Clinton reclama la colaboraci¨®n de Europa para una acci¨®n colectiva contra los serbios de Bosnia

ANTONIO CA?O, El presidente norteamericano, Bill Clinton, hizo ayer un llamamiento a Europa a "actuar r¨¢pida y claramente" junto con EE UU para acabar con el desaf¨ªo por parte de los serbios bosnios a la voluntad de la comunidad internacional. "Estados Unidos ha expuesto ya cu¨¢l es su posici¨®n, y Europa tiene que entender que tiene que ir con nosotros", dijo Clinton, que inform¨® que ayer mismo, despu¨¦s de nuevas consultas con el Congreso y con los aliados, podr¨ªa anunciar nuevas acciones en Bosnia-Herzegovina como reacci¨®n al rechazo del plan de paz por parte del autoproclamado Parlamento serbio-bosnio.

Bill Clinton, que el pasado s¨¢bado decidi¨® que eran necesarias medidas militares para acabar con la limpieza ¨¦tnica en Bosnia, se?al¨® ayer que la decisi¨®n de la asamblea serbio-bosnia era una "t¨¢ctica dilatoria" que constituye una amenaza para la seguridad de Europa y urgi¨® a los pa¨ªses europeos a tomar "medidas colectivamente" en contra de los serbios. "La comunidad internacional no puede permitir esto", dijo Clinton en una primera y breve reacci¨®n a los acontecimientos en Bosnia. "Las acciones de los serbios", a?adi¨® el presidente norteamericano, "amenazan con extender el conflicto y la inestabilidad a otras partes de Europa de forma enormemente peligrosa. Su salvaje y c¨ªnica limpieza ¨¦tnica ofende la conciencia del mundo y nuestra forma de conducta".

Previamente, la portavoz de la Casa Blanca, Dee Dee Myers, hab¨ªa advertido que la decisi¨®n del Parlamento serbio-bosnio devuelve dram¨¢ticamente la atenci¨®n en Washington hacia "otras medidas", incluyendo accionesmilitares, para acabar con la limpieza ¨¦tnica en Bosnia.

Aunque los aviones norteamericanos no entren en acci¨®n en las pr¨®ximas horas, Clinton no puede dejar pasar mucho tiempo antes de tomar decisiones al respecto. Seguramente, pensar en una semana es pensar en el l¨ªmite que puede darse para el inicio de un ataque. Antes de eso, el presidente estadounidense tiene que dejar cubiertos los tres frentes en los que todav¨ªa existen dudas sobre la necesidad y eficacia de un bombardeo: el de los aliados europeos, el del Congreso norteamericano y el de la opini¨®n p¨²blica de este pa¨ªs.

Antes de anunciar una nueva decisi¨®n, Clinton ten¨ªa previsto mantener ayer una conversaci¨®n telef¨®nica con el presidente franc¨¦s, Fran?ois Mitterrand, el m¨¢s reticente al uso de la fuerza.

Al mismo tiempo, el presidente norteamericano, que el mi¨¦rcoles sostuvo una reuni¨®n con los l¨ªderes del Congreso para estudiar las pr¨®ximas iniciativas en los Balcanes, sostuvo ayer nuevos contactos con congresistas para decidir si. solicita formalmente al Parlamento una votaci¨®n sobre el bombardeo contra los serbios. La mayor¨ªa de los diputados se inclinan a recomendar a la Casa Blanca que antes de cualquier acci¨®n militar pase por el Capitolio, donde Clinton podr¨ªa encontrar ciertas resistencias, sobre todo en la C¨¢mara.

En cuanto a la opini¨®n p¨²blica, ¨¦sta ha ido evolucionando lentamente en la direcci¨®n de respaldar medidas militares en Bosnia, pero la ¨²ltima encuesta, publicada por el semanario Newsweek, reflejaba que todav¨ªa hay un 45% en contra.

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas analizaba ayer la nueva situaci¨®n que el rechazo del autoproclamado Parlamento serbio de Bosnia introduce en la escena internacional, informa Emmanuela Roig.

El Gobierno de EE UU cree necesaria la aprobaci¨®n de una nueva resoluci¨®n de las Naciones Unidas en el caso de que los aliados decidan adoptar medidas militares contra los serbios de Bosnia-Herzegovina. "Claramente tendremos que contar con otra resoluci¨®n de la ONU si se estudia la adopci¨®n de nuevas medidas", dijo el director de Comunicaci¨®n de la Casa Blanca, George Stephanopoulos.