Al amparo de la t¨¢cita aprobaci¨®n internacional

La operaci¨®n de ayer -que constituy¨® en s¨ª un nuevo desaf¨ªo a las fuerzas aliadas estacionadas en el ¨¢rea y que, seg¨²n algunos informes, incluy¨® elementos armados de pistolas- cuenta con una t¨¢cita aprobaci¨®n internacional. El Gobierno de Irak ha mantenido que sus acciones en los ¨²ltimos tres d¨ªas no vulneran las decisiones adoptadas por las Naciones Unidas.El ministro de Asuntos Exteriores del r¨¦gimen de Bagdad, Mohamad Said Al-Shahaf se encarg¨® de reiterar esta interpretaci¨®n en una escueta declaraci¨®n formulada ayer en El Cairo, la capital egipcia donde se re¨²ne la Liga ?rabe. "Lo que ha ocurrido en los ¨²ltimos d¨ªas ha sido con autorizaci¨®n de la ONU y el mando de las fuerzas de las Naciones Unidas en la zona lo sabe", dijo Al-Sahaf.

Para diplom¨¢ticos con base en la zona, Irak est¨¢ actuando convencido de que las incursiones no son de ning¨²n modo ilegales. Por el contrario, la recuperaci¨®n de material iraqu¨ª cuenta con impl¨ªcita aprobaci¨®n de la ONU en v¨ªsperas de que el plazo otorgado al efecto expira dentro de s¨®lo dos d¨ªas.

Esto ciertamente no coincide con la un¨¢nime impresi¨®n del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que el lunes por la noche conden¨® en¨¦rgicamente las "repetidas violaciones iraqu¨ªes a los t¨¦rminos del armisticio" y advirti¨® que ¨¦stas podr¨ªan generar "serias consecuencias".

Menos ambigua fue la advertencia estadounidense que, tras una semana de tensiones provocadas por los imaginativos desaf¨ªos iraqu¨ªes, se?al¨® que los aliados est¨¢n dispuestos a tomar represalias sin plantear ning¨²n previo aviso.

Provocar a Clinton

En varias capitales ¨¢rabes exist¨ªa ayer escasa inclinaci¨®n a pensar en una acci¨®n punitiva de los aliados, a pesar de la fuerza militar que se ha ido preparando y robusteciendo en la zona en la ¨²ltima semana. Para varios analistas occidentales y ¨¢rabes, el juego de Sadam Husein es claro: provocar al Gobierno saliente de George Bush para que Bill Clinton herede un problema indeseado a manera de venganza iraqu¨ª tras su estrepitosa derrota en 1991.

Primero fue la crisis de los misiles en la zona de exclusi¨®n a¨¦rea al sur del paralelo 32, en la regi¨®n de poblaci¨®n sh¨ª¨ª. Luego vino la prohibici¨®n iraqu¨ª a que los inspectores de la ONU utilicen aviones propios para desplazarse por el territorio de Irak. Finalmente, las incursiones al territorio de Kuwait.

"El r¨¦gimen de Bagdad se ha embarcado en una estrategia de desaf¨ªos para ridiculizar los ¨²ltimos d¨ªas del presidente George Bush en la Casa Blanca. Lo que Sadam Husein parece estar subestimando es la seriedad del p¨²blico compromiso del presidente electo de Estados Unidos, Bill Clinton, a mantener inalterable la pol¨ªtica de mano dura hacia Bagdad", coment¨® ayer un diplom¨¢tico europeo.