Pepe Luis V¨¢zquez, a sus 12 a?os de matador: "Tengo la misma ilusi¨®n"

A. L., Cuando ya ha cumplido 12 a?os como matador de toros y ¨¦l mismo reconoce que su carrera ha sido "corta en actuaciones e irregular en resultados", Pepe Luis V¨¢zquez est¨¢ anunciado dos tardes en el abono sevillano (la segunda, en la feria septembrina de San Miguel), y afirma con rotundidad que mantiene la ilusi¨®n, el ¨¢nimo y la afici¨®n de sus inicios. "Si no fuera as¨ª", comenta, "ya me habr¨ªa aburrido; pero soy muy ambicioso como torero, y no dejo de aprender y de prepararme para poder cuajar un toro para satisfacci¨®n m¨ªa y, sobre todo, de mis partidarios".

El torero sevillano se enfrenta hoy a la tradicional corrida de Guardiola, que ya conoci¨® como novillero, y lo hace convencido de que "podr¨¦ desarrollar mi toreo si sale un toro con calidad, lo cual no es f¨¢cil en ninguna ganader¨ªa; pero mantengo la esperanza, porque en esta feria ya han roto varios toros".

Pepe Luis V¨¢zquez asegura que nunca descart¨® torear miuras y guardiolas, "pero reconozco", afirma, "que me cost¨® trabajo dar el paso para matar los toros de don Eduardo, y creo que lo hice en el momento m¨¢s adecuado y porque casi me obligaba mi reata".

El diestro comenta que "todav¨ªa estoy en buen momento, y tengo cosas que decir, y las dir¨¦ en cuanto se me presente la oportunidad adecuada". "S¨¦ que la afici¨®n de Sevilla me apoya y me espera", termina, "y tratar¨¦ de no defraudarla".

Grave cogida del cabestrero

Por otra parte, en la tarde del pasado s¨¢bado result¨® gravemente herido el cabestrero de la Maestranza, Manuel Cano P¨¦rez, al ser cogido por un toro de la ganader¨ªa de Peralta durante su reconocimiento como sobrero para la corrida de rejoneo celebrada en el festejo matinal de ayer domingo. El cabestrero sufre fractura de cadera, del f¨¦mur izquierdo y de varias costillas.

Al parecer, Manuel Cano P¨¦rez fue sorprendido por el animal cuando ya hab¨ªan finalizado las tareas del reconocimiento y el toro -que ten¨ªa los pitones despuntadosera trasladado hacia los chiqueros.