La tercera dentici¨®n

Hasta hace poco m¨¢s de un cuarto de siglo los dientes que suced¨ªan a los de leche eran los definitivos y su p¨¦rdida s¨®lo pod¨ªa ser sustituida por pr¨®tesis removibles o sujetas a las piezas vecinas. La implantolog¨ªa dental ha revolucionado este planteamiento. Para Manuel Barrachina, experto en implantes osteointegrados, esta nueva t¨¦cnica permite gozar de una nueva dentadura, total o parcial, fija al hueso y para toda la vida. "Imitan fielmente en la funci¨®n, forma e implantaci¨®n a los dientes naturales, por lo que pueden considerarse como la tercera dentici¨®n", afirma.

Los implantes osteointegrados se introducen, mediante una sencilla intervenci¨®n quir¨²rgica, en el hueso maxilar y mandibular del paciente. La osteointegraci¨®n supone que el hueso natural crezca y se ponga en contacto con los implantes. ?stos, que hacen las veces de la ra¨ªz dentaria sobre la que se ancla la pieza visible, deben ser biocompatibles, es decir, que no produzcan ning¨²n tipo de alteraci¨®n en los tejidos, ya sea al¨¦rgica, infecciosa o de otra ¨ªndole.Seg¨²n explica Manuel Barrachina, los implantes suelen ser de titanio y pueden tener forma de tomillo o de cilindro. "La pieza que constituye el implante" indica, "se introduce en el hueso atornillada o a presi¨®n, seg¨²n el tipo.. No es necesario colocar tantos implantes como dientes o muelas se deseen poner. A veces dos implantes son suficientes para colocar un grupo de piezas dentales. Cuando hay total ausencia de piezas, se suelen colocar cinco en la mand¨ªbula y seis en el maxilar superior".

Candidatos

Este especialista advierte que no toda persona es candidata a los implantes dentales, ya que es imprescindible que exista cierta cantidad y calidad de hueso, con el fin de ev¨ªtar el fracaso en la osteointegraci¨®n. "No obstante", aclara, "en algunos casos es posible realizar injertos de hueso procedentes de otras zonas, como la regi¨®n de las muelas del hueso, el ment¨®n o la cadera. Tambi¨¦n podemos obtener hueso aplicando ciertas t¨¦cnicas regeneradoras de tejido ¨®seo".La intervenci¨®n quir¨²rgica mediante la que se colocan los implantes se realiza generalmente con anestesia local en la cl¨ªnica dental. S¨®lo en casos muy especiales se practica con anestesia general y en un centro hospitalario.

La operaci¨®n puede durar de 30 minutos a dos horas. Desde que el especialista da el primer paso hasta que el paciente puede disfrutar de sus nuevos dientes y masticar con. normalidad debe transcurrir un periodo de cuatro meses para los implantes de la mand¨ªbula y seis para los del maxilar.

Seg¨²n indica Barrachina, en un 5% de los implantes de la mand¨ªbula y en un 10% de los del maxilar puede presentarse el fracaso en la osteointegraci¨®n, debido a la mala calidad del hueso del paciente o a errores en la t¨¦cnica. "Pero esto no significa que no pueda intentarse de nuevo", advierte.

H¨¢bitos perniciosos

"En cualquier momento de la vida del paciente con implantes", a?ade, "podemos encontramos con que ¨¦stos se desunan del hueso. Las causas pueden ser la mala higiene dental, una sobrecarga masticatoria y ciertos h¨¢bitos perniciosos, como el rechinar. Esta ¨²ltima, llamada broxoman¨ªa, es frecuente encontrarla en personas nerviosas, angustiadas o sometidas a estr¨¦s y es bastante com¨²n en la actual sociedad competitiva".Los implantes osteointegrados se empiezan a practicar cuando ha finalizado el periodo de crecimiento de la persona. "Nunca operamos a las ni?as antes de los 14 a?os y a los ni?os antes de los 18. En lo que respecta a la edad m¨¢xima, no hay l¨ªmite, siempre que el paciente no presente riesgos que lo desaconsejen", dice Barrachina.

En opini¨®n del especialista, el mantenimiento de la dentadura total o parcial obtenida mediante implantes osteointegrados no debe ser m¨¢s riguroso que el de una dentadura natural: "Consiste en una higiene bien respetada mediante un correcto cepillado despu¨¦s de las comidas. Tambi¨¦n son muy importantes las revisiones peri¨®dicas para comprobar el estado de los implantes y de la dentadura. Huelga decir que estas personas pueden comer cualquier tipo de alimento y no deben partir con los dientes nueces, almendras, o cualquier objeto duro".

Barrachina asegura que las ventajas de la dentadura obtenida mediante implantes son muy superiores a las de las pr¨®tesis convencionales, sean totales o parciales, removibles o fijas. "Hay que tener en cuenta", se?ala, "que las piezas dentales osteointegradas son m¨¢s seguras, c¨®modas y est¨¦ticas y, por supuesto, son siempre fijas. El problema de las pr¨®tesis fijas convencionales es que hay que limar los dientes o muelas sanos pr¨®ximos al hueco en donde se coloca la nueva pieza, con el riesgo a?adido de que aparezcan caries".

Este experto admite que el precio de los implantes dentales no resulta accesible a cualquier bolsillo. La colocaci¨®n de piezas dentales mediante esta t¨¦cnica oscila desde 200.000 pesetas por unidad dentaria sobre un implante hasta dos millones por una dentadura completa. "Estos precios tan altos", agrega, "se justifican principalmente por los elevados costes de los materiales que se emplean".