La Babel europea
Los norteamericanos que se preocupan por el hecho de que la lengua que hablan se est¨¢ convirtiendo en una cuesti¨®n superpolitizada ( ... ) deber¨ªan contemplar a los europeos, cada vez m¨¢s multiling¨¹es. Las crecientes dificultades ling¨¹¨ªsticas que afronta una Europa en proceso de unificaci¨®n son cuesti¨®n de una log¨ªstica abrumadora. Pero tambi¨¦n son un indicio de preocupaciones mucho m¨¢s profundas por la identidad nacional y cultural.Los estadounidenses est¨¢n acostumbrados a o¨ªr que el multiling¨¹ismo es una de las grandes ventajas que tienen los europeos sobre los norteamericanos al trabajar internacionalmente, y su carencia, una de las principales deficiencias que deben rectificar los reformadores educativos de Estados Unidos. Sin embargo, los sofisticados bur¨®cratas europeos son cada vez m¨¢s conscientes de que pasar de una lengua a otra conlleva problemas. Sin duda, los m¨¢s agobiados de todos los ling¨¹istas europeos residen en Bruselas, donde organizaciones como la CE y la OTAN utilizan los servicios de traducci¨®n e interpretaci¨®n m¨¢s grandes de] mundo. Los int¨¦rpretes comunitarios deben atender a multitud de bur¨®cratas furiosamente patri¨®ticos y muy susceptibles, que se sienten m¨¢s c¨®modos cuando hablan su propio idioma y que adem¨¢s son adictos a las reuniones. Con 12 Estados miembros y nueve lenguas oficiales, el equipo de int¨¦rpretes de la CE pasa mucho tiempo plante¨¢ndose c¨®mo conseguir certificar la igualdad de todas ellas.
27 de noviembre
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