De novios de la muerte a amantes de la vida

Han pasado seis meses inmersos en el laberinto de lo que fue Yugoslavia y regresan a casa con la satisfacci¨®n del deber cumplido y el sentimiento de haber hecho algo grande. Los hombres de la agrupaci¨®n M¨¢laga, que el lunes por la tarde aterrizaban en el aeropuerto de Almer¨ªa ante la expectaci¨®n de familiares y periodistas y sin recibimiento oficial, estaban felices por la vuelta y algo nost¨¢lgicos tambi¨¦n porque ahora vuelven a las maniobras, a la vida cuartelera y el paisaje familiar. En sus primeras declaraciones, los legionarios de la d¨¦cima bandera del tercio Alejandro Farnesio parec¨ªan evidenciar una sutil metamorfosis: la de dejar de ser novios de la muerte para convertirse en amantes de la vida.Ninguno de los reci¨¦n llegados hizo intenci¨®n de cambiar, su gorra azul por el chambergo que guardaron en la mochila hace medio a?o. La boina es un gal¨®n m¨¢s para todos ellos. El teniente Jes¨²s Diego de Lorente parec¨ªa algo aturdido sobre la pista del aeropuerto: "Necesito un poco de tiempo para pensar fr¨ªamente en lo que he hecho hasta ahora, ha sido muy distinto de lo que: esper¨¢bamos", reflexiona mientras su esposa aguarda impaciente para abrazarle. El sargento Jos¨¦ Castillo Cabrera, nacido en Sidi Ifni, quer¨ªa demostrar al periodista que lo hecho no ten¨ªa importancia. "Hombre, se han pasado momentos dif¨ªciles como puede haberlos en unas maniobras o en cualquier cosa que hagas en la vida".

Aunque con rostros y vocabularios diferentes, oficiales y legionarios aseguraban que estaban muy orgullosos de su papel, que est¨¢n convencidos de que Espa?a debe estar all¨ª e incluso, y no eran pocos, afirmaban estar dispuestos a volver si antes les dejan descansar.

El descanso ser¨¢ de menos de siete d¨ªas, porque aguardan unas maniobras en la pr¨®xima semana y hay que seguir con la vida diaria en los acuartelamientos.

El legionario Federico Garrido Felipe resum¨ªa as¨ª: "Lo mejor han sido los festivales por todo el morro. Ha estado bien lo del reparto del papeo. ?Que si entendemos lo que est¨¢ pasando all¨ª? La verdad es que todav¨ªa no. estamos en ello". Y sus colegas apuntan a voces: "?No estamos en Europa y todo eso? Pues entonces".

Los oficiales no ahorran elogios a sus muchachos. El teniente De Lorente reconoc¨ªa estar sorprendido con ellos en cierta medida. "Nunca hab¨ªamos convivido juntos tanto tiempo, pero a la larga se ha visto que son lo mejor que hay". Otros oficiales y suboficiales apuntan opiniones similares. No hay ninguna voz cr¨ªtica ni rastro de rivalidad hacia la expedici¨®n que les est¨¢ relevando, y que a mediod¨ªa de hoy embarca rumbo a Split desde Almer¨ªa a bordo del transporte Castilla.

El soldado Garrido hace coro con sus compa?eros, mientras espera la llegada del cami¨®n para salir. Se habla de las mujeres bosnias que han conocido, y El Garri se r¨ªe a carcajadas cuando asegura: "Est¨¢n muy buenas, pero tendr¨ªan que afeitarse el bigote".