Stroessner podr¨¢ volver a Paraguay si se enfrenta a la justicia, dice Wasmosy
ENVIADO ESPECIAL, El ex dictador de Paraguay Alfredo Stroessner podr¨¢ regresar al pa¨ªs de su exilio en Brasil cuando quiera, pero deber¨¢ afrontar sus responsabilidades ante la justicia. "Las puertas del pa¨ªs yo no se las voy a cerrar. Ahora las cuentas que tenga con la justicia no son con el Ejecutivo" dijo en una conferencia de prensa en Asunci¨®n el ingeniero Juan Carlos Wasmosy, de 54 a?os, elegido primer presidente civil de Paraguay despu¨¦s de 39 a?os. Wasmosy tambi¨¦n asegur¨® de forma categ¨®rica: "En absoluto voy a tratar de apa?ar nada que se oculte. Ni de narcotr¨¢fico, ni de contrabando, ni de nada".
Los ¨²ltimos c¨®mputos confirman la diferencia de Wasmosy sobre sus contrincantes por la presidencia. Coinciden las cifras del escrutinio oficial y del paralelo:- Wasmosy se mueve entre un 39% y un 40%. El abogado Domingo La¨ªno, de 57 a?os, del Partido Liberal Radical Aut¨¦ntico (PLRA), oscila entre un 30% y un 32%. El abogado y empresario Guillermo Caballero, del movimiento independiente Encuentro Nacional, se qued¨® en torno a un 27%.Wasmosy recibi¨® a la prensa el lunes por la noche en su hermosa casa colonial de Asunci¨®n. Se mostr¨® contrario a una ley de punto final sobre delitos pol¨ªticos o econ¨®micos y quiere dejar todo en manos de la justicia. Sobre los delitos que pudieran surgir del descubrimiento de los archivos de la polic¨ªa de la dictadura asegur¨® el nuevo presidente: "Los cr¨ªmenes que se vayan descubriendo s¨®lo falta denunciarlos, y ah¨ª est¨¢ la justicia. Tenemos un nuevo mecanismo y las cosas est¨¢n bien claras".
Wasmosy acepta el calificativo de continuista, si por ello se entiende consolidar el actual proceso democr¨¢tico en Paraguay. Se considera un hombre de transici¨®n, porque todav¨ªa no est¨¢ consolidada la democracia: se debe "consolidar una estabilidad econ¨®mica para poder aspirar a una estabilidad pol¨ªtica. Si no, el pueblo va a buscar alg¨²n mes¨ªas que piense por todos y volveremos a retroceder".Para Wasmosy, la, trilog¨ªa Gobierno-partido-Fuerzas Armadas se dio con la dictadura porque se produjo la coincidencia de que Stroessner era un general y al mismo tiempo jefe colorado. "Yo tengo la seguridad de que las Fuerzas Armadas cumplir¨¢n su papel de acuerdo con la Constituci¨®n nacional". Le parece m¨¢s dificil que algunos pol¨ªticos, incluidos los de su propio partido, comprendan los nuevos tiempos.
Sobre el Mercosur (mercado com¨²n de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, que debe iniciarse en 1995) parece mostrar cierto escepticismo: "Si no hay coordinaci¨®n de pol¨ªticas macroecon¨®micas, es muy dificil so?ar para el 95 con una zona totalmente integrada".
Muchos miles de paraguayos viven del contrabando. Sobre este problema declar¨®: "Ha llegado el momento de legalizar las cosas. Los valores est¨¢n trastocados. Aqu¨ª el que paga los impuestos es un zonzo, y el que no paga, un vivo. Tenemos que demostrar que, al pagar impuestos, eso revierte a la comunidad". Sobre los militares corruptos que protegen a los contrabandistas afirm¨® Juan Carlos Wasmosy: "Ir¨¢n al tribunal, como ya han ido dos".
El futuro presidente "deplora y condena" el corte de l¨ªneas sufrido el d¨ªa de la elecci¨®n por la organizaci¨®n Saka, encargada del c¨®mputo paralelo independiente de votos.
Millonario y neoliberal
J. C., Con el ingeniero Juan Carlos Wasmosy, de 54 a?os, los grupos econ¨®micos que ahora controlan Paraguay y se mueven en el entorno del general Andr¨¦s Rodr¨ªguez se han asegurado la continuidad de sus negocios y negociados. Al mismo tiempo queda pendiente la inc¨®gnita sobre el futuro de las relaciones entre el nuevo presidente y el Partido Colorado.
Wasmosy amas¨¦ una fortuna considerable que gan¨® como empresario contratista al amparo de las empresas que construyeron la represa de Itaip¨². Casado y padre de cinco hijos varones, Wasmosy adopt¨® una hija que forma parte de la familia. Se le considera muy cat¨®lico, y por eso de ni?o le pusieron el mote de Capilla. Vive en una enorme casa en Asunci¨®n, decorada con gusto y estilo colonial, donde abundan los santos como motivo de decoraci¨®n.
Wasmosy no es un colorado de pura cepa, y as¨ª se lo hicieron notar con frecuencia a lo largo de la campa?a, cuando le llamaron m?batara, nombre guaran¨ª para designar a una gallina de muchos colores. En contra de las ideas populistas del colorado t¨ªpico, Wasmosy defiende una econom¨ªa neoliberal, pero sobre ¨¦l pesa la m¨¢cula de haber ganado la elecci¨®n interna colorada por la v¨ªa del fraude contra el populista stroessnista Luis Mar¨ªa Arga?a, el candidato m¨¢s querido del pueblo colorado, ex canciller de Rodr¨ªguez y ex presidente de la Corte Suprema del dictador Alfredo Stroessner.
Para llegar a la presidencia, Wasmosy se ha rodeado de lo m¨¢s corrupto y despreciable de los colorados, pero al mismo tiempo de los cuadros m¨¢s modemos y prometedores. La inc¨®gnita abierta ahora es cu¨¢l de esos dos grupos conseguir¨¢ imponerse. Quienes le conocen le atribuyen capacidad negociadora.
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