choques de part¨ªculas para intentar comprender de qu¨¦ est¨¢ hecho el universo y c¨®mo son sus constituyentes elementales.
Pregunta. ?Que siente al ver esos gigantescos detectores de los que usted es, en cierta medida, el padre?
Respuesta. Me alegro mucho de no tener que construirlos y me sorprende que funcionen con tan pocos problemas. Lo m¨ªo es pensar en los detectores de la pr¨®xima generaci¨®n.
P. ?Cu¨¢ntos instrumentos ha inventado en su vida?
R. Unos 40, y de ellos no m¨¢s de ocho han tenido ¨¦xito, pero me gustan todos. No resisto el placer de solucionar los problemas cuando surgen. Toda mi vida he intentado solventar cuestiones de f¨ªsica como un jugador de ajedrez soluciona movimientos sobre el tablero. Soy como un Don Juan de la ciencia, una vez que un detector est¨¢ hecho, en vez de realizar la gran f¨ªsica que permite desarollar, prefiero hacer un instrumento nuevo. Tal vez sea un aspecto negativo de mi personalidad.
P. ?Es el detector de part¨ªculas por el que ha sido premiado su mejor idea?
R. Fue la m¨¢s f¨¢cil, pero no la m¨¢s bonita. En dos semanas de trabajo lo ten¨ªa muy claro y se construy¨® enseguida. Mi idea favorita, como un ni?o, es siempre la ¨²ltima.
P. ?Le gusta explicar cuestiones cient¨ªficas a la gente?
R. Me gusta explicar el origen del universo a damas encantadoras en un sal¨®n, que te escuchen porque suponen que sabes como empez¨® todo y que debes ser alguien extraordinario. Es una broma. Me gusta explicar cosas porque es una forma de explic¨¢rmelas a m¨ª mismo.
P. ?C¨®mo recibi¨® la noticia del premio?
R. Estaba en mi despacho muy cansado. Llevaba varias noches trabajando con los aceleradores del CERN, aprovechando el tiempo par¨¢sito que dejan los usuarios principales de estas m¨¢quinas. Es un proyecto muy excitante y algo no funcionaba. Estaba sentado, exhausto y triste. Me llamaron por tel¨¦fono y alguien del comit¨¦ de la Academia sueca me dijo que me hab¨ªan concedido el Premio Nobel. Me pareci¨® un chiste de muy mal gusto y no me lo cre¨ª. Luego me emocion¨¦.
P. ?Es significativo que dos f¨ªsicos franceses hayan sido galardonados en 1991 y 1992?.
R. Lo importante es que el premio ya no esta monopolizado por los americanos. Europa esta invirtiendo mucho en ciencia y estamos compitiendo con ellos. Los j¨®venes tienen ahora aqu¨ª las mismas oportunidades para realizar investigaci¨®n de vanguardia.
P. ?A qui¨¦n dar¨ªa usted el Nobel de F¨ªsica?
R. Hay dos o tres inventos muy importantes. Por ejemplo, unos experimentos de Relatividad General en que se han hecho mediciones con exactitud extraordinaria. Luego est¨¢ el grupo de George Smoot que ha detectado las inhomogeneidades en la radiaci¨®n de fondo [las fotograf¨ªas del origen de las galaxias en el universo primitivo]. Ellos consideran que se merecen el Nobel y para alguna gente es el descubrimiento del siglo.
P. ?Es usted un f¨ªsico experimental puro?
R. Me considero un te¨®rico de los instrumentos, porque adoro comprenderlos, pero soy muy malo construy¨¦ndolos. A mi alrededor hay f¨ªsicos que hacen equipos y si no les sale a la primera lo intentan cinco veces m¨¢s. Yo soy un impaciente y abandono. Nadie es perfecto, a mi me gusta leer, so?ar, estudiar... En casa no me dejan arreglar nada porque saben que soy la destrucci¨®n inmediata.
P. ?Qu¨¦ va a cambiar ahora en su vida?
R. En los ¨²ltimos a?os me he dedicado a buscar aplicaciones de las t¨¦cnicas de f¨ªsica de alta energ¨ªas a la biolog¨ªa y a la medicina, pero no es f¨¢cil encontrar gente y dinero para estos proyectos. He tenido ayuda, aunque en el CERN mucha gente considera desfavorablemente algunas desviaciones de la actividad principal, que es la f¨ªsica de part¨ªculas Logr¨¦ una subvenci¨®n y he puesto en el proyecto mi propio dinero, convirti¨¦ndome en una especie de empresario, de mal empresario. Ahora tendr¨¦ m¨¢s apoyo.
P. ?Por qu¨¦ le interesa la biolog¨ªa?
R. El contacto con cient¨ªficos de otros campos es muy estimulante. Yo estoy familiarizado con algunos problemas de biolog¨ªa, como la localizaci¨®n de electrones emitidos por elementos radiactivos que se introducen, como marcadores, en los tejidos de un animal.... Ped¨ª a unos amigos bi¨®logos unas lonchas de ri?¨®n de rata y a las pocas horas hab¨ªa logrado unas im¨¢genes excelentes con mi detector.
P. ?C¨®mo funciona?
R. Es muy sencillo. Son dos electrodos y un gas. Se aplica un voltaje y, cuando se libera un electron en ese gas, es acelerado por los campos el¨¦ctricos y se multiplica. El truco es detectar la luz emitida, con unos instrumentos diab¨®licos desarrollados para la guerra -intensificadores de im¨¢genes-. Los resultados tienen un detalle y una precisi¨®n nunca vistos, y son muy r¨¢pidos.
P. ?Ha dejado la f¨ªsica?
R. No, en absoluto. He dise?ado, por ejemplo, un detector de la materia oscura, esa masa que, seg¨²n los te¨®ricos, debe suponer un 90% del universo. Como nunca convencer¨¦ a nadie de que me d¨¦ diez millones de d¨®lares para detectar la materia oscura, lo he abandonado.
P. ?C¨®mo ide¨® la c¨¢mara proporcional multifilamentar?
R. Ahora parece algo trivial. Pero los instrumentos que ten¨ªamos hace 30 a?os eran demasiado lentos, y los te¨®ricos se estaban haciendo preguntas que exig¨ªan registrar miles de millones de interacciones de part¨ªculas para investigar fen¨®menos poco corrientes. Intent¨¦ entender el problema, empec¨¦ a probar: los polos negativos, los positivos... y vi que era maravilloso, muy r¨¢pido y eficaz.
P. Usted es profesor en la Escuela Superior de F¨ªsica de Par¨ªs.
R. Vivo en Par¨ªs el 50% del tiempo y el otro 50% en el resto del mundo. Me siento muy pr¨®ximo a Espa?a, a su cultura, y he intentado aprender espa?ol. Aunque vot¨¦ afirmativamente en el refer¨¦ndum sobre Maastrich, no quiero que los pol¨ªticos anulen las diferencias culturales de los pa¨ªses, que los uniformicen.
P. ?Le interesa la pol¨ªtica?
R. La sigo con una sensaci¨®n de frustraci¨®n. No me gustan muchas cosas, como la militarizaci¨®n sin sentido. Creo que deber¨ªamos moralizar nuestra sociedad en este aspecto.
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