Bruguera: "En esta vida no hay que ser rencoroso"

Las recepciones a Sergi Bruguera en el Ayuntamiento de Barcelona y en la Generalitat de Catalu?a fueron ayer el ¨²ltimo acto protocolario para el campe¨®n de Roland Garros. Bruguera aprovech¨® la coyuntura para lanzar su mensaje de concordia: "En esta vida no hay que ser rencoroso" dijo, en clara referencia a los malos momentos pasados por sus discrepancias con Emilio S¨¢nchez. El lunes, Bruguera encontr¨® un mensaje de Emilio en el contestador de su casa en el que le felicitaba.

Desde el domingo por la tarde hab¨ªa recibido cientos de felicitaciones. Severiano Ballesteros le mand¨® un telegrama, Carlos Costa le telefone¨® varias veces, antes y despu¨¦s de la final en Par¨ªs. Pero cuando lleg¨® a su casa, Sergi Bruguera encontr¨® en el contestador autom¨¢tico una llamada que no esperaba."Sergi, he visto tu victoria y me he emocionado. Te felicito". Era Emilio S¨¢nchez Vicario.Llu¨ªs Bruguera, padre y entrenador del jugador, afront¨® el asunto de forma convincente. "Nosotros s¨®lo queremos retener esto y olvidamos de todo lo dem¨¢s", dijo. Casi de un plumazo enterr¨® m¨¢s de dos a?os de conflicto, vividos en su propia piel, en la de su hijo y en la del tenis espa?ol. "Incluso de los malos momentos se puede aprender mucho", a?adi¨® el campe¨®n de Roland Garros. "Y lo he hecho. Nadie debe ser rencoroso".

Bruguera lleg¨® al Ayuntamiento de Barcelona alrededor de la una de la tarde. Vestido con un traje oscuro y corbata, acompa?ado de sus padres, sali¨® al balc¨®n del Ayuntamiento y fue vitoreado por un numeroso grupo de chicas j¨®venes... y muchas personas m¨¢s. Despu¨¦s, el alcalde, Pasqual Maragall, estuvo con ¨¦l. "Nos dio lo que ten¨ªa. y algo que no sab¨ªamos que ten¨ªa: un coraje impresionante, resistencia y una moral de victoria que esperems que mantenga".

Desde que lleg¨® a la plaza de Sant Jaume, Bruguera fue perseguido por un numeroso grupo de fot¨®grafos y c¨¢maras de televisi¨®n. No le han desamparado desde su llegada al aeropueto de El Prat. Este es, probablemente, el aspecto que menos le gusta de su triunfo en Par¨ªs. "Soy muy t¨ªmido. Todo eso me desborda un poco", confes¨®. "De todas formas, lo acepto y aprecio lo que significa. Me doy cuenta de que he hecho feliz a mucha gente, y eso me ilusiona. No esperaba una respuesta como la que he tenido. Lo agradezco".

Despu¨¦s, Sergi y sus padres atravesaron la plaza de Sant Jaume, firmaron aut¨®grafos y almorzaron con el presidente de la Generalitat, Jordi P¨²jol. All¨ª concluyeron los actos oficiales. Pujol explic¨® que hab¨ªa visto algunos tramos del partido y el ¨²ltimo juego completo en casa del secretario general de Converg¨¨ncia Democr¨¢tica, Miquel Roca.