El tribunal de Par¨ªs estudia suspender el juicio a Pakito hasta que testifique Parot
ENVIADO ESPECIAL Jean Yves Monfort, presidente del Tribunal Correccional de Par¨ªs n¨²mero 17, dio un nuevo e inesperado giro al juicio que se sigue en esta capital contra Francisco M¨²gica Garmendia, Pakito, y otros seis presuntos etarras. Este magistrado, tras comprobarse la negativa espa?ola a entregar como testigo a Henri Parot -jefe del comando itinerante, que permanece encarcelado en Espa?a- suspendi¨® el juicio hasta el pr¨®ximo viernes, con el fin de deliberar sobre la reclamaci¨®n de la defensa de que congele indefinidamente este proceso hasta que se materialice la presencia de dicho etarra.
Una vez m¨¢s, Monfort desautoriz¨® a la fiscal Irene Stoller, quien no s¨®lo hab¨ªa defendido la legalidad de la negativa de las autoridades espa?olas, sino que hab¨ªa reclamado al juez que se culminase ayer el juicio.La defensa, tras pillar a contrapie a Monfort, le emplaz¨® a que denunciase personalmente a Espa?a por incumplir los convenios firmados y trat¨® de enfrentar a los estados de ambos pa¨ªses por este conflicto.
Mientras los etarras abandonaban una vez m¨¢s la sala, esta vez entonando el Eusko gudariak [himno del soldado vasco], la defensa desvel¨® la importancia del testimonio de Parot: "Las demandas de extradici¨®n de Pakito y Fitti [Jos¨¦ Mar¨ªa Arregui Erostarbe] se basan ¨²nicamente en el testimonio de Parot; si Parot hubiera contado aqu¨ª c¨®mo le torturaron, los magistrados franceses nunca conceder¨ªan tales extradiciones", afirm¨® la abogada corsa Claire Freyssinet.
La se?as de M¨²gica
A las 13.50 de ayer, reaparec¨ªan en la sala del Tribunal de lo Correccional del Par¨ªs los siete presuntos inculpados por asociaci¨®n de malhechores. Pakito, con un jersei lila, manten¨ªa su sempiterna sonrisa y elevaba el pulgar en se?al de "chicos bien, moral ¨®ptima".
Tras reclamar Freyssinet que se bajara el nivel del cristal de la jaula donde se concentran los acusados, el presidente del tribunal, Jean Yves Monfort, explic¨® la negativa del Gobierno espa?ol a enviar a la sala como testigo a Henri Parot. Detall¨® que se basaba en el art¨ªculo 11 del convenio de ayuda judicial y bajo los siguientes pilares: la gravedad de los hechos por los que Parot -jefe de un comando con 46 v¨ªctimas mortales- hab¨ªa sido condenado en Espa?a; la alarma social que tales hechos hab¨ªan causado; la existencia de procesos judiciales todav¨ªa en fase de instrucci¨®n en los que se halla inmerso; su nacionalidad francesa [Francia no puede extraditar a sus ciudadanos, lo que podr¨ªa dificultar su devoluci¨®n]; la posibilidad de obtener su testimonio por otros medios y el insuficiente razonamiento de las autoridades francesas para mostrar la imperiosa necesidad del testimonio directo.
Monfort, tras repasar el citado convenio, declar¨® que efectivamente se puede rehusar la presencia de un testigo, ya sea por su propia negativa -la defensa replic¨® que Parot deseaba comparecer- ya sea por hallarse involucrado en sumarios a¨²n abiertos u otras razones "imperiosas".
Jon Gonz¨¢lez, abogado de los etarras, enfrent¨® al magistrado con su orden de la semana pasada para que Parot compareciese. "Usted orden¨® que Parot estuviese aqu¨ª [silencio esc¨¦nico]. No est¨¢ [nueva pausa del abogado]. Su demanda se transform¨® en una demanda del Estado franc¨¦s, ya no era una demanda de los abogados. Y Espa?a la ha rechazado". Incluso un ¨®rgano jurisdiccional "vilipendiado como tribunal de excepci¨®n, como es la Audiencia Nacional, se mostr¨® favorable al traslado a Par¨ªs del testigo". Este letrado toc¨® la sensible fibra jur¨ªdica y garantista de este magistrado: "Usted tom¨® una decisi¨®n hist¨®rica, como la Audiencia Nacional tom¨® la suya. Si usted puede traer aqu¨ª a Garmendia, considerado el n¨²mero uno de ETA [sonrisa de Pakito, con aparente humildad], c¨®mo no va a poder traer aqu¨ª a Parot. Usted no debe aceptar que un Gobierno extranjero viole sus decisiones y le presione".
"Escandaloso"
Gonz¨¢lez, consider¨® "escandaloso que el Gobierno espa?ol d¨¦ lecciones al tribunal sobre cu¨¢l es el mejor modo de obtener el testimonio de Parot". Finalmente, este letrado no s¨®lo solicit¨® que el juez suspendiera indefinidamente la vista hasta que se materialice la presencia de Parot, sino que ret¨® a Monfort a que denunciase a Espa?a por incumplimiento de los convenios de asistencia jur¨ªdica que suscribe.
El abogado Fran?ois Blanco fue m¨¢s lejos. Ret¨® al juez a que "sea valiente o sea c¨®mplice de los torturadores". Pero si este letrado evidenci¨® que el deseo ¨²ltimo de la defensa de los siete inculpados etarras es que Parot relatase en Par¨ªs las supuestas torturas a que fue sometido en Espa?a, la letrada Claire Freyssinet fue m¨¢s expl¨ªcita: "El Gobierno espa?ol ha presentado cuatro demandas de extradici¨®n contra Pakito y Fitti que se basan s¨®lo en el testimonio de Parot. Si ¨¦ste hubiera declarado aqu¨ª se hubiese demostrado c¨®mo se logr¨® por torturas su testimonio y los magistrados franceses que deben pronunciarse sobre su extradici¨®n las denegar¨ªan".
Los siete inculpados mostraron su deseo de abandonar la sala. Fitti fue el m¨¢s explosivo: "Constato que se sirve de declaraciones arrancadas bajo torturas. Se somete a decisiones pol¨ªticas, se est¨¢ ya camino de la condena". Con el pu?o en alto y entonando el Eusko gudariak dejaron una vez m¨¢s plantado a Monfort.
[El secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, consider¨® ayer "muy razonable y la ¨²nica que cabe en este caso", la negativa espa?ola a que Parot sea trasladado a Par¨ªs", informa Efe].
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.