La constructora del polideportivo que se hundi¨® en Huesca culpa a los arquitectos
Enric: Miralles defiende la "seguridad y coherencia totales" de su proyecto constructivo
La po¨¦tica carpa de ondas se desplom¨® a las cuatro de la madrugada del pasado martes. No es la pesadilla de un arquitecto deconstructivista, sino la noticia que recibi¨® con estupor un equipo encabezado por Enric Mirafles, de 37 a?os y uno de los m¨¢s brillantes profesionales de su geneaci¨®n. La nocturnidad evit¨® desgracias entre los obreros del vanguardista polideportivo de Huesca. Al parecer, uno de los anclajes de la cubierta cedi¨® y el techo se vino abajo. Ahora, mientras los peritos buscan responsables, la empresa constructora Auxini, del INI, ha acusado a los arquitectos de haber vendido un proyecto con deficiencias, indefiniciones y riesgos. Miralles defiende la "seguridad y coherencia totales" de su obra.
El Ayuntamiento de Huesca ha encargado dos informes, uno municipal y otro a la empresa Intemat, con el fin de valorar los da?os para la demanda posterior. Rafael Arnal Urroz, primer teniente de alcalde, explica que los caldeados ¨¢nimos entre los ciudadanos oscenses aconsejan el estudio de una nueva soluci¨®n para la cubierta (en los a?os setenta, el techo de otro pabell¨®n tambi¨¦n se hundi¨®, asimismo sin v¨ªctimas porque era un d¨ªa de invierno con sol y los obreros hab¨ªan salido a comer al exterior).Sobre el derrumbamiento del asado martes, Arnal Urroz dice: "Afortunadamente sucedi¨® de noche; s¨ª hubiese sido de d¨ªa, alrededor de 50 personas hubieran estado trabajando all¨ª. La idea sobre la posible causa es que, como la cubierta es colgante (en vez de estar apoyada en la estructura), sostenida en un lado por dos m¨¢stiles y en el lado contrario por seis anclajes, parece ser que uno de estos fall¨® y como consecuencia saltaron dos m¨¢s, y toda la estructura de la cubierta se desplom¨®".
La constructora del polideportivo, Auxini, se ha apresurado a publicar una nota diciendo que ejecut¨® el proyecto sigui¨¦ndolo fielmente. "Hemos advertido y avisado de todas las deficiencias, inconcreciones, indefiniciones y riesgos que hemos encontrado en el proyecto. Ya a Finales de octubre de 1992, apenas se percibieron las primeras deformaciones estructurales en el proceso de montaje de la cubierta, se pusieron en conocimiento del equipo de arquitectos para que adoptasen las medidas correctoras adecuadas".
El texto a?ade que, "ante la resistencia del equipo de arquitectos a reconocer las deficiencias del proyecto, Auxini encarga nuevamente en diciembre de 1992 otro informe al organismo oficial Centro de Estudios y de Experimentaci¨®n de Obras P¨²blicas (Cedex) acerca de la resistencia y estabilidad de los soportes de la estructura de la cubierta. Este organismo ya emiti¨® su informe en enero de 1993 dejando constancia clara de problemas existentes",.
Pronosticar desastres
La constructora considera lamentable que el Ayuntamiento, a quien se dio cuenta de los informes, y "ante la persistencia de incidencias y cambios sobre la marcha", no encargara un dictamen acerca de la seguridad y estructura del pabell¨®n.Ricardo Aroca, catedr¨¢tico de Estructuras y director de la Escuela de Arquitectura de Madrid, desconf¨ªa de esta nota de Auxini. "Desgraciadamente, las empresas constructoras est¨¢n acostumbradas a hacer lo que les da la gana, e intentan, cada vez con mayor descaro, pronosticar desastres para provocar cambios que les permitan subir los precios, ya que, en general, las obras se contratan a la baja".
Aroca dice que quien hizo la estructura de la cubierta, Agust¨ªn Obiol (responsable del proyecto junto a Miralles, Carme Pin¨®s y Luis Moya), "es extraordinariamente solvente". Piensa que ahora se debe reconstruir qu¨¦ es lo que pas¨®, ver si era correcto o no el proceso de tensado, y determinar qui¨¦n daba las instrucciones. "La Semana Santa algo debi¨® tener que ver con el asunto", supone Aroca, en el sentido de que puede haberse producido un error o dejaci¨®n en el tensado progresivo de los cables.
"No soy yo quien tiene que decir qu¨¦ ha sucedido", dice Enric Miralles. Miralles cree equivocado y poco ¨¦tico hacer cualquier valoraci¨®n hasta que el equipo de peritos no dictamine las causas del derrumbe. Miralles insiste mucho en que se trata de un trabajo colectivo y que es necesario "que se serenen las partes" para trabajar en una soluci¨®n. "Ahora hay un trabajo de limpiar y levantar. La estructura de hormig¨®n est¨¢ en buen estado, los m¨¢stiles tambi¨¦n, y hay que ver si la estructura portante se puede recuperar o no".
Respecto a la nota de Auxini, Miralles opina que se le puede dar la vuelta. "Ha habido una presencia permanente en obra, documentada en actas. ?Qu¨¦ empresa y con qu¨¦ responsabilidad, despu¨¦s de analizar un proyecto, decide contratarlo si ahora dice que est¨¢ indefinido? Prefiero callarme y esperar al informe de los peritos. Una obra es una negociaci¨®n constante, donde cada persona tiene entre manos sus propios intereses y los va defendiendo: los arquitectos, que se haga lo mejor posible; el Ayuntamiento, que se haga r¨¢pido, y la empresa, que la obra le produzca los beneficios que ella espera. ?Qu¨¦ sentido tiene un enfrentamiento p¨²blicamente en los medios? Ahora el tema se est¨¢ peritando y hay que esperar la soluci¨®n. Me f¨ªo m¨¢s de una opini¨®n justa que ahora de opiniones que produzcan enfrentamientos".
Unanimidad
La construcci¨®n del polideportivo se inici¨® en junio de 1991, y el Ayuntamiento dio una pr¨®rroga hasta el 31 de marzo de 1993, "fecha en la que tampoco lo hab¨ªan terminado", dice Arnal Urroz. La selecci¨®n del proyecto de Miralles se produjo por medio de un concurso a nivel nacional, con un jurado de arquitectos y pol¨ªticos. Se adjudic¨® por unanimidad, e inicialmente todos los grupos del Ayuntamiento (que preside el socialista Enrique S¨¢nchez Carrasco) estuvieron de acuerdo.El presupuesto supera los 1.500 millones de pesetas, pagados en un 40% por el Ayuntamiento y el resto por el Consejo Superior de Deportes y la Diputaci¨®n de Huesca y la Diputaci¨®n General de Arag¨®n. La obra est¨¢ situada en el cerro de San Jorge.
Babelia
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