El Instituto Catal¨¢n de la Salud, condenado a pagar 60 millones por contagio de sida de una familia

Un juez de Barcelona ha condenado al Instituto Catal¨¢n de la Salud (ICS) a pagar 60 millones de pesetas a los tres miembros de una familia -20 millones a cada miembro contagiados con el virus del sida, en una sentencia en la que se admite la posibilidad de que el padre transmitiera la enfermedad a su mujer y a uno de sus hijos.El juez de lo Social n¨²mero 27 de Barcelona, Francisco Bosch, reconoce en su resoluci¨®n que, "aunque no existe certeza cient¨ªfica de la v¨ªa de contagio, dado el tiempo transcurrido desde que se produjo y el desconocimiento existente entonces de la enf¨¦rmedad", y no puede resolverse con pruebas directas, se resuelve por v¨ªa de presunciones.

Transfusi¨®n contaminada

El magistrado afirma que la Seguridad Social debe asumir las indemnizaciones por el da?o producido a la familia como beneficiaria de este servicio, despu¨¦s de que el padre, Salvador C., afectado por una insuficiencia renal cr¨®nica, se contagiara con el virus al sersometido a transfusiones de sangre en el hospital de Bellvitge entre 1983 y 1984.El juez indica que, "sin perjuicio de un ineliminable grado de inseguridad", debe tenerse por probado el hecho de que "todo apunta en la ¨²nica direcci¨®n de que el contagio ocurri¨® por medio de las transfusiones al padre, y desde ¨¦ste a sus familiares".

La familia solicit¨® el pago de 200 millones de pesetas al ICS y a dos hospitales al atribuir el contagio de Salvador a las transfusiones que recibi¨®, y estimar que la esposa, Isabel Lurqui, debi¨® de contagiarse con toda l¨®gica por v¨ªa sexual, especialmente si se tiene en cuenta que a Salvador Campillo no se le notific¨® que ten¨ªa el sida hasta d¨ªciembre de 1989, pese a que los m¨¦dicos ya lo sab¨ªan, probablemente en 1986. La reclamaci¨®n planteaba, asimismo, que el hijo adquiri¨® la enfermedad. por el contacto continuo con sus padres, caso excepcional y no descrito cient¨ªficamente.

Por su parte, el Instituto Catal¨¢n de la Salud neg¨® durante el juicio esta posibilidad, y sostuvo, por el contrario, que la madre debi¨® ser el primer miembro de la familia que contrajo la enfermedad, por causas ajenas a la asistencia sanitaria, y que transmiti¨® el sida al hijo durante el embarazo y al marido por relaciones sexuales.