Arrogancia iraqu¨ª
EL CONFLICTO entre una comisi¨®n de la ONU, encargada de controlar dos plantas de misiles, y el Gobierno iraqu¨ª alcanz¨® su m¨¢xima tensi¨®n el pasado domingo. No es un hecho nuevo. Desde el final de la guerra del Golfo, Sadam Husein ha hecho constantes esfuerzos por sabotear el cumplimiento de los compromisos asumidos en la firma del armisticio, sobre todo en lo referente a la destrucci¨®n de misiles de largo alcance, armas at¨®micas y qu¨ªmicas. Hace un a?o, los equipos de la ONU que insist¨ªan en inspeccionar el Ministerio de Agricultura de Bagdad por considerar que en sus archivos hab¨ªa documentaci¨®n referente al armamento nuclear, se encontraron ante un sistem¨¢tico obstruccionismo de los iraqu¨ªes, lo que provoc¨® amenazas muy serias de la ONU. Finalmente, el Gobierno de Sadam permiti¨® la labor inspectora.Gracias a la constancia de los t¨¦cnicos de la ONU se han dado pasos muy importantes en el cumplimiento de los acuerdos de paz e Irak ha sido privado de una cantidad considerable de su armamento m¨¢s peligroso. La colaboraci¨®n permiti¨® el inicio de negociaciones entre las partes implicadas sobre la posibilidad de un levantamiento parcial del embargo, lo que permitir¨ªa a Bagdad el vender una parte de su petr¨®leo. El incidente actual, que rompe la mejor¨ªa iniciada, ha surgido al rechazar el Gobierno de Sadam el que los inspectores de la ONU coloquen c¨¢maras de v¨ªdeo para vigilar los campos de pruebas de Al-Rafa y de Al-Jun al Azim, a unos 45 kil¨®metros de la capital de Irak. Se trata de impedir que el Ej¨¦rcito iraqu¨ª pruebe misiles de m¨¢s de l50 kil¨®metros de alcance, expresamente prohibidos por la coalici¨®n internacional vencedora en la guerra del Golfo. Ante la negativa de Irak, los inspectores de la ONU decidieron sellar provisionalmente los dos campos de pruebas mientras se negocia la colocaci¨®n de las c¨¢maras. Los iraqu¨ªes impidieron la clausura de dichos campos con el pretexto de que aceptarlo ser¨ªa sentar un precedente que luego podr¨ªa ser utilizado para colocar c¨¢maras de vigilancia en industrias que no est¨¢n sujetas al control de la ONU. Una vez m¨¢s, la actitud iraqu¨ª no se corresponde en absoluto con los resultados de la guerra.
Ante la negativa oficial, los inspectores de la ONU abandonaron el pa¨ªs. Ahora el problema est¨¢ en manos del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Cabe recordar que este Consejo, cuando se produjeron las primeras reticencias a la colocaci¨®n de las c¨¢maras, advirti¨® a Irak que podr¨ªa tener grav¨ªsimas consecuencias. La cuesti¨®n de fondo es impedir la recomposici¨®n del poder¨ªo militar de Bagdad.
Por otra parte, los principales dirigentes de E-E UU, el presidente, Bill Clinton; su vicepresidente, Al Gore, y Warren Christopher, secretario de Estado, se han apresurado a amenazar con una nueva represalia militar similar a los bombardeos a¨¦reos realiza(los el pasado 27 de junio como castigo por los preparativos de varios atentados contra el ex presidente Bush. Pero declaraciones de este g¨¦nero son inoportunas en estos momentos, porque siembran la confusi¨®n entre hechos de naturaleza distinta. Una cosa es la decisi¨®n unilateral de EE UU, sin ni siquiera informar a la ONU del citado ataque del 27 de junio -lo que le supuso severas cr¨ªticas al presidente Clinton, incluso en pa¨ªses tradicionalmente aliados de Estados Unidos-, y otra distinta es lo que ahora pueda decidir el Consejo de Seguridad.
La satisfacci¨®n despertada en la sociedad norteamericana por el bombardeo con misiles contra la sede del espionaje iraqu¨ª, y los efectos positivos en los ¨ªndices de popularidad del presidente Clinton, parecen haber provocado una inclinaci¨®n peligrosa en la pol¨ªtica exterior de Washington: la de utilizar los bombardeos a¨¦reos (por aviones o misiles) como un m¨¦todo normal y frecuente para responder a actitudes Consideradas perversas. En algunas declaraciones de l¨ªderes de EE UU se nota el deseo de realizar un nuevo bombardeo de Irak aprovechando el incidente con los inspectores de la ONU. Paro nada indica que ello sea la respuesta adecuada. El Consejo de Seguridad parece dispuesto a agotar todos los medios de presi¨®n diplom¨¢tica antes del uso de la fuerza y anoche el presidente de la Comisi¨®n de la ONU para el Desarme de Irak, Rolf Ekeus, anunci¨® que viajar¨¢ a Bagdad en "una misi¨®n de ¨²ltima oportunidad".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.