El dopaje se estabiliza en las cotas m¨¢s bajas de los ¨²ltimos 24 a?os con s¨®lo un 0,8% de positivos

S¨®lo el 0,8% de los an¨¢lisis antidopaje da positivo, seg¨²n los datos del Laboratorio de Control de Dopaje de Madrid. En los ¨²ltimos tres a?os, el porcentaje de positivos se ha estabilizado entre el 0,7 y el 0,8, unas de las cotas m¨¢s bajas de los ¨²ltimos 24 a?os. Cecilia Rodr¨ªguez, la directora del centro, considera dichos porcentajes como representativos de la situaci¨®n del dopaje en el deporte internacional, toda vez que en Madrid se analizan muestras llegadas del mundo entero. Desde su creaci¨®n, en 1969, el laboratorio ha efectuado 37.916 an¨¢lisis en 37 deportes. El pasado a?o, el de Barcelona 92, fue el ¨²nico ol¨ªmpico en que el dopaje no aument¨®. Las muestras analizadas fueron 5.411. Los positivos, s¨®lo 42. Las sustancias dopantes identificadas, 54.

Los peores a?os en cuanto a porcentaje de positivos fueron 1971 (9,6%) y 1972 (8,9%). La implantaci¨®n sistem¨¢tica de los controles, que hasta ese momento hab¨ªan sido escasos, fue la causa de tan elevada cifra de fraudes. Con el paso del tiempo, la detecci¨®n del dopaje sigui¨® una curva irregular hasta los ¨²ltimos tres a?os, en que se ha estabilizado: 0,7% en 1990 y 0,8% en 1991 y 1992. En 1991, el COI efectu¨® un total de 53.165 an¨¢lisis en todos sus centros homologados, con 380 positivos (un 0,7%). Las cifras coinciden con las del laboratorio espa?ol.El de Barcelona ha sido el ¨²nico a?o ol¨ªmpico que no ha supuesto un aumento en los gr¨¢ficos del porcentaje de positivos. El caso m¨¢s claro, aunque no el ¨²nico, fue 1972 (M¨²nich), con un 8,9%. En 1988 (Se¨²l), la detecci¨®n alcanz¨® el 2,3%. En 1984 (Los ?ngeles), el mismo porcentaje. En 1980 (Mosc¨²), el 3,3%. En 1975, un a?o antes de los Juegos de Montreal, el porcentaje fue del 6,3.

De los 42 positivos de 1992, 22 se dieron en ciclismo, 7 en fisioculturismo, 4 en atletismo y f¨²tbol, 2 en remo y 1 en lucha canaria, halterofilia y pirag¨¹ismo. Se detectaron 54 sustancias dopantes distribuidas de la siguiente manera: anabolizantes, un 54%; estimulantes, 41%; narc¨®ticos, 4%, y diur¨¦ticos, 2%.

"El que s¨®lo un 0,8 de las pruebas analizadas haya dado positivo en 1992 es esperanzador. Demuestra que hay una in quietud, tanto en las autoridades contra el fraude como en los de portistas, cada vez m¨¢s conscientes del peligro que supone el consumo de determinadas sustancias. No nos enfrentamos s¨®lo a una desnaturalizaci¨®n del esp¨ªritu de la competici¨®n, sino tambi¨¦n a una amenaza contra la salud de los deportistas", declar¨® Cecilia Rodr¨ªguez.

La directora del laboratorio madrile?o puso como ejemplo la testosterona, la hormona por la que el canadiense Ben Johnson ha sido apartado de por vida de la competici¨®n. La utilizaci¨®n de dicho producto tiene nefastos efectos sobre el h¨ªgado, la piel y los sistemas endocrino y cardio vascular. "El peligro no existe s¨®lo para el atleta, sino tambi¨¦n para sus descendientes", a?adi¨® Rodr¨ªguez.

El 'caso Johnson'

El trabajo del laboratorio madrile?o ha ido creciendo progresivamente hasta alcanzar en la actualidad su m¨¢ximo rendimiento. De las 14 muestras analizadas en 1969 (cinco de la Vuelta Ciclista a Andaluc¨ªa y nueve del Seis Naciones de Atletismo celebrado fuera de Espa?a), el centro ha pasado a las 5.411 de 1992. El aumento m¨¢s significativo se produjo a partir de 1986. Ese a?o, el laboratorio trabaj¨® con 1.855 muestras. Desde entonces hasta ahora se ha producido un incremento del 291% en el n¨²mero de frascos recibidos.El ciclismo es, con diferencia, el deporte m¨¢s controlado: 20.309 muestras se han analizado desde 1969. Le siguen en orden de importancia el atletismo (3.957), el f¨²tbol (3.769), el pirag¨¹ismo (1.622) y la halterofilia (1.502). El resto de los 37 deportes tratados no supera el millar de controles. "Puede parecer exagerado, pero nunca se podr¨¢ igualar el ciclismo y el badminton, por ejemplo", coment¨® Cecilia Rodr¨ªguez.

La especial inquietud existente hacia el dopaje desde el may¨²sculo esc¨¢ndalo de Ben Johnson en Se¨²l tambi¨¦n puede apreciarse en el n¨²mero de a?os que algunas especialidades llevan controladas en el laboratorio de Madrid. S¨®lo seis llevan m¨¢s de 10 a?os sometidas a an¨¢lisis: ciclismo (24), atletismo (19), pirag¨¹ismo (16), boxeo (14), remo (11) y halterofilia (11). El resto de los 37 deportes han entrado posteriormente en los programas de detecci¨®n, la mayor¨ªa en los ¨²ltimos cinco a?os.

1992, por haber sido un a?o ol¨ªmpico cargado de acontecimientos, ha supuesto para el laboratorio espa?ol su m¨¢s alta cota de trabajo. Los resultados son muy interesantes. El 43% de los 5.461 an¨¢lisis efectuados se centra en los meses de mayo, junio y julio. El ciclismo, con 2.330 muestras recibidas, encabeza la clasificaci¨®n, seguido del atletismo (865), el f¨²tbol (641) y la halterofilia (308).

La relaci¨®n entre el n¨²mero de an¨¢lisis seg¨²n el tipo de competici¨®n y el porcentaje de positivos es inversamente proporcional. Los grandes campeonatos (Vueltas Ciclistas, Mundiales...) son los que menos muestras analizadas tuvieron en 1992: 574. Sin embargo, fue en esas pruebas en las que m¨¢s positivos hubo: un 2,43% del total de muestras.