La caza informativa del menor

Tres menores de edad son asesinadas y algunas cadenas de televisi¨®n utilizan a sus familiares para dar contenido a sus programas estrella, los llamados reality show o espect¨¢culo realidad. Una menor de edad se fuga con su profesor y se organiza una persecuci¨®n por parte de medios escritos y audiovisuales hasta que se la encuentra, y se publican sus fotograf¨ªas. Una ni?a de cinco a?os es raptada presuntamente por un arist¨®crata y algunos medios consiguen entrevistar a la ni?a, y nuevamente las televisiones, las revistas del coraz¨®n y los peri¨®dicos ofrecen im¨¢genes.

La ni?a de Sevilla tardar¨¢ mucho tiempo en olvidar la nube de periodistas, fot¨®grafos y c¨¢maras que ha visto en las pasadas 48 horas. "?Qu¨¦ est¨¢ sucediendo? ?Hemos perdido el norte y los m¨¢s elementales valores de respeto a la vida de las personas, especialmente de las m¨¢s d¨¦biles?", se pregunta Mar¨ªa Jes¨²s Eresta, coordinadora de varias organizaciones no gubern amen tales que han elevado su m¨¢s firme protesta a las cadenas de televisi¨®n TVE, Antena 3 y Tele 5 por el tratamiento informativo que se ha dado en especial al caso de la ni?a de Sevilla. Los propios instrumentos que tiene la sociedad para estar informada parece que se han vuelto contra ella."Con el tema de las ni?as de Alc¨¢sser y los casos posteriores nos enfrentamos, desde el punto de vista jur¨ªdico, a una situaci¨®n nueva, ya que no existe jurisprudencia", dice Marc Carrillo, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional de la Universidad Pompeu i Fabra de Barcelona y autor de varios libros sobre derecho a la informaci¨®n. "Pero lo que debe prevalecer en este caso de colisi¨®n de dos derechos, el de la informaci¨®n y el de la intimidad, es el derecho a la propia imagen, porque no media un inter¨¦s p¨²blico, sino que se busca el amarillismo y el sensacionalismo informativo con el fin de hacer de la informaci¨®n un espect¨¢culo".

Las leyes espa?olas (protecci¨®n del derecho al honor y a la propia imagen), la Convenci¨®n de los Derechos del Ni?o de la ONU, ratificada por Espa?a, y los c¨®digos de conducta profesionales rechazan estas actuaciones de los medios. Los padres o tutores legales de los menores deben comunicar al fiscal si dichos menores van a aparecer en los medios de comunicaci¨®n. Si el fiscal se opone, entonces deber¨¢ resolverlo el juez. Por otra parte, existen c¨®digos profesionales -el adoptado por el Colegio de Periodistas Catalanes y otras normas en libros de estilo de peri¨®dicos y algunas televisiones- que reclaman la protecci¨®n de la identidad de los menores.

Las asociaciones ciudadanas relacionadas con ni?os no est¨¢n y solas en la protesta. Los fiscales han anunciado medidas especiales, la Direcci¨®n General de Protecci¨®n Jur¨ªdica del Menor en ha denunciado el hecho como una violaci¨®n de los derechos fundamentales y el Defensor del Pueblo ha advertido a la Fiscal¨ªa General del Estado de la gravedad de esta pr¨¢ctica.

F¨¦lix Pantoja, fiscal de Menores de Madrid, no tiene empacho en admitir que "esto es un desmadre", y anuncia que los fiscales est¨¢n estudiando una forma de intervenci¨®n r¨¢pida de la justicia en estos casos. Juan Carlos Mato, director general de Protecci¨®n Jur¨ªdica del Menor, del Ministerio de Asuntos Sociales, estima que hay que acometer el problema de los padres o tutores m legales que inducen, por las razones que sean, a los menores a aparecer en los medios de comunicaci¨®n".

El debate se ha instalado tambi¨¦n dentro de la profesi¨®n period¨ªstica. "Como presidente de la Asociacion de la Prensa de Madrid y como Ombudsman (defensor de los lectores) de EL PA¨ªS", dice Jes¨²s de la Serna, "entiendo que se trata de una agresi¨®n muy grave a la infancia".

Si son perversos algunos de los casos recientes, tambi¨¦n resulta perversa la difusi¨®n de las im¨¢genes y de los nombres de los ni?os en esas circunstancias". El Libro de Estilo de EL PA?S indica: "En los casos de violaci¨®n, el nombre de la v¨ªctima se omitir¨¢, y solamente podr¨¢n utilizarse las iniciales o datos gen¨¦ricos (edad, profesi¨®n, nacionalidad), siempre que no la identifiquen. Tambi¨¦n se emplear¨¢n iniciales cuando los detenidos por la polic¨ªa o los acusados formalmente de un delito sean menores de edad (18 a?os)". Xavier O'Callagham, corresponsal de los lectores de Diario 16, es partidario de evitar, en la medida de lo posible, dar los nombres e im¨¢genes de los menores, pero se?ala que en el caso deAlc¨¤sser era inevitable publicar la identidad de las ni?as, que ya hab¨ªa difundido la polic¨ªa".

C¨®digo de ¨¦tica

Josep Pernau, presidente del Colegio de Periodistas de Catalu?a, se?ala que se est¨¢ vulnerando constantemente el c¨®digo de ¨¦tica period¨ªstica, primero que se ha adoptado en Espa?a, en el que se incluye la abstenci¨®n de dar los nombres e im¨¢genes de los menores en casos como los ya citados. "Desgraciadamente, todav¨ªa no se puede intervenir hasta que sea asumido por las empresas y se forme un comit¨¦ de seguimiento dice.Alfonso S. Palomares, presidente y director general de la agencia Efe, estima que no deben citarse los nombres de los menores, "especialmente cuando puede derivarse un da?o moral o f¨ªsico.

I?aki Gabilondo, director del programa Hoy por hoy de la cadena SER, se lamenta: "La ley de la audiencia, verdadero t¨®tem de la comunicaci¨®n actual, est¨¢ provocando el abandono de territorios sagrados como era el del tratamiento informativo de los menores".

Jos¨¦ Mar¨ªa Izquierdo, director de los servicios informativos de Canal +, se?ala: "Me parece de aut¨¦ntica verg¨¹enza saltarse los criterios de sensatez informativa de respeto a los menores".