Jos¨¦ Luis Cuerda presenta 'La marrana' en la Seminci

Fuera de concurso se estren¨® ayer en la Semana Internacional de Cine (Seminci) de Valladolid la pel¨ªcula espa?ola, escrita y dirigida por Jos¨¦ Luis Cuerda, La marrana.

Es una obra bien resuelta, divertida y un poco tosca, que fue bien acogida con ovaciones por el p¨²blico de a pie y que se intuye que puede resultar bastante comercial, gracias a las composiciones histri¨®nicas de los int¨¦rpretes Alfredo Landa y Antonio Resines.

Tambi¨¦n se estren¨® en el festival una coproducci¨®n hispanoeuropea titulada El marido perfecto, de mucha menor entidad. La secci¨®n a concurso flojea en estas ¨²ltimas jornadas.

?nicamente The long day closes, del brit¨¢nico Terence Davis, que viene a ser la continuaci¨®n natural, formalmente m¨¢s cuidada, de su anterior pel¨ªcula Voces distantes, es sin duda una pel¨ªcula importante, aunque inclinada a un preciosismo que la sit¨²a en calidades inferiores a las de la primera.

En menor grado, la pel¨ªcula Fuera de temporada, del suizo Daniel Schmidt -autor hace a?os de La Paloma-, que contiene indudables rasgos de buen cine, se eleva tambi¨¦n un poco por encima del nivel muy bajo que ha caracterizado estas ¨²ltimas jornadas del festival castellano, en el que se ha proyectado asimismo Historias de Tel-Aviv, una pel¨ªcula israel¨ª de muy escaso inter¨¦s.

El marido perfecto es una curiosa coproducci¨®n realizada entre Espa?a, Inglaterra, Argentina y Checoslovaquia, dirigida por el argentino Beda Docampo, interpretada por las espa?olas Ana Bel¨¦n y Aitana S¨¢nchez Gij¨®n, as¨ª como por los brit¨¢nicos Tim Roth y Peter Firth, y basada en la novela El eterno marido, del ruso Fi¨®dor Dostoievski.

Pero resulta muy simple de concepci¨®n y no alcanza nunca el enrevesado humor y la amargura de la formidable novela de donde procede. Se ve y se olvida.

La marrana parece una pel¨ªcula destinada al ¨¦xito seguro. De manera algo tosca, con tendencia a la escatolog¨ªa y al di¨¢logo de novela picaresca, Jos¨¦ Luis Cuerda construye un relato muy bien ordenado, s¨®lido y divertido, que atrapa con facilidad a la gente, sobre todo gracias a la contagiosa comicidad transmitida por Alfredo Landa, que da lecciones de buen histrionismo, de excelente sentido de la sobreactuaci¨®n, y tambi¨¦n a la sobria e igualmente divertida composici¨®n de Antonio Resines, cada d¨ªa mejor actor.

Dos p¨ªcaros y una cerda

La historia de La marrana es singular: un relato itinerante protagonizado por dos p¨ªcaros y una cerda por los caminos que, en el a?o 1492, conducen al reclutamiento, en el puerto de Palos de Moguer, de las tripulaciones de tres carabelas que, al mando de un tal Crist¨®bal Col¨®n, se van a meter en el lado oscuro e impenetrable de la mar en busca de no se sabe qu¨¦: la miserable trastienda de la fachada del Descubrimiento.