Noche de nervios

"Pobre, trabajando a estas horas", dijo el Rey a una periodista a las dos de la madrugada del martes.-Es mi deber, se?or.

-No sabes cu¨¢nto os lo agradecemos -termin¨® el Rey sin poder disimular cierta emoci¨®n.

Este di¨¢logo se produjo en el vest¨ªbulo del hotel donde la familia real pas¨® la noche. El Rey estaba dando las ¨²ltimas instrucciones a sus colaboradores y esperaba el ascensor para retirarse a su habitaci¨®n. Fue una jornada dificil durante la cual incluso lleg¨® a difundirse por radio y televisi¨®n [la cadena COPE y Canal Sur TV] la noticia de la muerte de su padre. Las primicias err¨®neas provocaron que incluso se guardara un minuto de silencio por don Juan en el Club Siglo XXI de Madrid durante una cena coloquio con el presidente del Tribunal Constitucional, Miguel Rodr¨ªguez Pi?ero.

El gesto del Rey agradeciendo el trabajo de los periodistas define bien las relaciones que La Zarzuela ha mantenido con los medios de comunicaci¨®n durante todo el proceso de la enfermedad de don Juan. La portavoz de la Casa del Rey, Asunci¨®n Vald¨¦s, dedic¨® tambi¨¦n sus primera palabras a agradecer la presencia de los informadores en la cl¨ªnica. "No hay raz¨®n alguna y ser¨ªa completamente absurdo romper la l¨ªnea de transparencia que La Zarzuela mantiene escondi¨¦ndoles a ustedes nada", dijo en respuesta a una pregunta. Se refer¨ªa al rumor del fallecimiento que a aquella hora, la una de la madrugada, circulaba por media Espa?a. "Ser¨¢n informados inmediatamente", asegur¨®.

La prensa ten¨ªa a aquellas horas pr¨¢cticamente tomada la planta baja del centro m¨¦dico. Ante la avalancha de periodistas y la tensi¨®n propia del momento, con las ediciones de los peri¨®dicos a punto de cierre y los boletines radiof¨®nicos y televisivos en antena, los responsables de la cl¨ªnica universitaria repartieron a los informadores necesitados de tel¨¦fono por los despachos de distintos servicios m¨¦dicos. En medio de aquel trasiego nervioso, la comparecencia de la portavoz sirvi¨® para acallar los rumores. Vald¨¦s ni siquiera cit¨® para desmentirlas a las emisoras que difundieron la informaci¨®n falsa.