Un ¨¦xito de torer¨ªa y bravura

Arjona / Agudo, Del Carmen, GallegoCinco novillos de S¨¢nchez Arjona, justos de presencia, c¨®modos de cabeza excepto 4o, flojos y mansos; 5% sobrero de La Guadamilla, con trap¨ªo y casta.

Regino Agudo: silencio; oreja con algunas protestas. Jes¨²s de Carmen, de Madrid,

nuevo en esta plaza: aviso y ovaci¨®n; pitos. Pepe Luis Gallego, de Salamanca, nuevo en esta plaza: ovaci¨®n; oreja.

Plaza de Las Ventas, 17 de julio. Festejo nocturno. M¨¢s de un tercio de entrada.

EMILIO MART?NEZ,

La novillada nocturna con picadores que se celebr¨® el s¨¢bado en Las Ventas constituy¨® un ¨¦xito por la torer¨ªa que flamearon los espadas, mayormente Regino Agudo y el debutante Pepe Luis Gallego. Un gent¨ªo con mezcolanza de la reserva de aut¨¦nticos aficionados, exigiendo como corresponde a tan sagrada condici¨®n la autenticidad del espect¨¢culo, y gran n¨²mero de j¨®venes y ni?os que aprovecharon que pod¨ªan entrar gratis, disfrutaron de un interesant¨ªsimo festejo.

Un feste o que alcanz¨® cotas j

de ¨¦xtasis para ese sanedr¨ªn vigilante de aficionados de buten!, (y tambi¨¦n para los j¨®venes primerizos) con el derroche de casta del sobrero de La Guadamilla, un palad¨ªn de la bravura en grado sumo que les hizo so?ar en la noche con que la perfecci¨®n del toro de lidia existe.

L¨¢stima que el bicorne correspondiera a otro debutante, pero ¨¦ste, ?ay!, con escas¨ªsimas actuaciones en su carrera. As¨ª, Jes¨²s de Carmen, que hab¨ªa exhibido tanto valor como verdor t¨¦cnico en su primero, con el que apunt¨® un toreo agitanado y de detalles art¨ªsticos con la izquierda, desaprovech¨® ese torrente de casta pura. El novillo -de nombre Cristalero, un puro diamante acudi¨® alegre cinco veces al caballo y en todas se creci¨® al palo sin el menor s¨ªntoma de debilidad. Despu¨¦s tom¨® codicioso y hocicando la arena, la sarga que le ofrec¨ªa, su matador, siempre desbordado, pero sin ciscarse.

Cristalero entreg¨® la vida de pie en el platillo, con feroz resistencia en su agon¨ªa.

Las orejas que cortaron Agudo y Gallego deben servirles cual necesario b¨¢lsamo de Fierabr¨¢s con que adornar sus a¨²n cortas hojas de servicios. Agudo sorprendi¨® por una no muy habitual en ¨¦l quietud frente a sus mansazos. Junto a esta gran dosis de pundonor cascabele¨® algunos excelsos muletazos extra¨ªdos a base de porf¨ªa.

La caricia de las ver¨®nicas de Gallego alumbr¨® la noche de luminosidad y hermosura. Canela, terciopelo y t¨¦cnica festone¨® igualmente el salmantino con la pa?osa tambi¨¦n frente a dos mansotes nada colaboradores.