El pianista Luis Galve y el compositor Ant¨®n Garc¨ªa Abril, premios nacionales de M¨²sica 1993

El pianista Luis Galve (Zaragoza, 1908) y el compositor Ant¨®n Garc¨ªa Abril (Teruel, 1933) han obtenido los premios nacionales de M¨²sica 1993, seg¨²n anunci¨® ayer el Ministerio de Cultura. Luis Galve dio su primer concierto en Zaragoza a los cinco a?os. Se traslad¨® a Madrid para trabajar en el conservatorio y, por consejo de Rubinstein, march¨® a Par¨ªs, en donde fue disc¨ªpulo del gran Isidore Phillip.A partir de ese momento el nombre de Galve se extendi¨® r¨¢pidamente por Europa y Am¨¦rica gracias a las diversas y largas giras que realiz¨®. Cuando el estilo de Galve inici¨® su andadura, algo nuevo empez¨® a sonar en el ambiente musical. La serenidad, el equilibrio, la fidelidad al texto, la valoraci¨®n de cada nota y de todo el conjunto de las partituras, puestas al servicio de una alta idea art¨ªstica y de una expresividad no por sobria menos expresiva , fueron aut¨¦nticas novedades. Colabor¨® Galve con los principales directores espa?oles y extranjeros, dict¨® cursos en Francia, Espa?a, Argentina y Puerto Rico, recibiendo los m¨¢ximos elogios por sus versiones ejemplares de Scarlatti, Mozart, Beethoven, Mendelssohn, Bramhs, Villalobos, Falla, Granados y dem¨¢s grandes espa?oles. Manuel de Falla aprob¨® personalmente su versi¨®n pian¨ªstica de El amor brujo y Joaqu¨ªn Turina suscribi¨® que la Triana que hac¨ªa Galve era el Alb¨¦niz m¨¢s perfecto que hab¨ªa escuchado nunca.

Residente en Espa?a, Francia y Am¨¦rica, hace unos a?os se cumpli¨® un viejo deseo de Galve: el retorno a su Zaragoza natal. All¨ª ha desarrollado una interesante labor asesora y pedag¨®gica, interrumpida s¨®lo hace unos meses por razones de grave enfermedad.

Otro aragon¨¦s de val¨ªa y prestigio es Ant¨®n Garc¨ªa Abril, figura destacad¨ªsima en la generaci¨®n musical de los a?os cincuenta dentro de la cual se alza con un pensamiento y un estilo diferentes.

Sigue la tradici¨®n espa?ola que sabe renovar con los rasgos espec¨ªficos de su inventiva y practica la tonalidad de una manera libre. Defiende, como hizo en su discurso de ingreso en la Real Academia de Bellas Artes, los valores de la melod¨ªa. En su largo cat¨¢logo destacan un grupo de cantatas sinf¨®nico-corales, grandes obras para orquesta y para guitarra con orquesta, as¨ª como p¨¢ginas de c¨¢mara, pian¨ªsticas y numerosas canciones. En estos momentos, tiene entregada la ¨®pera Divinas palabras, que ser¨¢ el primer estreno del futuro Teatro Real de la ?pera.