A la historia de Francia
ENVIADO ESPECIALEl Limoges ha hecho historia en el deporte franc¨¦s. Lleg¨® como convidado de piedra y se llev¨® la Copa. Su inesperado ¨¦xito se bas¨®, adem¨¢s de en una gran defensa, en una moral a prueba de bomba. Supo jugar con el marcador a favor (frente al Madrid) y tambi¨¦n en contra (ante el Benetton). No tiene jugadores estelares, no tiene profundidad en su banquillo. ?C¨®mo es posible que haya podido ganar?
El h¨¦roe
Sin lugar a dudas, Bozidar Maljkovic. Con poco material en sus manos, ha dotado a sus jugadores de una confianza y solidez que para s¨ª quisiesen muchos. Aunque con muchos equipos como el Limoges se vaciar¨ªan las canchas, Maljkovic les ha hecho jugar de la ¨²nica forma en la que pod¨ªan hacer frente a superiores plantillas. Sus planteamientos, sobre todo frente al Madrid, pueden pasar a los anales de la estrategia.
Los derrotados
El Madrid ha supuesto el gran fiasco. Cav¨® su tumba antes de salir a jugar, pues la presi¨®n y la responsabilidad le hicieron tanto da?o como sus rivales. Los madridistas evidenciaron un defecto que ya se conoce como el mal de los espa?oles, esa enfermedad que impide rendir en las grandes ocasiones. El Benetton estuvo a punto de devolver el orgullo perdido al deca¨ªdo baloncesto italiano, pero no consigui¨® llegar a buen puerto. Manej¨® bien su encuentro con el Paok, pero quiz¨¢ pec¨® de exceso de confianza cuando dominaba con cierta claridad la final. Kukoc manda, pero la aportaci¨®n de Ruskoni e Iacopini ha sido una grata sorpresa. El Paok estuvo en su l¨ªnea, pero choc¨® con Kukoc.
El m¨¢s valioso
Kukoc: fue declarado con toda justicia el jugador m¨¢s valioso. Frente al Paok estuvo maravilloso y, aunque en la final, le cost¨® entrar en juego, apareci¨® en los momentos decisivos. No pudo redondear la faena y nunca olvidar¨¢ el bal¨®n que le rob¨® Forte en los ¨²ltimos segundos. Con ¨¦l, Levingston y Korfas (Paok), Zdovc (Limoges) y Ruskoni (Benetton) fueron seleccionados para el quinteto ideal del torneo. Ning¨²n jugador del Madrid fue suficientemente votado.
Individualidades
Sabonis era la m¨¢xima esperanza blanca, pero no pudo concretar su dominio. Veintiocho rebotes es una gran marca, pero su aportaci¨®n fue menor de la esperada, en gran parte por el bajo rendimiento del equipo. Young, un norteamericano del Limoges, fue otro de los destacados. Se tir¨® hasta las zapatillas, pero sirvi¨® de punto de referencia a sus compa?eros. Ruskoni fue una fortaleza debajo de los tableros.
El p¨²blico
Los miedos previos no se confirmaron. La afici¨®n griega, gracias a los continuados mensajes y amenazas si se produc¨ªan incidentes, anim¨® con pasi¨®n y correcci¨®n a su equipo tanto en su semifinal como en el deprimente partido por el tercer puesto.
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