"No hay ideas en el mundo, s¨®lo variaciones", dice Jane Campion

Jane Campion, directora de cine neozelandesa, ha confirmado su gran talento: despu¨¦s de Sweetie (1989) y Un ¨¢ngel en mi mesa (1990), volvi¨® a las grandes pantallas con El piano, que acaba de ser premiada ex-aequo con la pel¨ªcula china Adi¨®s a mi concubina, de Chen Kaige, con la Palma de Oro del Festival de Cine de Cannes, seg¨²n el palmares anunciado el lunes por la tarde. "No creo que haya muchas ideas en el mundo, s¨®lo muchas variaciones", dice la directora sobre la historia de un apasionado tri¨¢ngulo amoroso.

Su hero¨ªna, Ada, interpretada por Holly Hunter, premio a la mejor actriz, una preciosa mujer muda que no puede expresarse de otra manera sino tocando el piano, desembarca con su hija Flora en las tierras neozelandesas, donde la espera el hombre con la que la cas¨® su padre. All¨ª empieza la aventura con un mando y un amante de una mujer victoriana llena de coraje, cuyo destino nos recuerda el destino de las hero¨ªnas de Emily Bront?."No era una idea muy original", dice Jane Campion. "Adoro los libros de las hermanas Bront? y de all¨ª surgi¨® la idea de situarlas en Nueva Zelanda". La cineasta descubri¨® la obra de las hermanas Bront? durante la adolescencia, "como todo el mundo", dice. "Las hermanas Bront?, pero igualmente George Eliot, Jane Austen y las dem¨¢s escritoras", a?ade, "hab¨ªan escrito y crecido en unas circunstancias extremadamente dif¨ªciles. Para ellas no hab¨ªa mucha esperanza ni muchas posibilidades de elegir sobre si les hubiera gustado publicar su obra o descubrir su feminidad. Su vida y sus romances han sido tr¨¢gicos..."

?Se siente, pr¨®xima a ellas? ?Siente que tiene mucho en com¨²n? "Para nada", dice Jane Campion. "Adoro la vida en sociedad, me encanta ir de copas de un bar al otro, pero me fascinan los rasgos de estas mujeres tan excepcionales. Me digo muchas veces a m¨ª misma que me parezco a ellas por ser una artista seria".

La directora neozelandesa explica que la gestaci¨®n de su pel¨ªcula fue muy lenta, porque. empez¨® a escribir el gui¨®n en 1984. "Luego, de 1985 a 1990 trabaj¨¦ en mis pel¨ªculas anteriores, Sweetie y Un ¨¢ngel en mi mesa", dice, "aunque en ning¨²n momento dej¨¦ de pensar en mi historia g¨®tica. Por esta raz¨®n, la realizaci¨®n de la pel¨ªcula ha sido relativamente r¨¢pida, porque ya ten¨ªa todo m¨¢s que meditado en mi cabeza".

En la pel¨ªcula, el personaje del marido es poco rom¨¢ntico. Campion explica que "es el arquetipo del hombre civilizado. La civilizaci¨®n le ha quitado las emociones. Los sentimientos le asustan y por eso quiere controlar el mundo. Pero es el perdedor porque la vida es exigente y ¨¦l no lo sabe. ?l es incapaz de sentir lo irracional. Para ¨¦l, las cosas deben estar en su sitio: un marido debe amar a su esposa y a la inversa. ?Pobre! Eligi¨® a una mujer que no estaba hecha a su medida".

Frente al marido, la figura del amante est¨¢ representada por el actor Harvey Keitel. "Me pareci¨® id¨®neo para el arquetipo de un hombre primitivo, casi un animal. Un tipo poco civilizado pero con sentimientos y delicadeza", dice Campion.