Buena orquesta para versiones mediocres

Actu¨® el s¨¢bado, para la Asociaci¨®n Filarm¨®nica, la Orquesta de C¨¢mara de Israel. Su director actual, Shlomo Mintz, queda clasificado en la nota de programa como "uno de los m¨¢s grandes violinistas de nuestro tiempo", y menos mal que tan favorables juicios no le son aplicados en su calidad de conductor. Si en el primer caso ya resultan exagerados, en el segundo ser¨ªan falsos de toda falsedad. Toc¨® con frigidez, pero con buenos medios y l¨ªnea, el Rond¨® en la, de Shubert, y el Concierto en re, escrito a los 13 a?os por Mendelssohn.Luego, dos arreglos, excelentes, de Barshai: las Visiones fugitivas, de Prok¨®fiev, y la Sinfon¨ªa de c¨¢mara, sobre el cuarteto octavo, de Shostakovich. Las versiones resultaron pobres, desdibujadas, planas y desmayadas hasta la desesperaci¨®n. Carentes de tensi¨®n y dramatismo, los pentagramas de Shostakovich sonaban irreconocibles, a pesar de que los instrumentistas del grupo poseen calidad individual. No creo haber escuchado nunca una m¨¢s feble lectura de esta obra que la que sirvi¨® Mintz.