Prepar¨¦monos
Lo ¨²nico que desear¨ªa, se?ores ministros, es que fueran conscientes de las consecuencias inmediatas de su "programa de acci¨®n com¨²n" en Bosnia-Herzegovina. No me detendr¨¦ a reflexionar sobre el hecho de que nunca he estado a favor del plan Vance-Owen, que acaba de ser rechazado y que hoy, comparado con vuestro programa, estar¨ªa pr¨®ximo a la Rep¨²blica ideal de Plat¨®n. Tampoco me detendr¨¦ sobre la pretendida inexistencia de otros proyectos de resoluci¨®n (consulten los archivos de sus ministerios o, al menos, los res¨²menes de prensa cotidiana o peri¨®dica). Para terminar, citar¨¦ de pasada la ¨²nica ventaja, si es que hay alguna, del plan Vance-Owen, que consiste en su capacidad de poner fin a la carnicer¨ªa y congelar la situaci¨®n a la espera de una soluci¨®n global para la totalidad del espacio yugoslavo. Ha resultado que ese plan era pura utop¨ªa, tanto debido a sus propios defectos como a una ilusi¨®n de la que yo mismo he sido v¨ªctima: ignoraba que vuestro entusiasmo a favor del plan mencionado no derivaba, seg¨²n parece, de vuestro conocimiento de los axiomas de la realpolitik, sino, muy al contrario, como me temo, de vuestra ignorancia de dichos axiomas.Dir¨¦ que:
1. En lugar de serenar, lo ¨²nico que har¨¢ la decisi¨®n de Washington ser¨¢ envenenar a¨²n m¨¢s el conflicto en Bosnia-Herzegovina;los habitantes de esos bantustanes que se quiere crear no ser¨¢n ¨²nicamente los negros (o indios, es decir, los musulmanes), sino tambi¨¦n otros bosnios (por eso es una hipocres¨ªa hablar, por ejemplo, de los 380.000 habitantes de Sarajevo como si fueran exclusivamente musulmanes; en Sarajevo siguen viviendo varios miles de serbios malos).
Venganza de los excluidos
2. Ahora, y para alegr¨ªa de Milosevic, de Tudjman y de los protagonistas de Washington, los musulmanes acabar¨¢n por ser musulmanes creyentes, no tanto por gusto hacia el fundamentalismo isl¨¢mico, sino por haber sido expulsados de Europa; prepar¨¦monos, pues, para las consecuencias de su desesperaci¨®n, la menor de las cuales no es el ¨¦xodo de la. poblaci¨®n, sino la posibilidad (le la venganza (terrorismo) de los excluidos.
3. El programa de Washington es un paradigma perfecto para todo el mundo: para Europa, la violencia tiene recompensas; ateng¨¢monos a las consecuencias de esta lecci¨®n, en primer lugar en el Este, e inmediatamente despu¨¦s en Occidente.
4. El programa confirma que es mucho m¨¢s ¨²til ser opresor al ciento por ciento; en Serbia, Milosevic, del que todo el mundo sabe lo que pienso, se ha convertido en un ser rid¨ªculo. Amenazado en el interior mucho m¨¢s que a nivel intemacional, Milosevic se comprometi¨® con el plan Vance-Owen para que despu¨¦s ¨¦ste se abandone en Washington a favor de los proyectos m¨¢s que extremistas de Seselj y Karadzic; Milosevic, que manten¨ªa su poder en Belgrado gracias a la di¨¢spora serbia y a la extrema derecha nacional-socialista de Serbia propiamente dicha, decidi¨® de repente -y poco importa su sinceridad- dar un giro. El principal responsable de la escisi¨®n del pueblo serbio, cada vez m¨¢s consciente de no reinar en Pale ni en Knin, sino en Serbia, el hombre fuerte de Belgrado, se vio obligado a arreglar cuentas con sus antiguos aliados. Y con gran probabilidad de ¨¦xito. Hasta se pod¨ªa esperar que, tras esa victoria, Milosevic fuera mucho m¨¢s vulnerable y, por tanto, las cosas estuvieran maduras para la alternativa democr¨¢tica; hoy, la alternativa a Milosevic no es la democracia, sino Seselj, ayer a sus ¨®rdenes y hoy aut¨¦ntico ganador en Washington; los ministros de Washington, que hasta ayer prefer¨ªan a Milosevic antes que a los dem¨®cratas serbios, parece que ahora han elegido a Seselj. En el actual estado de cosas, Serbia va inexorablemente hacia la represi¨®n contra todos aquellos que sean sospechosos de pertenecer a la oposici¨®n, hacia la muerte cl¨ªnica de toda idea democr¨¢tica.
Otro ganador
5. El otro ganador de Washington es Fran o Tudjman, presidente de Croacia. Hasta hace poco alter ego de Milosevic -y con justicia-, puede aparecer ante los ojos de su opini¨®n p¨²blica como un contrapeso que de seguridad frente a Seselj. Adem¨¢s, ha ganado un considerable territorio en Bosnia-Herzegovina, mayor del que pod¨ªa esperar (evidentemente para compensar los territorios tomados por los serbios en Croacia), y tiene luz verde para acabar de limpiar dem¨®cratas (o de malos croatas) las recientes adquisiciones territoriales.
6. Milosevic, tras haber impuesto en Kosovo el estado de emergencia, al que ha acompa?ado una represi¨®n sistem¨¢tica, ha preferido el mantenimiento del statu quo en esta provincia ex aut¨®noma. Contrariamente a lo que se pretend¨ªa, la guerra no conven¨ªa a sus intereses. Adem¨¢s, ah¨ª es donde ha fallado el ¨²nico fantasma nacional que sigue estando en vigor entre los serbios de Serbia, ya que no ha respondido a su deseo de reserbizaci¨®n de Kosovo. Es ahora, con el nuevo reparto de cartas de Washington, cuando puede desencadenarse un verdadero conflicto con todas las implicaciones internacionales que conlleva.
EE UU no ha querido enviar soldados a los Balcanes. La CE no ha querido la pax americana en Europa. Ahora estamos cerca de tener a los soldados estadounidenses, as¨ª como la pax americana, en pleno coraz¨®n europeo.
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