"Es bueno tener m¨¢s enemigos que amigos dentro del partido"
Juan Barranco, entonces dirigente de la Federaci¨®n Socialista Madrile?a (FSM), le convenci¨® en 1979 para ser concejal del PSOE en M¨®stoles. Jos¨¦ Luis Gallego ni siquiera intu¨ªa en aquel tiempo que podr¨ªa ser alcalde de esta localidad. Cuatro a?os despu¨¦s tuvo que dejar su trabajo de programador inform¨¢tico en la Renfe para ocupar por sustituci¨®n la Delegaci¨®n de Cultura y Juventud de ese municipio. A partir de ese instante, trabajando en el Ayuntamiento, Gallego qued¨® tan enganchado a la pol¨ªtica que no ha podido abandonarla a pesar de las bofetadas que ha recibido.Dedicado por entero al partido, siempre ha sido colocado en un segundo plano como eterno aspirante. Apoy¨® a Jos¨¦ Acosta hace tres a?os en el ¨²ltimo congreso de la FSM, cuando ¨¦ste se enfrent¨® a Joaqu¨ªn Leguina. Tambi¨¦n hab¨ªa apoyado a Acosta el anterior alcalde de M¨®stoles, Jos¨¦ Baigorri (quien dimiti¨® recientemente al no sentirse respaldado por su propio partido y quien se vio envuelto en un esc¨¢ndalo tras descubrirse que cobraba a la vez como alcalde y como pensionista por invalidez).
Pero Gallego dej¨® de apoyar a Acosta hace dos a?os, al sentirse traicionado. A partir de ese instante decidi¨® apuntarse a las tesis m¨¢s renovadoras del partido. Ahora, cuando segu¨ªa trabajando en la sombra, le ha llegado su oportunidad de ser alcalde y no la ha desaprovechado, a pesar de que vaya a gobernar un municipio con la amenaza constante de compa?eros de su propio partido.
Pregunta. Hace dos a?os, miembros de la ejecutiva federal le invitaron a renunciar a ser alcalde en favor de otro candidato, y usted acept¨®; pero ahora se ha mantenido firme, ?por qu¨¦?
Respuesta. Yo era el candidato legal para sustituir a Baigorri al no haber consenso y al ser el n¨²mero dos en una lista que se aprob¨® con el consentimiento del partido. Hace dos a?os acept¨¦ no encabezar la candidatura, acatando ¨®rdenes superiores, y renunci¨¦ a la alcald¨ªa a favor de Baigorri para estabilizar el partido. Aquel sacrificio est¨¢ claro que no ha dado resultados, y, por tanto, ahora me corresponde el turno para buscar una soluci¨®n.
P. ?Para ser alcalde ha tenido que quitarse de en medio a alguien del partido?
R. Mis actuaciones son p¨²blicas. Todo el mundo sabe que yo voy de cara, y no se puede hacer pol¨ªtica de espaldas a la gente. A partir de ahora voy a pasar de cotilleos y me voy a dedicar a trabajar.
P. Tambi¨¦n le acusan de haber desestabilizado el partido en los dos ¨²ltimos a?os y de provocar la marcha de Baigorri.
R. Si desestabilizar es defender unas ideas, se puede decir que soy un desestabilizador. Yo estoy en pol¨ªtica para defender tesis de las que tengo una convicci¨®n profunda.
P. Concejales del PSOE p¨²blicamente le han amenazado con devolver los golpes que dicen que usted ha dado.
R. Esa informaci¨®n sale de gente que tiene muy poca altura pol¨ªtica, aunque s¨¦ que son mis compa?eros. Lo que mucha gente no sabe es que hay una encuesta realizada en octubre donde soy el pol¨ªtico m¨¢s valorado de M¨®stoles, por encima del propio alcalde.
P. Sin embargo, ?no piensa que ha recibido muy pocos apoyos p¨²blicos desde el partido y que tan s¨®lo Joaqu¨ªn Leguina le ha apoyado?
R. Yo no quiero que nadie me respalde p¨²blicamente. Leguina s¨®lo ha puesto algo de l¨®gica en el proceso, porque ¨¦l sabe que no se pod¨ªan conculcar los derechos de un militante del partido.
P. ?Cree que la mayor parte de afiliados del PSOE de M¨®stoles le apoya?
R. Si supiera que no tengo apoyos no estar¨ªa aqu¨ª. Yo fui secretario general del PSOE en M¨®stoles desde 1982 a 1991 representando la mayor¨ªa de la agrupaci¨®n. El problema es que ahora mis seguidores no forman parte del comit¨¦ local.
P. ?No cree que al partido se le ha escapado el control de los problemas internos del PSOE de M¨®stoles?
R. Creo que esto no s¨®lo ha pasado en M¨®stoles, tambi¨¦n ha ocurrido en otras localidades, y puede repetirse mientras no se cierre la crisis interna que existe en el partido, que puede resolverse en el pr¨®ximo congreso.
P. ?Qu¨¦ va a hacer para borrar la mala imagen que est¨¢n dando los pol¨ªticos en M¨®stoles?
R. La culpa de todo la tenemos los propios socialistas, y, hay que seguir regenerando y reconduci¨¦ndolo todo. Ahora hay que ser m¨¢s tolerantes. Lo que no podemos hacer es esta4 toda la vida pidiendo perd¨®n. Ahora hay que trabajar por M¨®stoles y luchar por mejorar el h¨¢bitat y solucionar los problemas diarios.
P. ?Piensa que le van a apoyar los concejales que p¨²blicamente firmaron un escrito en su contra para que no fuera alcalde?
R. S¨¦ que voy a encontrar la colaboraci¨®n de todo el mundo, porque a partir de ahora hay que olvidar los problemas internos y trabajar por el bien de la ciudad. Como alcalde, la agrupaci¨®n me debe apoyar; como militante, todo es posible, como en pol¨ªtica.
P. ?Es cierto que usted siempre ha perseguido el puesto de alcalde?
R. Eso es falso. Yo no he perseguido este puesto y s¨ª mis ideas. No estoy aqu¨ª por sillones o por t¨ªtulos. Ser alcalde no era un puesto que me interesase especialmente y que me agradase. Ahora, sin embargo, he madurado mucho y dado este paso, porque es necesario trabajar de una vez y por todas para el pueblo de M¨®stoles.
P. ?Eso ser¨¢ posible a pesar de todos los enemigos que tiene?
R. Todos los que hacemos pol¨ªtica tenemos enemigos y amigos, y es bueno tener pocos amigos y muchos enemigos dentro del Partido Socialista. Yo s¨¦ que tengo muchos m¨¢s amigos entre los vecinos que no tienen ninguna vinculaci¨®n pol¨ªtica.
P. Tambi¨¦n dicen que es usted un poco chulo y prepotente.
R. Yo creo que esos insultos descalifican al que los hace.
P. ?Qu¨¦ imagen, por tanto, cree que tiene la gente de usted?
R. Yo no soy un buen relaciones p¨²blicas, pero s¨¦ que soy un trabajador nato y un hombre de izquierdas que lucha por M¨®stoles, y por transformar la sociedad. Mi objetivo es conseguir que esta ciudad sea rica en infraestructuras y servicios.
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