Checos y eslovacos viven con miedo los ¨²ltimos d¨ªas del Estado unitario

Los ¨²ltimos d¨ªas del proceso de divisi¨®n de Checoslovaquia "parecen un aut¨¦ntico delirio" y al finalizar en enero de 1993 "no dejar¨¢ piedra sobre piedra en un pa¨ªs, que se ha mantenido unido durante 74 a?os", seg¨²n afirman muchos de sus habitantes, tanto checos como eslovacos."Esa obsesi¨®n de dividir todo lo que se pueda resulta un tanto rid¨ªcula en una Europa que marcha a la unificaci¨®n", opina un jubilado, enardecido participante del club de debates a cielo abierto en,que se ha convertido en estos d¨ªas el monumento a San Wericeslao, en Praga.

"Con la divisi¨®n volvemos a vivir situaciones verdaderamente kafkianas, que durante el comunismo merecieron al pa¨ªs el nombre de Absurdist¨¢n, como sol¨ªan llamarlo sus propios habitantes", dice el anciano federalista.

Por paradoja hist¨®rica, las dos naciones eslavas se ver¨¢n separadas por la misma frontera que entre ellas impuso, en 1939, la Alemania nazi, al proclamar el Protectorado de Bohemia y Moravia.

Pese a todas las buenas intenciones de los Gobiernos de Praga y Bratislava de mantener la pol¨ªtica de puertas abiertas en la futura l¨ªnea divisoria, unos 220 kil¨®metros, los m¨¢s de 300.000 eslovacos instalados en la rep¨²blica checa se convertir¨¢n, con la llegada de 1993, en una de las minor¨ªas ¨¦tnicas m¨¢s numerosas en los pa¨ªses del centro de Europa.

Checos y eslovacos han conseguido entenderse sobre el reparto del patrimonio com¨²n, pero no pasa ni un solo d¨ªa sin que se produzca un duelo verbal entre Praga y Bratislava que amenaza con echar por tierra todo lo acordado y convertirse en un conflicto abierto.

Las dos rep¨²blicas tendr¨¢n sus propios Ej¨¦rcitos, el checo con 93.000 hombres y el eslovaco con 47.000, y se repartir¨¢n entre s¨ª todos los bienes de las actuales Fuerzas Armadas de la federaci¨®n checoslovaca.

El proceso de divisi¨®n del Ej¨¦rcito transcurre con relativa tranquilidad, si bien los representantes de Defensa se?alan que deber¨¢ admitir a cerca de 7.000 oficiales eslovacos que hasta ahora cumpl¨ªan su servicio en la rep¨²blica checa.